Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco
USA, 2022: Daniel Craig (Benoit Blanc), Edward Norton (Miles Bron), Janelle Monáe (Andi Brand), Kathryn Hahn (Claire Debella), Leslie Odom Jr. (Lionel Toussaint), Kate Hudson (Birdie Jay), Dave Bautista (Duke Cody)
Director: Rian Johnson – Guión: Rian Johnson
Trama: Mayo 2020, en plena pandemia de Covid. El billonario Miles Bron ha convocado a un grupo de amigos a su reunión anual en su isla privada en Grecia. Allí todos los invitados – influencers, modelos, científicos, ex socios de negocios… toda gente con la cual Miles comparte intereses de trabajo – deberán resolver un misterio que Bron ha construido… y que se trata de adivinar quién lo matará antes de la medianoche. Lo que Miles no contaba era que, entre los recién llegados a la isla, se encuentra el prestigioso detective privado Benoit Blanc, el cual en menos de cinco minutos resuelve el misterio y le arruina el juego antes de que el mismo empiece. Y mientras el grupo decide ahogar su frustración con los manjares y los lujosos tragos que Bron ha puesto a su disposición, Blanc se reúne por su cuenta con el millonario, explicándole que él nunca debería haber sido invitado a la jornada… y teme que la causa secreta por la cual ha sido invocada su presencia es que un crimen real esté a punto de cometerse. Y aunque Bron es un soberbio que sólo cree en lo que él piensa, hechos misteriosos comienzan a sucederse y hay un tufillo a conspiración en todo el asunto. ¿Podrá Blanc detener el asesinato de Bron antes que termine el fin de semana?. ¿O es todo parte de una charada que apunta en secreto a asesinar otro de los invitados en vez de al billonario?.
A Glass Onion le falta un pelín para ser un clásico brillante. Rian Johnson y Daniel Craig van en dupla, se divierten como locos, rizan el rizo hasta lo imposible y le dan un ritmo cómico mayor a la primera entrega (Knives Out). El problema son los cinco minutos finales en donde Johnson no encuentra un desenlace lógico y debe apelar a un Deus Ex Machina moral e improbable. Glass Onion es mas entretenida que la original, pero Knives Out es definitivamente un filme mucho mas sólido (en cuanto al misterio y la pesquisa) que éste.
Hay cameos de todo tipo y color, y la presencia de algunas fotos (y el cameo de Stephen Sondheim) aturden en pistas para entendidos que a Johnson le encantó El Fin de Sheila. Si bien acá la comentamos (y si puede verla en algún lado, hágalo), mas vale un pequeño resumen: millonario con demasiado tiempo libre invita a sus amigos cínicos, aburridos y adinerados a pasar un fin de semana con él en su yate aparcado en una remota isla del Mediterráneo. Se trata de una reunión anual donde el millonario construye un elaborado juego de misterio con pistas diseminadas por todos lados… con la excepción que al tipo lo matan a mitad de camino y un par de invitados amantes del misterio se convierten en improvisados detectives dispuestos a resolver el asesinato. Acá todo parece indicar que Glass Onion va por el mismo camino… solo que al millonario anfitrión no lo matan sino que son los invitados los que caen como moscas. Y cuando creés que el filme va por ese camino Johnson vuelve sobre sus pasos y te salta con una versión alternativa donde nada es lo que parecía.
Si Craig buscaba jubilarse de James Bond, Benoit Blanc es su apuesta mas segura y brillante. Es la antítesis del agente secreto, y un pase libre para que Craig se exhiba como eximio comediante (y supremo actor que lo es). Ahí te das cuenta que fue el mejor actor que tuvo la saga 007, considerando los magros dividendos artisticos que consiguieron otros intérpretes que pasaron por la serie (a excepción de Connery). Craig tiene talento de sobra para abordar el género que se le plazca y seguir siendo estrella sin portar una Walther PPK. Acá su Blanc crece mas allá del sabueso de cartón pintado para transformarse en algo mas redondo y tridimensional. Es gay (lo que da para un cameo memorable entre muchos que hay en el filme), es sibarita, está lleno de mañas, se viste como si estuviera en 1920 y termina sorprendiendo a todos con sus talentos detectivescos. Como el filme está ambientado durante la pandemia, Blanc hace rato que está encerrado en su departamento sin un caso a la vista y con un hambre de misterios que se vuelve insoportable. Aparece una invitación para participar del dichoso juego de misterio que monta Edward Norton (devenido en una caricatura de Elon Musk) y es como si soltaras a un galgo en un campo. Craig / Blanc desarma todas las expectativas de Norton a la vez que apabulla al resto con sus excentricidades… hasta que las cosas se salen de lo previsto.
Si bien todos están excelentes (me parece genial lo de Dave Bautista; no es la primera vez que Craig invita a un actor que le gustó a uno de sus shows, ya hizo lo mismo con Ana de Armas en Sin Tiempo Para Morir), la que brilla es Janelle Monae. No solo es bella y la elegancia en persona, sino que es sutil y multifacética y se saca chispas con Craig. Cuando ella está en pantalla es imposible sacarle la mirada.
Glass Onion es una película 99% excelente; lástima el empujón del final. Superrecomendada por donde la mires – mas vale no hablar demasiado de ella para develar sus sorpresas, pero andá a verla a ojos cerrados -, y con la esperanza de que la saga siga creciendo con ese mix de misterio, innovación y comedia imperdible… y con un Craig afilado como una navaja y en su mejor momento actoral.