{"id":11540,"date":"2017-09-14T17:33:50","date_gmt":"2017-09-14T17:33:50","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/parallax-view\/"},"modified":"2019-09-02T03:26:03","modified_gmt":"2019-09-02T06:26:03","slug":"parallax-view","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/parallax-view\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: The Parallax View (1974)"},"content":{"rendered":"<p style=\"text-align: center;\">\n<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-5.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/recomendaciones-editor-indice\/\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"wp-image-24154 size-full alignright\" title=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/recomendacion-editor.jpg\" alt=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" width=\"200\" height=\"40\" \/><\/a>USA, 1974: Warren Beatty (Joseph Frady), Paula Prentiss (Lee Carter), Hume Cronyn (Bill Rintels), William Daniels (Austin Tucker)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: Alan J. Pakula, Gui\u00f3n: David Giler &amp; Lorenzo Semple Jr sobre la novela hom\u00f3nima de Loren Singer<\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>Seattle, principio de los a\u00f1os 70. El senador Charles Carroll se prepara para lanzar la campa\u00f1a pol\u00edtica de la presente temporada, y ha decidido reunir a la prensa en el mirador ubicado en lo alto de la Aguja Espacial &#8211; <em>la monumental torre que se ha transformado en el s\u00edmbolo de la ciudad <\/em>-. Pero Carroll es asesinado y su homicida perece al caer al vac\u00edo en el transcurso de la fuga. Ahora han pasado varios a\u00f1os y nadie parece acordarse del hecho; pero la periodista Lee Carter ha acudido a su antiguo compa\u00f1ero de trabajo &#8211; <em>y ex amante<\/em> &#8211; Joseph Frady, rog\u00e1ndole que la ayude ya que cree que un grupo de asesinos est\u00e1 tras sus pasos, planeando matarla en cualquier momento. Sus sospechas pasan porque ella fue testigo del asesinato de Carroll y ha descubierto &#8211; <em>para su horror<\/em> &#8211; que otros seis testigos del magnicidio han fallecido recientemente y en circunstancias muy extra\u00f1as. Frady descree de la paranoia de Carter&#8230; hasta que a los dos d\u00edas se ve obligado a reconocer su cuerpo en la morgue. Puesto en acci\u00f3n, Frady consigue una identificaci\u00f3n falsa, abandona su trabajo y se dedica a rastrear al secretario del senador Carroll, el cual se encuentra escondido y posee informaci\u00f3n vital para descubrir a los responsables de la conspiraci\u00f3n; pero enorme ser\u00e1 su sorpresa cuando, en el transcurso de la pesquisa, se tope con una siniestra organizaci\u00f3n llamada<em> Parallax<\/em>, la cual parece disponer de fondos ilimitados y se encuentra a la b\u00fasqueda de sic\u00f3ticos y violentos de todo tipo, a los cuales recluta a trav\u00e9s de una serie de ingeniosos avisos publicados en el diario y los utiliza para cometer sus atentados. Y llegado a ese punto, Frady se ver\u00e1 en la encrucijada de huir o avanzar en la peligrosa investigaci\u00f3n que ha iniciado, a\u00fan cuando ello implique meterse en la misma boca del lobo para poder conocer todos los secretos de Parallax desde dentro y, de ese modo, desbaratar toda la truculenta operaci\u00f3n que \u00e9stos han montado.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/2017\/09\/poster-parallax-view.jpg\" alt=\"The Parallax View\" width=\"200\" height=\"304\" border=\"1\" \/> No hay nada mas inquietante que la idea de un estado conspirador y paranoico, uno que se ha organizado para perseguir, acusar, torturar, encarcelar y matar a los supuestos enemigos del gobierno, disfrazando la movida de cruzada moral para preservar la integridad del r\u00e9gimen imperante &#8230; o que, peor a\u00fan, opera en las sombras como una especie de estado paralelo y opresor mientras mantiene una fachada de honestidad intachable. Es una fuerza ominosa, silenciosa y omnisciente, una criatura gigantesca dotada de miles de ojos, oidos y brazos, y que se encuentra al acecho, lista para atraparte al instante en que te pases de la raya. Mientras que semejante engendro es un fruto natural de los gobiernos totalitarios, resulta alarmante verlo prosperar en una sociedad tan democr\u00e1tica como la norteamericana, la cual se llena la boca con sus ideales de