{"id":11973,"date":"2017-09-14T17:37:50","date_gmt":"2017-09-14T17:37:50","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/things-come\/"},"modified":"2019-08-07T15:01:12","modified_gmt":"2019-08-07T18:01:12","slug":"things-come","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/things-come\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: La Vida Futura (Things to Come) (1936)"},"content":{"rendered":"<p style=\"text-align: center;\">\n<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-4.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong>GB, 1936: Raymond Massey (John Cabal \/ Oswald Cabal), Edward Chapman (Passworthy \/ Raymond Passworthy), Margaretta Scott (Roxana Black \/ Rowena Cabal), Ralph Richardson (Rudolph, el Jefe), Cedric Hardwicke (Thetocopolous) <\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: William Cameron Menzies, Gui\u00f3n: H.G. Wells, Musica &#8211; Arthur Bliss<\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>La Tierra, en un 1940 alternativo. Los pobladores de la ciudad de Everytown festejan la Navidad, pero los rumores de guerra son inminentes, y esa misma noche estalla el conflicto. El Dr. John Cabal sen enrola en la milicia mientras los bombardeos se desatan sin cesar sobre la ciudad. La guerra dura m\u00e1s de vente a\u00f1os, hasta que las naciones en conflicto quedan arrasadas y la humanidad regresa a la edad feudal. A esto se suma la peste intinerante, que ha evolucionado a partir de los bombardeos biol\u00f3gicos a todo el planeta. En ese contexto surge Rudolph, conocido como el Jefe, que mantiene un fuerte liderazgo militar y dirige a las fuerzas remanentes de Everytown en una banal guerra contra los rezagos de las milicias enemigas. Un d\u00eda llega un moderno avi\u00f3n a la ciudad, y desciende Cabal, quien trae un mensaje. Los cient\u00edficos se han reunido en una organizaci\u00f3n llamada Alas Sobre El Mundo, y le piden la rendici\u00f3n a el Jefe, para que se una a esta revoluci\u00f3n pac\u00edfica. Sin menguar con sus deseos militaristas, las tropas de el Jefe se preparan para oponerse a una posible invasi\u00f3n, pero son r\u00e1pidamente derrotados. Con el mundo liberado de caudillos militares, los cient\u00edficos avanzan a toda marcha para crear una civilizaci\u00f3n mejor. Pero ahora ha llegado el a\u00f1o 2036, y la poblaci\u00f3n se subleva contra el inminente lanzamiento de una nave a la Luna. Tal parece que, con el paso del tiempo, la humanidad est\u00e1 predeterminada a vivir en guerra.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/2017\/09\/boton-things-come.jpg\" alt=\"La Vida Futura (Things to Come)\" width=\"120\" height=\"160\" \/> Esta es una colosal super producci\u00f3n que bien puede catalogarse como la respuesta inglesa a <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/metropolis\/\">Metropolis<\/a>. Por donde se lo mire es un relato extremadamente ambicioso: analizar el desempe\u00f1o de la humanidad en un per\u00edodo que abarca 100 a\u00f1os en el futuro. El cerebro detr\u00e1s de este proyecto es H.G Wells, uno de los padres de la ciencia ficci\u00f3n moderna.<\/p>\n<p>Pero a pesar de su <em>pedigree<\/em>, <strong>Things To Come<\/strong> es una obra fallida. El problema pasa por el mismo Wells, que aqu\u00ed ha evolucionado hasta convertirse en un creador de utop\u00edas extremadamente <em>naif<\/em>. Como dice Richard Scheib en su website, el mejor per\u00edodo de Wells como escritor de sci-fi comprende el anterior a 1900, donde di\u00f3 a luz a obras maestras como <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/war-worlds-1953\/\">La Guerra de los Mundos<\/a>, <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/hombre-invisible\/\">El Hombre Invisible<\/a> o <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/moreau-32\/\">La Isla del Dr. Moreau<\/a>. Pero con el inicio del siglo XX, H.G. Wells se hab\u00eda embarcado en una carrera pol\u00edtica que hab\u00eda cambiado notablemente su sensibilidad de artista. Renegando de sus primeros trabajos en