{"id":11988,"date":"2017-09-14T17:37:54","date_gmt":"2017-09-14T17:37:54","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/time-machine-1960\/"},"modified":"2024-01-29T19:35:18","modified_gmt":"2024-01-29T22:35:18","slug":"time-machine-1960","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/time-machine-1960\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: La M\u00e1quina del Tiempo (The Time Machine) (1960)"},"content":{"rendered":"<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-4.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong>USA, 1960: Rod Taylor (George), Alan Young (David Filby\/James Filby), Yvette Mimieux (Weena), Sebastian Cabot (Dr Philip Hillyer), Whit Bissell (Walter Kemp)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: George Pal, Gui\u00f3n: David Duncan, basado en la novela hom\u00f3nima de H.G. Wells, Musica &#8211; Russell Garcia<\/strong><\/p>\n<p><strong><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/recomendaciones-editor-indice\/\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"wp-image-24154 size-full aligncenter\" title=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/recomendacion-editor.jpg\" alt=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" width=\"200\" height=\"40\" \/><\/a><\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>En v\u00edsperas de fin de a\u00f1o de 1899 en lnglaterra, el inventor George se re\u00fane con unos amigos para mostrarle su \u00faltima creaci\u00f3n: un peque\u00f1o dispositivo capaz de viajar a trav\u00e9s del tiempo. Una vez encendido el artefacto, \u00e9ste desaparece delante de los ojos de los presentes, pero los amigos de George descreen de sus teor\u00edas y piensa que se trata de alg\u00fan truco de magia. Despu\u00e9s de la velada, George se encuentra firmemente decidido a confirmar su teor\u00eda, y para ello se monta en una r\u00e9plica a escala humana del artefacto. Una vez encendida, la m\u00e1quina del tiempo lo llevar\u00e1 hacia el futuro, descubriendo el paso de guerras mundiales y ataques at\u00f3micos a Inglaterra. As\u00ed es como el inventor llega hasta el a\u00f1o 802.701, donde descubre que la humanidad ha evolucionado en la raza Eloi, seres que carecen de cultura y viven en un mundo paradis\u00edaco, aliment\u00e1ndose de frutos salvajes y disfrutando de la naturaleza. Pero a medida que George comienza a averiguar, encontrar\u00e1 que los Eloi no superan los 20 a\u00f1os, y que son criados como ganado por los Morlock, seres que viven en las profundidades y que habiendo sido parte de la raza humana, han evolucionado como monstruosos can\u00edbales.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/2017\/09\/boton-time-machine-1960.jpg\" alt=\"La Maquina del Tiempo (1960)\" width=\"120\" height=\"160\" \/> H.G. Wells es probablemente el m\u00e1s grande autor de ciencia ficci\u00f3n junto con Julio Verne. Esto no desacredita a todos los geniales autores posteriores, pero Verne y Wells son los creadores del g\u00e9nero. Y si bien Wells no ten\u00eda la erudici\u00f3n de Verne (<strong>20.000 Leguas de Viaje Submarino<\/strong> es una verdadera enciclopedia de biolog\u00eda marina), tuvo algunas de las m\u00e1s poderosas e influenciales mentes de la literatura fant\u00e1stica: basta con nombrar a tres de sus obras m\u00e1s relevantes: <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/war-worlds-1953\/\">La Guerra de los Mundos<\/a>, <strong>El Hombre Invisible<\/strong>, y <strong>La M\u00e1quina del Tiempo<\/strong>. Lamentablemente la obra fant\u00e1stica de Wells fue breve antes de dedicarse de lleno a la pol\u00edtica y abandonar la escritura de libros de ficci\u00f3n.<\/p>\n<p>Esta versi\u00f3n cinematogr\u00e1fica viene de la mano de George Pal, un artesano que hab\u00eda probado las mieles del \u00e9xito en 1953 con su cl\u00e1sica adaptaci\u00f3n de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/war-worlds-1953\/\">La Guerra de los Mundos<\/a>. En comparaci\u00f3n a dicha <em>space opera<\/em>, <strong>La M\u00e1quina del Tiempo<\/strong> es una obra m\u00e1s modesta, pero argumentalmente es mucho m\u00e1s s\u00f3lida. Las ideas y los personajes est\u00e1n mejor desarrollados, y el di\u00e1logo no suena a pastiche, adem\u00e1s de que Rod Taylor es un int\u00e9rprete con m\u00e1s carisma que Gene Barry (aunque no mejor actor).