igualdad, independencia y justicia, y en donde se esconden monstruos tremendos capaces de devorar de manera insaciable a aquellos que considere enemigos de sus intereses creados. Imaginen el shock del estadounidense promedio &#8211; <em>encerrado en su burbuja de clase media<\/em> -, al descubrir que su propio gobierno persigue y asesina a ciudadanos de todo tipo y color, llegando incluso a los extremos del magnicidio con tal de preservar el silencio y el <em>status quo<\/em> de sus interesados. Si toda esta paranoia estaba latente en la sociedad norteamericana desde las \u00e9pocas del asesinato de John Fitzgerald Kennedy &#8211; <em>y toda la seguidilla de homicidios y desapariciones de los principales l\u00edderes civiles, pol\u00edticos y sindicales de la \u00e9poca<\/em> -, la detonaci\u00f3n del esc\u00e1ndalo Watergate terminar\u00eda demostrando (de manera fehaciente) que las conspiraciones eran reales, resid\u00edan en Washington y eran perpetradas por una camada de amorales disfrazados de patriotas, los cuales estaban dispuestos a defender a cualquier precio los atributos logrados por sus pol\u00edticas corporativistas.<\/p>\n<p>Desde ya que nada de esto espanta a los que vivimos al sur del Rio Grande, ya que nos toc\u00f3 sufrir en carne propia las manipulaciones de las agencias de inteligencia norteamericanas, las cuales &#8211; <em>enfrascadas en flagrante guerra de espacios contra la avanzada comunista<\/em> -, comenzaron a voltear gobiernos republicanos y sustituirlos por dictaduras fascistas de extrema derecha, seudo bastiones de la democracia occidental plantados frente al rotundo enemigo rojo que hab\u00eda acaparado Cuba, Corea, Vietnam, y ahora parec\u00eda abalanzarse sobre territorio hispanoamericano. Nuestros pa\u00edses siempre han sido el patio trasero en donde Norteam\u00e9rica ha librado sus guerras sucias, raz\u00f3n por la cual nunca hemos sentido demasiado consideraci\u00f3n hacia las miserias que les toc\u00f3 vivir a los Estados Unidos en los 60 y 70s, a\u00f1os plagados de retorcidas conspiraciones y golpes de estado silenciosos. No es que los estadounidenses se hayan vuelto unos santos pero &#8211;<em> habiendo caido la Uni\u00f3n Sovi\u00e9tica y el grueso de sus pa\u00edses sat\u00e9lite<\/em> -, ahora han encontrado enemigos en otros lares y han llevado sus disputas hacia otros territorios &#8211; <em>ar\u00e1bicos, para ser exactos <\/em>-, raz\u00f3n por la cual nos han dejado respirar de un tiempo largo a esta parte.<\/p>\n<p>Pero a\u00fan en ese mar de consideraciones y especulaciones, uno no puede quitarse de encima la sensaci\u00f3n de incomodidad producida por The Parallax View. El subtexto del filme es claro: a\u00fan en el pa\u00eds mas poderoso del planeta las intrigas abundan, y ni siquiera los presidentes est\u00e1n a salvo. Desde ya que el filme de Alan J. Pakula no es el primer thriller paranoico y conspirativo de la historia &#8211;<em> John Frankenheimer ya hab\u00eda sentado las bases en su trilog\u00eda paranoica compuesta por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/dias-mayo\/\">Siete Dias de Mayo<\/a>, <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/manchurian-candidate\/\">El Embajador del Miedo<\/a> y <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/senor-hamilton\/\">El Otro Se\u00f1or Hamilton<\/a> <\/em>-, pero s\u00ed es el primero que dispara por elevaci\u00f3n al pasado reciente de los Estados Unidos. El homicidio del senador &#8211; <em>ocurrido al inicio de la pel\u00edcula <\/em>&#8211; se parece demasiado al asesinato de Bobby Kennedy durante un mitin pol\u00edtico en 1968; el climax del filme alude subliminalmente a Lee Harvey Oswald y su participaci\u00f3n en el magnicidio de John Fitzgerald Kennedy acaecido en 1963. La novedad aqu\u00ed es que la organizaci\u00f3n <em>Parallax <\/em>no crea asesinos profesionales sino que recluta violentos y sic\u00f3patas para plantarlos como chivos expiatorios en las escenas de los cr\u00edmenes. Un sic\u00f3pata es un loco sin disciplina, pero es alguien f\u00e1cil de culpar si un grupo de profesionales comete de manera impecable un magnicidio y se decide a ponerle el arma ensangrentada en sus manos.