Director:\u00a0Drew Goddard – Gui\u00f3n: Drew Goddard<\/strong><\/p>\n Royale sin cheese.<\/strong><\/em><\/p>\n Hace 24 a\u00f1os (por Dios, como pasa el tiempo!) sali\u00f3 Pulp Fiction<\/a> y revolucion\u00f3 al planeta. Divertida, popular, iconoclasta y mucho mas inteligente de lo que parec\u00eda, Tiempos Violentos<\/strong> present\u00f3 a Quentin Tarantino al mundo (antes hizo Reservoir Dogs<\/strong>, pero qued\u00f3 reservada para cr\u00edticos, especialistas y, sobre todo, gente de est\u00f3mago fuerte) e hizo escuela. En las universidades de cine estudian la compleja estructura narrativa de Pulp Fiction<\/strong>, sus idas y vueltas en el tiempo, la manera de entrelazar historias y personajes. Y en los estudios salieron avalanchas de directores a copiarlo, desde Dos D\u00edas en el Valle<\/strong> hasta los filmes de Guy Ritchie (como Juegos, Trampas y Dos Armas Humeantes<\/a>), que es lo mas parecido que hay pero en versi\u00f3n british<\/em>. Un cuarto de siglo despu\u00e9s (y cuando la euforia pas\u00f3 su cuarto de hora) aparece este clon, que tiene un cast de lujo, un director y guionista genial (autor de los libretos de Alias<\/strong>, Lost<\/strong>, Cloverfield<\/a>, The Martian<\/a>, Guerra Mundial Z<\/a>, productor del Daredevil<\/a> de Netflix<\/strong> y responsable de esa joyita que es La Caba\u00f1a del Terror<\/a>)… y falla miserablemente el tiro, err\u00e1ndole por una legua al blanco. El drama no s\u00f3lo pasa por el abrupto cambio de tono sobre el final, sino porque todo es demasiado leeeeento<\/em>. Las escenas duran una eternidad, y aunque est\u00e1n bien escritas y bien actuadas (y terminan con un bang!), se vuelven sopor\u00edferas por lo interminable.<\/p>\n Mezcla de Four Rooms<\/a> y Pulp Fiction<\/a>, Bad Times at the El Royale<\/strong> se da ma\u00f1a para confluir una serie de historias y personajes interesantes en un solo lugar, un hotel ubicado en la frontera de los estados de California y Nevada (que homenajea al Cal Neva<\/strong>, un hotel de id\u00e9ntico estilo y ubicado en la misma zona lim\u00edtrofe, que Frank Sinatra ten\u00eda en los a\u00f1os 60). El chiste del hotel es que el l\u00edmite interestatal parte a las instalaciones en dos, y queda remarcado con una raya roja pintada en el suelo: pod\u00e9s alquilar habitaciones en California (el ala izquierda), la que son un d\u00f3lar mas caro por d\u00eda y el caf\u00e9 te lo cobran, o pod\u00e9s quedarte en Nevada donde no hay restricci\u00f3n de alcohol. Ah\u00ed llega un cura no muy santo que digamos (Jeff Bridges), una misteriosa morena que resulta ser una cantante de blues<\/em> en la mala (Cynthia Erivo), un vendedor de aspiradoras que no es lo que parece ser (Jon Hamm), y una hippie malhumorada que trae un secreto en el ba\u00fal de su auto (Dakota Johnson). No s\u00f3lo se registran en el hotel sino que pasan cosas raras, como Hamm sacando toneladas de micr\u00f3fonos ocultos en su cuarto, un conserje drogadicto, una chica secuestrada por la hippie (quien es su hermana e intenta rescatarla de un culto al estilo de Charles Manson, liderado por Chris Hemsworth), la morena acolchonando las paredes de su cuarto para cantar sin l\u00edmites… y el cura desarmando el piso del cuarto, buscando lo que parece ser un bot\u00edn oculto hace 10 a\u00f1os. Encima el hotel tiene un corredor oculto por donde espiar a los cuartos (y filmar a sus ocupantes) a trav\u00e9s de sus espejos de fondo falso.