{"id":33239,"date":"2022-06-16T15:48:12","date_gmt":"2022-06-16T18:48:12","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/?page_id=33239"},"modified":"2024-01-11T18:24:02","modified_gmt":"2024-01-11T21:24:02","slug":"m-1951","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/m-1951\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: M (El Maldito) (1951)"},"content":{"rendered":"<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><strong><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/recomendaciones-editor-indice\/\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"wp-image-12187 size-full alignright\" title=\"4 at\u00f3micos: muy buena\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-4.webp\" alt=\"4 at\u00f3micos: muy buena\" width=\"200\" height=\"40\" \/><\/a>USA, 1951: David Wayne (Martin Harrow), Martin Gabel (Charlie Marshall), Howard Da Silva (Inspector Carney), Luther Adler (Dan Langley), Raymond Burr (Pottsy), Steve Brodie (Teniente Becker)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: Joseph Losey &#8211; Gui\u00f3n:\u00a0Leo Katcher &amp; Norman Reilly Raine, basados (sin acreditar) en el filme de 1931 escrito por\u00a0Fritz Lang &amp; Thea von Harbou<\/strong><\/p>\n<p><strong><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/recomendaciones-editor-indice\/\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"wp-image-24154 size-full aligncenter\" title=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/recomendacion-editor.jpg\" alt=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" width=\"200\" height=\"40\" data-wp-editing=\"1\" \/><\/a><\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>\u00a0Martin Harrow es un tipo apocado. Vive en una pensi\u00f3n de mala muerte en Los Angeles y no ha podido conseguir trabajo despu\u00e9s de que le dieran el alta en un hospital siqui\u00e1trico. Con todo el tiempo libre del mundo Harrow se ha dedico a acosar ni\u00f1as, a las que fascina con golosinas y chistes y termina llev\u00e1ndoselas a callejones donde las asesina. Mientras tanto la polic\u00eda est\u00e1 agobiada con los reclamos del p\u00fablico y lo \u00fanico que saben es que el asesino posee un extra\u00f1o fetichismo con los pies de las ni\u00f1as, raz\u00f3n por la cual colecciona sus zapatos. Haciendo una <em>razzia<\/em> tras otra el intenso accionar policial ha mellado los ingresos del mundo del crimen, lo que los lleva a montar su propia cacer\u00eda del asesino para calmar las aguas y volver a la normalidad sus turbios negocios. Para ello utilizan su enorme red de influencias en la calle &#8211; <em>desde corredores de apuestas hasta taxistas y prostitutas<\/em> &#8211; los cuales vigilan d\u00eda y noche a aquellos varones sospechosos que andan en solitario en compa\u00f1\u00eda de ni\u00f1as. Y cuando un vendedor de globos reconoce a Harrow como el adulto que le compr\u00f3 golosinas a una de las \u00faltimas v\u00edctimas del asesino serial, una masiva cacer\u00eda humana es montada de apuro, cercando al man\u00edaco en un gigantesco edificio de oficinas. Porque los criminales pueden ser mas despiadados que los mas duros polic\u00edas, la \u00fanica esperanza de Harrow consiste en que alguien llame a la Ley para que venga en su ayuda&#8230; antes de que sea linchado por una multitud enfurecida y asqueada de sus cr\u00edmenes.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"aligncenter wp-image-33279 size-full\" title=\"Cr\u00edtica: M (El Maldito) (1951)\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/foto-m-1951.jpg\" alt=\"Cr\u00edtica: M (El Maldito) (1951)\" width=\"850\" height=\"400\" srcset=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/foto-m-1951.jpg 850w, http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/foto-m-1951-300x141.jpg 300w, http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/foto-m-1951-768x361.jpg 768w\" sizes=\"(max-width: 850px) 100vw, 850px\" \/><\/p>\n<p>La curiosidad &#8211;<em> y <strong>YouTube<\/strong><\/em> &#8211; nos han tra\u00eddo a este microg\u00e9nero del cine intitulado<em> &#8220;remakes de grandes obras de Fritz Lang&#8221;<\/em>. Hace unas semanas le toc\u00f3 a <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/dr-m\/\">Dr. M \/ Club Extinction<\/a> de Claude Chabrol &#8211;<em> basado libremente en <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/mabuse-spieler\/\">Doctor Mabuse, el Jugador<\/a> <\/em>&#8211; y ahora es el turno de la <em>remake<\/em> norteamericana de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/m\/\">M, el Vampiro de Dusseldorf<\/a>, orquestada en 1951 por el productor hist\u00f3rico del filme (Seymour Nebenzal) y a cargo del director Joseph Losey (el mismo de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/these-damned\/\">These Are the Damned<\/a> y la fallida <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/modesty-blaise\/\">Modesty Blaise<\/a>).