la ciencia ficci\u00f3n, Wells se transform\u00f3 en ensayista primero, y en escritor de utop\u00edas despu\u00e9s. Wells impulsaba la prevalencia de la raz\u00f3n y de la ciencia como objetivos del Estado, lo que terminar\u00eda por sepultar a las guerras. Pero fundamentalmente despu\u00e9s de la Primera Guerra Mundial, Wells cay\u00f3 en una profunda decepci\u00f3n acerca del giro de los acontecimientos de la historia, ya que cre\u00eda que el conflicto podr\u00eda haber servido como una nueva oportunidad para que la humanidad se encaminara a un nuevo y racional orden mundial. Tomando ideas del libro hom\u00f3nimo de 1933, y con el productor Alexander Korda d\u00e1ndole un cheque en blanco en cuanto al control creativo del proyecto, Wells se despach\u00f3 con una enorme historia \u00e9pica pensada en t\u00e9rminos de alegor\u00eda antibelicista.<\/p>\n<p>Es un trabajo realmente ambicioso. Wells establece el comienzo de una guerra mundial en 1940 (recordemos que el film data de 1936), el cual devuelve a la humanidad a la edad media. Todo el seteo inicial de la historia es realmente muy bueno, con un lujoso decorado que hace de centro de la ciudad, y que en cinco minutos pasa de la tranquilidad y la alegr\u00eda al caos y los preparativos de la guerra. Resulta impresionante ver ese mismo escenario reducido a cenizas en cuesti\u00f3n de momentos. Lo que sigue es una larga batalla campal que por veinte a\u00f1os se prolonga hasta dejar al planeta en un mundo post apocaliptico tipo <strong>Mad Max<\/strong>, con autos tirados de caballos, viejos rifles y antiguos aviones que son recauchutados para continuar la guerra. A esto llega un ahora anciano John Cabal, a investigar y desmantelar los focos de caudillismo militar remanentes en el pa\u00eds. Wells exclama a gritos el patetismo de la guerra y especialmente de los militares &#8211; aqu\u00ed representado por el Jefe, que mantiene el conflicto a\u00fan en condiciones insostenibles -.<\/p>\n<p>Hasta all\u00ed la historia es muy entretenida, y realmente la audiencia no sabe qu\u00e9 esperar del relato. Los problemas pasan cuando Wells deja de ser cronista y empieza a hacer publicidad masiva de sus ideales. Los personajes no desarrollan con naturalidad &#8211; ni hablemos de tridimensionalidad &#8211; sino que son figuras totalmente idealizadas, sentadas en un podio y disparando sendos discursos altisonantes acerca de la paz, la guerra y el progreso del mundo controlado por la ciencia &#8230; que por momentos rayan en lo rid\u00edculo. El personaje de John Cabal es tan empalagosamente noble que uno termina por odiarlo. El desarrollo de roles parece rayano en las l\u00edneas del teatro griego, donde cada caracter en realidad representa una manera de pensar y no una persona real. Si bien es obvio que todo esto es una alegor\u00eda y que deben existir una transmisi\u00f3n de mensajes, Wells decide parar todo cada vez que uno de los personajes principales habla. Yo no estoy en contra de los parlamentos pomposos, siempre y cuando el caracter que los pronuncie resulte cre\u00edble; pero Wells se olvida por completo de humanizar a los personajes, y los hace despachar con palabras rimbombantes que suenan totalmente antinaturales. Gran parte de culpa le corresponde al libreto, pero los actores tambi\u00e9n tienen su cuota de responsabilidad: mientras que Raymond Massey eleva su estoicismo a alturas estratosf\u00e9ricas, una performance mucho m\u00e1s natural (y celebrable) es la de Ralph Richardson como el Jefe, que tambi\u00e9n emite sus propios discursos pero de una manera mucho mejor. Con Richardson no se siente en absoluto el caracter discursivo de la obra de Wells, pero con Massey (y el resto de los actores) se hace notar hasta el l\u00edmite de lo tolerable.