<\/p>\n \n Todo esto da para un delicioso licuado tarantinesco, la macana es que la prosa de Goddard no es tan inspirada como la de Quentin y, lo que es peor, Goddard se da ma\u00f1a para arruinar su propia pel\u00edcula, con un libreto demasiado indulgente que est\u00e1 enamorado de sus personajes y los deja hablar por horas, llevando al filme al exagerado metraje de 2 horas 20 de duraci\u00f3n. El cl\u00edmax por s\u00ed solo dura 40 minutos, y se hace eterno. Si hay algo que\u00a0Bad Times at the El Royale<\/strong> precisaba desesperadamente era a un tipo como Peter Jackson como libretista, alguien que pueda perfilar a un personaje en 3 l\u00edneas e hiciera las escenas mas cortas, chispeantes y eficientes. A la pel\u00edcula le sobra f\u00e1cil una hora por exceso de ret\u00f3rica y, aunque tiene sus momentos placenteros, llega un punto en que uno precisa un l\u00e1piz para dibujarse la raya del trasero. Las 2 horas 20 no pasan r\u00e1pido como ocurre en otros filmes mas entretenidos.<\/p>\n Los personajes son fant\u00e1sticos, y eso es lo que salva al filme. Jeff Bridges se despacha con una performance para el Oscar<\/em> (y eso que el filme no lo merece!), como un ex ladr\u00f3n de bancos que tiene un tumor en la cabeza y est\u00e1 perdiendo la memoria. La mirada perdida de Bridges cuando no coordina o no recuerda algo te parte el alma, y es una muestra mas del formidable actor que es. Cynthia Erivo tiene una voz prodigiosa y es hermosa, l\u00e1stima que sus canciones dilatan todo mucho mas de la cuenta. Dakota Johnson no es sexy pero sabe poner cara de mala, y su misi\u00f3n es realmente muy triste. Hasta Lewis Pullman, el conserje del hotel, tiene su momento de brillo. Y los mas flojos son Hamm (demasiado parlanch\u00edn, algo que no le va tan bien, precisaban a otro actor tipo Jim Carrey para el rol) y Hemsworth, el cual es blando no por performance sino porque el rol no est\u00e1 bien escrito. Se supone que es un dios sexy que irradia carisma, seduce jovencitas en problemas y tiene su culto mansonesco<\/em> con org\u00edas y robos para divertirse y sobrevivir, pero sus di\u00e1logos no son brillantes. Hemsworth hace lo que mejor le sale, que es lucir sexy sin camisa pero le falta villan\u00eda y corrupci\u00f3n.<\/p>\n Si el filme\u00a0arranca como una comedia negra tarantinesca – plagada de gore, chistes e historias retorcidas<\/em> -, en el \u00faltimo acto se vuelve seria y sombr\u00eda, la resoluci\u00f3n se hace eterna y, lo que es peor, poco cre\u00edble. Tortura y muerte no va con lo c\u00f3mico, y queda como un emparche para intentar cerrar todos los cabos, pero lo hace de una manera poco prolija, sin estilo.<\/p>\n Bad Times at the El Royale<\/strong> es un filme para pacientes. Muchos la defienden por sus m\u00e9ritos y sus dos primeros actos, pero para mi es demasiado larga y conversada. A los di\u00e1logos le falta chispa y brevedad, y al final le falta una soluci\u00f3n brillante de \u00faltimo momento, no un deus ex machina<\/em> de pobre credibilidad. Es en todo caso una intentona de Goddard por imitar a su maestro, l\u00e1stima que se olvid\u00f3 de pulir el libreto para hacerlo mas \u00e1gil, eficiente… y tarantinesco.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por Alejandro Franco USA, 2018: Jeff Bridges (padre Daniel Flynn), Cynthia Erivo (Darlene Sweet), Dakota Johnson (Emily Summerspring), Jon Hamm (Laramie Seymour Sullivan), Chris Hemsworth (Billy Lee), Cailee Spaeny (Rose Summerspring) Director:\u00a0Drew Goddard – Gui\u00f3n: Drew Goddard Trama:\u00a0Fines de los a\u00f1os 60. 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