<\/p>\n<p>En s\u00ed <strong>M 1951<\/strong> es una pel\u00edcula curiosa. Tal como ocurr\u00eda con el filme original, la <em>remake<\/em> es avanzada a su tiempo &#8211;<em> hablamos de perversiones, fetichismos y asesinos seriales de ni\u00f1as en una \u00e9poca en donde no pod\u00edas filmar un inodoro ni un matrimonio compartiendo una cama gracias a las f\u00e9rreas restricciones del <strong>C\u00f3digo Hays<\/strong> <\/em>-. El c\u00f3mo fue posible hacer la <em>remake<\/em> en una \u00e9poca tan puritana reside en los resquicios que Nabenzal encontr\u00f3 en el c\u00f3digo &#8211;<em> si se trataba de un filme considerado culturalmente un cl\u00e1sico se pod\u00eda montar una remake textual del mismo, no importa lo zarpado que fuera el tema<\/em> -. De todos modos el libreto introduce algunos cambios &#8211;<em> hay un par de personajes nuevos como el abogado corrupto y borrach\u00edn que trabaja para los mafiosos; y otros que son obvios, como trasladar la acci\u00f3n de la Alemania natal a los suburbios de Los Angeles<\/em> &#8211; que hace que la versi\u00f3n de Losey tenga su propia personalidad. Losey apunta al gigantismo de los escenarios &#8211; <em>en un momento el sic\u00f3pata est\u00e1 corriendo por unas escalinatas enormes, atravesando t\u00faneles monumentales u observando a sus perseguidores desde las grandes alturas de un edificio colosal (el fastuoso edificio <strong>Bradbury<\/strong>, el mismo que usaron en el cl\u00edmax de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/blade-runner\/\">Blade Runner<\/a> y que es una torre antigua de oficinas plagado de balcones y patios internos)<\/em> &#8211; y al uso de la gloriosa fotograf\u00eda blanco y negro de la \u00e9poca para crear clima. Definitivamente es una visi\u00f3n despojada de la elegancia de los filmes de la \u00e9poca &#8211;<em> ac\u00e1 vemos barrios pobres, conventillos, bajos fondos, gente desempleada<\/em> -. En ese contexto deambula David Wayne &#8211; <em>un tipo que hac\u00eda comedias en esa \u00e9poca y que lo conozco como el padre del detective titular en la serie de <strong>Ellery Queen<\/strong> de los a\u00f1os 70s con Jim Hutton<\/em> -, el cual es un tipo fr\u00e1gil y nervioso. El tipo se acerca a las ni\u00f1as, le compra globos y golosinas, y por \u00faltimo las estrangula en un callej\u00f3n. No hay un patr\u00f3n rastreable como para extraer alg\u00fan tipo de pista as\u00ed que la polic\u00eda est\u00e1 perdida y dando manotazos de ahogado. Y como vive haciendo redadas, el bajo mundo de Los Angeles comienza a resentir sus ingresos as\u00ed que decide participar en el asunto y cazar al man\u00edaco por su cuenta. Como cuenta con soplones por todos lados &#8211;<em> taxistas, pandilleros, limpiabotas, corredores de apuestas, vendedores de droga, etc<\/em> &#8211; hay miles de ojos en la ciudad que vigilan el movimiento extra\u00f1o de cualquier adulto acompa\u00f1ado de una ni\u00f1a. Semejante cacer\u00eda humana da sus frutos cuando un ciego que vende globos en la feria de diversiones local cree identificar a Wayne como el hombre que estuvo con una de las ni\u00f1as asesinadas hace un par de d\u00edas. Como en <strong>M<\/strong>, al asesino lo identifican por tararear siempre la misma melod\u00eda &#8211;<em> aunque aqu\u00ed Wayne usa una flauta, como para tirar la idea del Flautista de Hamelin que cautivaba a sus v\u00edctimas con su melod\u00eda<\/em> -. De ese modo los pandilleros lo siguen y lo acorralan en el edificio Bradbury; mientras tanto la polic\u00eda ha estado investigando a tipos que han dado de alta recientemente en los manicomios locales y ha descubierto la pensi\u00f3n en donde vive Wayne, en la cual hay cordones de zapatos por todos lados&#8230; llegando incluso a descubrir el escondite secreto en donde guarda los zapatitos de sus v\u00edctimas. Ya no hay escape posible para Wayne, sus fechor\u00edas han llegado a su fin.