Crítica: Wednesday (Merlina) (2022)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

3 atómicos: buenaUSA, 2022: Jenna Ortega (Merlina Addams), Gwendoline Christie (Larissa Weems), Riki Lindhome (Dra. Valerie Kinbott), Emma Myers (Enid Sinclair), Hunter Doohan (Tyler Galpin), Percy Hynes White (Xavier Thorpe), Christina Ricci (Marilyn Thornhill), Victor Dorobantu (Dedos), Catherine Zeta-Jones (Morticia Addams), Luis Guzmán (Homero Addams)

Creada por Mark Millar & Alfred Gough, basados en los personajes de Charles Addams

Trama:  Merlina Addams se ha vuelto un dolor de cabeza, incluso para sus excéntricos padres. Luego de atacar sangrientamente a los matones que acosaban a su hermano Pericles, Merlina es expulsada de su vieja escuela y puesta bajo supervisión judicial, quedando confinada en la exclusiva academia Nevermore. Pero Nevermore no es una institución normal sino una que alberga seres sobrenaturales y mágicos, un ambiente con el cual Merlina choca rápidamente. Decidida a escaparse, los planes de fuga de la chica cambian por completo cuando ve cómo un monstruo asesina a uno de sus compañeros de clase. Con el cadáver desaparecido – y sin que nadie crea su versión – Merlina decide resolver el misterio por su cuenta, descubriendo que hay muchos mas desaparecidos de los que la oficina del sheriff cuenta, y que son considerados víctimas del ataque de un oso salvaje. Las conspiraciones se suceden, los misterios se multiplican y las consecuencias afectan incluso a sus padres – antiguos alumnos de Nevermore e involucrados en un asesinato que nunca se resolvió -. La búsqueda de la verdad se vuelve imperiosa para Merlina Addams, la cual no le teme a nadie y no duda en sortear todo tipo de obstáculos en su investigación, incluso cuando ello ponga en riesgo su propia vida.

Crítica: Wednesday (Merlina) (2022)

Tim Burton, excéntrico como en sus mejores épocas; un personaje genial; Danny Elfman con una partitura maravillosa como hacía rato no se escuchaba; un comienzo atrapante y una intérprete de lujo. ¿Qué podía salir mal?. Bue… que la cuestión del misterio – el whodunnit – no funciona. Para darle aire y escenario propio a Merlina Addams la separan de su familia, la mandan a una escuela plagada de seres fantásticos, hay una muerte… y eso termina por convertir a la historia en un animal de otra especie, algo así como un híbrido entre el Hogwarts de Harry Potter y El Mundo Oculto de Sabrina. Ok, no es un dechado de originalidad – y está a años luz de las chapucerías ingenuas de John Astin y Carolyn Jones, incluso de las de Raúl Juliá y Anjelica Huston – pero, por un rato funciona. El drama es que, por mas que se llenen la boca en los afiches y publicidades que viene “de la mente de Tim Burton”, el maestro oscuro sólo dirige la primera mitad de la temporada – la mejor – y sirve para establecer el rumbo y los perfiles de los personajes. Burton hace lo que mejor hace – tratar a los freaks con cariño y empapar todo con mucho humor negro – y la serie funciona de maravilla hasta el glorioso baile gótico de Jenna Ortega – el cual, a esta altura, es un fenómeno viral -… para irse desplomando lentamente con el recambio de Burton por directores mas chatos, enredarse en exceso con el misterio, dejar de lado los personajes fascinantes y caer en la repetición, y terminar por estrellarse en el capítulo final con un clímax plagado de Deus Ex Machinas. Mientras que la Merlina del principio es una criatura fascinante, amarga y decrépita por naturaleza pero llena de gestos fascinantes, para el final de la temporada es un cliché repetitivo, deprimente y detestable en donde uno no termina por entender por qué el resto de los alumnos del colegio oscuro al que asiste insisten con tolerarla y tenerla cerca.

Eso no quita que Wednesday tenga su cuota de momentos gloriosos y haya un par de giros novedosos, pero la diferencia de los cuatro primeros capítulos con el resto es brutal. La elección de Jenna Ortega es un casting inspiradísimo – alguien decía que estaba a la altura de Hugh Jackman y Patrick Stewart como Wolverine / Profesor X (gente que nació para interpretar ese personaje) – y es por ella que uno termina devorándose la temporada de una sentada pero la historia y los secundarios son agua de otro caudal. Mientras que Gwendoline Christie (vestida como dama clásica de misterio de Hitchcock, versión gigante, al estilo de Tippi Hedren en Los Pájaros) y Emma Myers brillan como la directora siniestra y misteriosa / la modosita compañera de cuarto, el resto está desperdiciado por un libreto que no les da lugar para el desarrollo y solo terminan cayendo en el estereotipo, como es el caso de la morena Joy Sunday. Hay casas y escuderías, no hay Quidditch pero sí competencia de canoas y un montón de lo que hay en pantalla parece reciclado de películas mejores y mas famosas. Pero el hilo que mantiene todo atado es Ortega – robótica, deliciosamente mala, ferozmente antipática y cruel aunque con atisbos de que late un corazón dentro de su pecho – y, sorprendentemente, el duelo que mantiene con su madre (Catherine Zeta-Jones, increíblemente efectiva como Morticia) funciona mejor de lo esperado. La pifia del casting es Luis Guzmán, que se ve demasiado gordo, viejo y lento como Homero Addams y carece del carisma / el fuego de amante latino que precisa el personaje (¿dónde estaba Antonio Banderas cuando mas se lo necesitaba?). Guzmán es muy bueno haciendo papeles secundarios despistados o ridículos, hablando tonterías sin sentido pero acá le piden un lustre que no tiene, aún cuando el casting respete el physique du rol y las raíces latinas del personaje.

Wednesday tiene sus momentos y, si hacen una segunda temporada, hay muchas cosas para pulir en especial con el tema de los misterios. A Burton había que darle mas espacio y dejar que moldeara la serie a su gusto, no dejarlo como si fuera el director de un piloto de TV que solo traza los lineamientos generales y abandona la cocina a mitad de la cocción. Aun con su reciclaje de temas hay cierto potencial en Merlina para que sea, al menos, un entretenimiento disfrutable y sólido. Acá se queda sin nafta a mitad de camino, resolviendo tramas de apuro sobre el final y asfixiando el carisma de los pocos personajes que estaban desarrollados y valían la pena. Hay tiempo y dinero para corregir el rumbo, novedades que espero encontrar en una segunda temporada mucho mas pulida.

LOS LOCOS ADDAMS… ERRGGGG

Los Locos Addams (1991) – Addams Family Values (1993). También comentamos la versión animada Los Locos Addams (2019) y la aventura en solitario de Merlina (Wednesday) (2022)