Crítica: The Harder They Fall (Mas Dura Será la Caída) (2021)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

Recomendación del EditorUSA, 2021: Jonathan Majors (Nat Love), Idris Elba (Rufus Buck), Delroy Lindo (Bass Reeves), Zazie Beetz (Mary Fields), Regina King (Trudy Smith), LaKeith Stanfield (Cherokee Bill)

Director: Jeymes Samuel – Guión: Jeymes Samuel & Boaz Yakin

Trama: Rufus Buck ha masacrado la familia de Nat Love cuando éste era chico. Ahora Love ha crecido y se ha entrenado para convertirse en un feroz forajido que sabotea todas las operaciones de Buck. Habiéndose liberado de prisión – y confiado en concretar su utopía de fundar un pueblo negro independiente en pleno lejano oeste – , Buck descubre que la mitad de su fortuna está en manos de Love. Todo ello llevará a un enfrentamiento a muerte entre ambos pistoleros, donde los términos medios se han agotado y sólo espera la masacre.

Crítica: The Harder They Fall (Mas Dura Será la Caída) (2021)

Spaghetti Western + Blaxploitation: una combinación explosiva. He aquí un director que toma jugadísimas decisiones artísticas – estos vaqueros hablan como gangstas, usan la palabra con N que tanto odian y todo mechado con R & B, Reggae y música Soul -, y sigue al pie de la letra todas las lecciones de manual de Sergio Leone – si vamos a copiar, copiemos del mejor director de westerns del mundo (tomá esa, John Ford!) -. El tema es que semejante combo, tan extraño y bizarro como a primera vista aparece, termina funcionando como los dioses. No, The Harder They Fall no reinventa el Western pero homenajea sus mejores momentos con una gloriosa clase de estilo. Ojalá hubiera mas películas así.

Los libretistas de esto se agarran del dato histórico que, en el Lejano Oeste, uno de cada cuatro vaqueros era negro – o sea, que los westerns plagados de gente blanca teta como John Wayne eran falaces (incluso en esa época los indios made in Hollywood estaban protagonizados por tipos caucásicos maquillados) -. Como el dato puede ser veraz y a la vez poco probable (de que miles de forajidos negros vivan en pueblos solo de morenos en un condado lleno de morenos), el script se lo toma para la chacota (“tenemos que robar un banco en la ciudad tal… es un pueblo blanco”… y el pueblo es literalmente blanco, con arena caliza blanca como el azúcar, todas las casas pintadas de blanco, gente blanca e incluso el interior del blanco está pintado 100% de blanco!). Como sea, mentíme que me gusta, sobre todo si me das algo super entretenido. Los duelos son formidables, las tomas son Leone puro, los primerísimos planos se repiten, y no hay un tipo que no tenga pasado limpio – incluso los buenos son forajidos que viven asaltando a ladrones de bancos -.

Jeymes Samuel – que es músico y hermano de Seal – ya había experimentado con un Western negro en el 2013 con They Die by Dawn, la cual fue masacrada por la crítica. Acá ha pulido la idea y el estilo a la enésima potencia y, aprovechando lo suelto de bolsillo que son los tipos de Netflix, filmó el Western sin restricciones artísticas de ningún tipo. El casting es un sueño – hasta Jonathan Majors (que me caía mal luego de su incursión Marvel en Loki) actúa como los dioses, eso sin contar con Idris Elba, Regina King, Delroy Lindo (un tipo formidable), LaKeith Stanfield, incluso una intensa Zazie Beetz… y algunas sorpresas del cast como la deliciosa Danielle Deadwyler (que hace de tomboy y se ve obligada a disfrazarse como dama elegante en un determinado momento del filme, en una secuencia deliciosa), RJ Cyler como un pistolero talentoso y bocón y Edi Gathegi como el tirador infalible que hace de respaldo del héroe -.

La influencia obvia es Erase una Vez en el Oestehe aquí otro niño al que le masacraron la familia y ahora, disciplinado como pistolero, va en busca de venganza -. El vengador es Majors, el cual tiene una cicatriz de cruz en el entrecejo, lo que le da un aire de angel justiciero. El malo, mas malo que la peste, es Idris Elba, reflexivo e implacable, acompañado por la King como amante y jefa de asesinos. Como Elba ha logrado escapar de la prisión – bah, en realidad lo indultaron a cambio de que liquide a un corrupto general del ejército -, ahora Majors, su ex amante Beetz y todos sus aliados van tras su búsqueda. Elba tiene un plan que suena tan bizarro como probable – antes de ir a la cárcel ha montado su propio pueblo de morenos, esperando convertirse en un terrateniente respetado (o temido, da igual); pero ahora el gobierno amenaza con redistribuir esas tierras así que ha estado robando bancos todo el tiempo para poder comprárselas al estado y cumplir con su utopía -. El tema es que Majors justo le ha robado la mitad de los fondos y el plazo para la adquisición de las tierras se acerca. Lo que sigue es este enfrentamiento de dos tipos que se odian a muerte, se hacen chicanas de todo tipo y, lo que es mejor, tienen largos monólogos sobre su pasado y sobre las criaturas monstruosas en que se han convertido. (alerta spoilers) Es posible que el final sea previsible pero yo no lo vi venir y definitivamente es desgarrador (fin spoilers). Y la posibilidad de una secuela me entusiasma con locura.

The Harder They Fall es pura acción, estilo, humor, entretenimiento… y tragedia. Todos tienen una historia detrás y es interesante. Es cine del bueno, super sólido y super recomendable. Ojalá mas cineastas se olvidaran de los prejuicios (¿como vamos a copiar un pastiche europeo?) y filmaran mas al estilo de los spaghetti western porque eran geniales (y estas palabras van para vos, Tarantino!). Es un estilo que va joya en estos tiempos ya que es como un comic filmado, con escenas exageradas, estilo a rabiar y personajes mas grandes que la vida misma. Y The Harder They Fall es una muestra gloriosa de todo ello.