<\/p>\n<p>Ciertamente algunos cambios de la historia funcionan mejor que otros. El jefe del bajo mundo es un mafioso que parece salido de un cap\u00edtulo de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/los-intocables\/\">Los Intocables<\/a>\u00a0versi\u00f3n Robert Stack (Raymond Burr hace de mat\u00f3n en uno de sus primeros papeles; se lo ve enorme, agrio, torpe y despiadado). El jefe de polic\u00eda no parece muy avispado que digamos. El c\u00f3mo dan con el asesino es, quiz\u00e1s, demasiado abrupto. Pero, a cambio, la cacer\u00eda humana en el interior del edificio Bradbury resulta impresionante. El jefe mafioso toma el lugar con pr\u00e1cticamente un ej\u00e9rcito y comienzan a irrumpir en los cientos de oficinas que hay en el complejo mientras David Wayne se desespera para romper la cerradura del local donde ha quedado encerrador por error &#8211; <em>el sereno del lugar simplemente le puso cerrojo a todo y ahora no puede escapar<\/em> -. Y, lo que es peor, el flaco ha quedado encerrado con su \u00faltima v\u00edctima, una nena que est\u00e1 comenzando a desesperarse porque pasan las horas y no regresa a su casa. Ni que hablar cuando los mafiosos logran irrumpir y le ponen las manos a Wayne: es una escena escalofriante &#8211;<em> es un animal acorralado, gritando de desesperaci\u00f3n porque sabe que \u00e9stos no son la polic\u00eda y se la van a dar mal&#8230; muy mal<\/em> -. Ni que hablar cuando lo lanzan a un estacionamiento subterr\u00e1neo en donde gente de toda clase &#8211;<em> desde vecinos hasta mafiosos<\/em> &#8211; lo rodean por centenares. Es una escena asfixiante en donde Wayne exuda terror por todos sus poros &#8211;<em> a\u00fan cuando fueran actores y sea una escena montada, se arma un clima denso en donde no ser\u00eda muy dif\u00edcil que la gente se mentalice como una turba y linche de verdad al actor al hacerse carne de la indignaci\u00f3n general que transpira el libreto<\/em> -.<\/p>\n<p>Mientras que lo de David Wayne es genial &#8211;<em> lo suyo rivaliza con la performance de Peter Lorre del original<\/em> -, donde la versi\u00f3n de Losey trastabilla es en la secuencia del juicio popular, en donde el abogado borrach\u00edn y corrupto que responde al l\u00edder mafioso decide desplegar sus propias alas y defender no solo al asesino sino a acusar a su jefe de ser un corruptor sistem\u00e1tico. Como ocurre en toda pel\u00edcula filmada bajo el <strong>C\u00f3digo Hays<\/strong> todo ello culmina con el jefe ensuci\u00e1ndose las manos y baleando al abogado rebelde que durante cinco minutos fue asaltado por un ataque de dignidad &#8211;<em> justo cuando ca\u00eda la cana<\/em> -, cosa que todos los criminales terminen apresados por la polic\u00eda. El alegato de Wayne no es muy prolijo &#8211;<em> todos los varones son malos por naturaleza y deben ser castigados severamente desde chicos para despojarlos de su crueldad innata<\/em> -, con lo cual el cl\u00edmax es el \u00fanico momento en donde<strong> M 1951<\/strong> pierde el rumbo impecable que se hab\u00eda trazado.<\/p>\n<p><strong>M versi\u00f3n 1951<\/strong>\u00a0es un excelente filme. Obviando un par de detalles menores al final, el resto del relato es excelente y prospera por fuera de la sombra del magn\u00edfico original de Fritz Lang. Es sorprendentemente moderna y avanzada para su \u00e9poca por los temas que trata, y es brillante en su puesto en escena. Definitivamente un filme mas que recomendable.<\/p>\n<h4>M, EL VAMPIRO DE DUSSELDORF<\/h4>\n<h5><em>Ac\u00e1 revisamos el original de Fritz Lang <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/m\/\">M, el Vampiro de Dusseldorf<\/a> (1931), y la remake norteamericana de Joseph Losey <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/m-1951\/\">M (El Maldito)<\/a> (1951)<\/em><\/h5>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por Alejandro Franco USA, 1951: David Wayne (Martin Harrow), Martin Gabel (Charlie Marshall), Howard Da Silva (Inspector Carney), Luther Adler (Dan Langley), Raymond Burr (Pottsy), Steve Brodie (Teniente Becker) Director: Joseph Losey &#8211; Gui\u00f3n:\u00a0Leo Katcher &amp; Norman Reilly Raine, basados (sin acreditar) en el &#8230; <a title=\"Cr\u00edtica: M (El Maldito) (1951)\" class=\"read-more\" href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/m-1951\/\">Leer m\u00e1s<span class=\"screen-reader-text\">Cr\u00edtica: M (El Maldito) (1951)<\/span><\/a><\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/33239"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=33239"}],"version-history":[{"count":1,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/33239\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":34900,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/33239\/revisions\/34900"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=33239"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}