<\/p>\n<p>Sin duda el filme es un cl\u00e1sico, pero no uno exento de algunos defectos que tienen que ver m\u00e1s con el tono y los tiempos narrativos. El comienzo de la pel\u00edcula es perfecto; es un ejemplo de cine did\u00e1ctico, decidido a mostrar en t\u00e9rminos simples la teor\u00eda de lo que va a desarrollar. La explicaci\u00f3n de George acerca de la cuarta dimensi\u00f3n (y la demostraci\u00f3n de Hillyer de las tres dimensiones cl\u00e1sicas: largo, ancho y altura) es impecable, y quiz\u00e1s pueda reprocharse ciertas actitudes estereotipadas de los amigos del inventor, donde uno llega a plantearse seriamente si existe una relaci\u00f3n de verdadera amistad entre ellos. Tambi\u00e9n cae en algunos clis\u00e9s de la \u00e9poca: el di\u00e1logo a solas entre George y Filby muestra cierto conservadurismo muy propio de los 60, donde la ciencia era considerada a\u00fan una caja de Pandora que podr\u00eda traer consecuencias desagradables para la humanidad. Tambi\u00e9n en los di\u00e1logos de Filby se destila el dogmatismo cristiano de George Pal (<em>&#8220;no hay que atentar contra el orden y las leyes de la providencia&#8221;<\/em>), que tambi\u00e9n estaba presente en el final de <strong>La Guerra de los Mundos<\/strong> (cuando Forrester se refugia en la Iglesia, esperando el fin del mundo).<\/p>\n<p>Pero por suerte el filme no se explaya demasiado en debates profundos, y a los cinco minutos el espectador se encuentra montado en la m\u00e1quina del tiempo junto con George (cuyo apellido nunca se menciona, pero que en la m\u00e1quina figura grabado como H. George Wells). El dise\u00f1o del artefacto es un cl\u00e1sico, y es una ejemplo de simpleza y belleza, considerando que las partes fundamentales del aparato provienen realmente de un viejo trineo de nieve y un sill\u00f3n victoriano de barber\u00eda.<\/p>\n<p>Y cuando George pulsa la manivela es cuando la aventura comienza. Su visi\u00f3n del transcurso de las \u00e9pocas dado por los cambios de vestuario en el maniqu\u00ed del escaparate de la casa de enfrente es realmente otro ejemplo brillante de econom\u00eda de medios que utiliza Pal. Las paradas ocasionales de George est\u00e1n bien resueltas, mas all\u00e1 de ciertos conceptos que han quedado desfasados, como el de un supuesto ataque at\u00f3mico en la Inglaterra de 1966; pero la escena sirve para ilustrar al protagonista en lo que son los refugios y las sirenas de alarma, algo que se repetir\u00e1 cuando llegue al futuro en el a\u00f1o 802.701.<\/p>\n<p>Y es precisamente cuando arriba al mundo de los Eloi y Morlocks en donde el filme comienza a hacer agua. M\u00e1s de uno hubiera pedido m\u00e1s paradas intermedias de George en su viaje al futuro. El comienzo de la secuencia no est\u00e1 mal; la investigaci\u00f3n inicial del paisaje futurista y el descubrimiento de los Eloi. El problema es cuando \u00e9stos empiezan a hablar, que es cuando comienzan a notarse los agujeros del libreto. Simplemente los di\u00e1logos son anacr\u00f3nicos: los Eloi parecen carecer de sentimientos (por eso no rescatan a Weena del r\u00edo), pero por otro lado se procrean (<em>\u00bfc\u00f3mo?<\/em>). No tienen cultura pero son capaces de mantener un di\u00e1logo flu\u00eddo; y si la idea de Pal era la de pintarlos como ni\u00f1os crecidos, carece de consistencia con la delicada seducci\u00f3n que hace George de Weena sobre el final del film (la reacci\u00f3n deber\u00eda ser de temor o desconfianza; \u00bfno ser\u00eda acaso un caso de abuso infantil?). Conocen costumbres como sentarse a una mesa y comer con platos; y quiz\u00e1s hubiera sido mejor retratarlos como humanos en bruto, al estilo de <strong>El Planeta de los Simios<\/strong>, donde el reci\u00e9n llegado comenzara a ense\u00f1arles un poco de cultura y algunas palabras.