<\/p>\n<p style=\"text-align: center;\">\n<p>Lamentablemente el car\u00e1cter de Richardson desaparece al final del segundo tercio del film, y quedamos s\u00f3los con Massey y compa\u00f1\u00eda. Ya sobre esos momentos de la pel\u00edcula, Wells comienza a despacharse (mal) con sus fantas\u00edas ut\u00f3picas, que rayan en lo rid\u00edculo. Desde el momento en que los insurgentes son aplacados con el <em>&#8220;Gas de la Paz&#8221; <\/em>(sic), la credibilidad comienza a hilar muy fino. Y en especial el \u00faltimo tercio de la pel\u00edcula, donde la humanidad evoluciona hasta la perfecci\u00f3n, intentando alcanzar la Luna con una c\u00e1psula disparada con un ca\u00f1on gigante (!), donde los hijos de los l\u00edderes son elegidos a dedo y puestos en cinco minutos en el interior de la nave (!!) y de la nada surge una revoluci\u00f3n que est\u00e1 harta del avance de la humanidad, condena el lanzamiento espacial como un pecado, y va a destruir el gigantesco ca\u00f1on con palos y hachas (!!!). Aqu\u00ed es donde el film se hunde, ya que es un cap\u00edtulo innecesario para la historia, pero no para Wells que debe demostrar que la humanidad debe evolucionar guiada por la ciencia.<\/p>\n<p>Los efectos especiales son impecables y asombrosos para la \u00e9poca, desde las flotas de bombarderos futuristas hasta la visi\u00f3n de la Everytown del 2046. Es un film que debi\u00f3 haber salido car\u00edsimo. Todas esas im\u00e1genes son sorprendentes, y el director William Cameron Menzies a\u00f1ade complejas secuencias en forma de clips, que van detallando la evoluci\u00f3n de la historia as\u00ed como el paso de los a\u00f1os. Es una pel\u00edcula que se mantiene muy dignamente en pie, si dejamos de lado la visi\u00f3n ut\u00f3pica de Wells.<\/p>\n<p>Es interesante comparar a <strong>Things to Come<\/strong> con <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/metropolis\/\">Metr\u00f3polis<\/a>. En definitiva el film es la respuesta de Wells a la obra de Lang. Aqu\u00ed la ciencia es la que debe guiar a la humanidad &#8211; un postulado ut\u00f3pico que la inmensa mayor\u00eda de la sci fi de los 50 y 60 ha pregonado -, y la tecnolog\u00eda termina por ser un mecanismo liberatorio en vez de ser una herramienta de opresi\u00f3n, como Lang pinta en <strong>Metr\u00f3polis<\/strong>. Pero si bien <strong>Things to Come<\/strong> tiene prop\u00f3sitos m\u00e1s loables que <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/metropolis\/\">Metropolis<\/a>, no llega a las alturas del cl\u00e1sico de Lang. El film alem\u00e1n era mucho m\u00e1s rico en ideas, adem\u00e1s de contar con t\u00e9cnicas revolucionarias de filmaci\u00f3n, mientras que aqu\u00ed Cameron Menzies utiliza t\u00e9cnicas preexistentes, y el gui\u00f3n es mucho m\u00e1s lineal. Es cierto que <strong>Metropolis<\/strong> sufre sus propios problemas, pero contiene elementos mucho m\u00e1s magn\u00e9ticos que la historia de Wells, que es excesivamente rimbombante y carece de equilibrio. La imaginer\u00eda m\u00edstica de Lang, el descubrimiento gradual del mundo de <strong>Metropolis<\/strong> y la interacci\u00f3n de los personajes lo hacen mucho m\u00e1s interesante que <strong>Things to Come<\/strong>. Y si <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/metropolis\/\">Metropolis<\/a> funciona como una tibia alegor\u00eda de la clase obrera, aqu\u00ed la obra de Wells funciona como una fantas\u00eda de gente culta (dir\u00edamos de clase media). <strong>Things to Come<\/strong> tiene una gran cantidad de m\u00e9rito por lo visual y por algunas de sus ideas, pero carece del carisma que hace compulsivamente disfrutable a <strong>Metr\u00f3polis<\/strong>, simplemente porque se sit\u00faa como un panfleto que vocifera con prepotencia su idealismo ut\u00f3pico.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>La Vida Futura (Things to Come) (1936): una vision utopica de H.G. Wells sobre el futuro de la humanidad, con Raymond Massey y Ralph Richardson. Critica del film<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11973"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=11973"}],"version-history":[{"count":0,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11973\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=11973"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}