<\/p>\n<p>Pero si la concepci\u00f3n del film acerca de los Eloi es inconsistente, mucho peor es la de los Morlocks. Como creaturas, el maquillaje termina por ser bizarro. Como raza, si supuestamente dominan el uso del telar para proveerles de ropas a los Eloi, hacen uso de l\u00e1tigos, manejan tecnolog\u00eda para llamar a los Eloi o poseen m\u00e1quinas, es incomprensible que sean bestias brutas y deformes. Deber\u00edan tener su propio lenguaje. Te\u00f3ricamente es una raza m\u00e1s evolucionada, pero la pel\u00edcula no lo presenta as\u00ed; y la incursi\u00f3n de George en las catacumbas de los Morlocks es demasiado expeditiva. Weena &#8211; que no conoc\u00eda hasta hace mucho el fuego &#8211; sabe ahora lo que es una antorcha, y que la tela tiene propiedades combustibles. Y con el agregado terrible que en las cuevas existe alg\u00fan tipo de l\u00edquido inflamable que George enciende por casualidad, y que sirve para brindar un <em>grand finale<\/em> explosivo a la secuencia. En ese sentido, la l\u00f3gica va a los saltos en dicha porci\u00f3n de la cinta.<\/p>\n<p>Obviamente la pel\u00edcula difiere de la novela. En el libro, el inventor es capaz de llegar a millones de a\u00f1os en el futuro para descubrir que la humanidad ha evolucionado en forma de crust\u00e1ceos; los Eloi son m\u00e1s primitivos y se sacrifican voluntariamente a los Morlocks a cambio del bienestar material que \u00e9stos le proveen. Y, como menciona Richard Scheib en su sitio, todo ello no es m\u00e1s que una s\u00e1tira encubierta de Wells hacia la sociedad victoriana de su \u00e9poca, donde los Eloi simbolizar\u00edan a las clases altas y los Morlocks a la clase obrera, ofreciendo los primeros su sangre con tal de mantener los privilegios de su modo de vida que le proporcionan \u00e9stos \u00faltimos.<\/p>\n<p>Es un muy buen filme, con algunos tiempos acortados debido a cuestiones presupuestarias y con un n\u00facleo argumental que precisaba pulir. Posteriormente se hicieron algunas versiones televisivas, adem\u00e1s de la extra\u00f1a <strong>Time After Time<\/strong> (donde H.G Wells utilizaba la m\u00e1quina del tiempo para salir en b\u00fasqueda de Jack el Destripador), y la<em> remake<\/em> hollywoodense del 2002, que esperamos comentar en pr\u00f3ximo.<\/p>\n<h4>LA MAQUINA DEL TIEMPO<\/h4>\n<h5><em><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/time-machine-1960\/\">La M\u00e1quina del Tiempo<\/a> (1960) es la versi\u00f3n cl\u00e1sica de George Pal. <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/maquina-tiempo-2002\/\">La M\u00e1quina del Tiempo<\/a> (2002) es la remake<\/em><\/h5>\n<h4>GEORGE PAL<\/h4>\n<h5><em>Algunas de las producciones de George Pal comentadas en este portal:\u00a0<a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/destination-moon\/\">Destino: La Luna<\/a>\u00a0(1950) &#8211;\u00a0<a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/mundos-chocan\/\">Cuando los Mundos Chocan<\/a>\u00a0(1951) &#8211;\u00a0<a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/war-worlds-1953\/\">La Guerra de los Mundos<\/a>\u00a0(1953) &#8211;\u00a0<a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/marabunta\/\">Marabunta<\/a>\u00a0(1954) &#8211;\u00a0<a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/conquista-espacio\/\">La Conquista del Espacio<\/a>\u00a0(1955) &#8211;\u00a0<a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/time-machine-1960\/\">La M\u00e1quina del Tiempo<\/a>\u00a0(1960) &#8211;\u00a0<a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/atlantida-1961\/\">Atlantida, el Continente Perdido<\/a>\u00a0(1961) &#8211;\u00a0<a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/power-1968\/\">El Poder<\/a>\u00a0(1968) &#8211;\u00a0<a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/doc-savage\/\">Doc Savage, el Hombre de Bronce<\/a>\u00a0(1975)<\/em><\/h5>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>La Maquina del Tiempo (1960): el clasico de H.G.Wells llevado a la pantalla por George Pal, con Rod Taylor e Yvette Mimieux. critica del film<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11988"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=11988"}],"version-history":[{"count":1,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11988\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":35003,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11988\/revisions\/35003"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=11988"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}