<\/p>\n<p style=\"text-align: center;\">\n<p>Desde ya, la direcci\u00f3n de Alan J. Pakula es impecable. El tipo ha creado el lenguaje narrativo de los filmes conspirativos y cualquier cinta de tem\u00e1tica similar s\u00f3lo se ha limitado a imitar los recursos aplicados por Pakula: desarrollo lento, planos muy amplios (en donde la gente se ve demasiado peque\u00f1a), escenas en silencio, mucha comunicaci\u00f3n sutil por parte de los protagonistas a partir de los gestos, una sensaci\u00f3n de peligro constante e inminente &#8211; <em>en donde uno sospecha de que el protagonista no podr\u00e1 llegar vivo a la ma\u00f1ana siguiente <\/em>-, y la paranoia constante de ser seguido \/ escuchado por los agentes enemigos que est\u00e1n al acecho permanente. Para colmo est\u00e1 esa inc\u00f3moda sensaci\u00f3n de soledad y desamparo, en donde el h\u00e9roe no puede acudir a las tradicionales agencias de seguridad ya que carece de garant\u00edas de que las mismas no est\u00e9n infectadas de conspiradores, y de que los mismos se enteren y se presenten en tu casa, en la forma de un sicario disfrazado de uniformado.<\/p>\n<p>En semejante contexto, el \u00fanico cuerpo que parece independiente y dispuesto a garantizar la libertad y la justicia es la prensa libre: el poder de los diarios dispuestos a denunciar a los corruptos de turno y avanzar hasta las \u00faltimas consecuencias, resistiendo toda clase de presiones pol\u00edticas y\/o subterr\u00e1neas para detener su accionar. Tal como ocurriera con Watergate, aqu\u00ed el h\u00e9roe es un periodista; y el mismo s\u00f3lo podr\u00e1 avanzar a causa de descubrimientos fortuitos y arrepentidos de \u00faltimo momento, hechos e individuos que han escapado al accionar de la implacable maquinaria conspirativa y que necesitan ser callados para no delatar el andamiaje de poder construido a partir de la ilegalidad. A\u00fan as\u00ed, la sensaci\u00f3n imperante es la de fragilidad: ni siquiera la denuncia mejor construida &#8211; <em>y basada en pruebas irrefutables<\/em> &#8211; es garant\u00eda de que la justicia participar\u00e1 y detendr\u00e1 a los culpables. As\u00ed lo ha probado <strong>JFK <\/strong>de Oliver Stone, en donde los honestos se han visto reducidos al papel de quijotescos caballeros de armadura oxidada, peleando contra la burocracia y la desautorizaci\u00f3n del inmenso <em>establishment <\/em>politico de turno.<\/p>\n<p>Ac\u00e1 la idea de fondo es apasionante, y la ejecuci\u00f3n bordea lo brillante. Warren Beatty detecta una organizaci\u00f3n que recluta sic\u00f3patas; para ello recurre a tests sicol\u00f3gicos, los cuales parecen creados para sacar lo peor de las personas. Luego la organizaci\u00f3n los embadurna con dinero y les asigna tareas en puestos sensibles cercanos a los poderosos, a la vez que les realizan un entrenamiento mental que s\u00f3lo tiende a exacerbar sus sentimientos encontrados. Ya en la primera sesi\u00f3n de testeo (a la que se somete Beatty), a los candidatos le plantan un video plagado de ideas subliminales &#8211; <em>que primero asocian correctamente conceptos e im\u00e1genes (justicia, patria, padre, autoridad, enemigo), y despu\u00e9s empiezan a trastocarlos de manera alarmante &#8211; <\/em>se demuestran las intenciones de lavarle el cerebro a los aspirantes y resaltar los aspectos mas oscuros de sus respectivas (y violentas) personalidades. Otra que el tratamiento <em>Ludovico <\/em>(de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/naranja-mecanica\/\">La Naranja Mec\u00e1nica<\/a>), s\u00f3lo que recargado de malicia y manipulaci\u00f3n homicida.<\/p>\n<p>Como h\u00e9roe de la aventura, Warren Beatty est\u00e1 ok. No es un gran actor, a veces es demasiado apuesto para un rol que precisa anonimato, pero proyecta seguridad en s\u00ed mismo e inteligencia. No es un h\u00e9roe impavido sino uno sagaz e inventivo &#8211; <em>es brillante c\u00f3mo resuelve la amenaza de bomba en el avi\u00f3n sin quedar involucrado<\/em> -, y uno espera que al final logre triunfar contra todas las adversidades; pero la eficiencia de la organizaci\u00f3n roza la perfecci\u00f3n &#8211; <em>de hecho el grueso de la historia no es mas que ver la sucesi\u00f3n de testigos eliminados apenas Beatty logra contactarlos <\/em>-, e incluso uno olfatea que las cosas van a salir mal cuando ve que los conspiradores han ubicado los verdaderos or\u00edgenes del protagonista.<\/p>\n<p><strong>La Visi\u00f3n de Paralaje<\/strong> &#8211; <em>ese fen\u00f3meno \u00f3ptico en donde el comportamiento de los objetos cambia seg\u00fan la perspectiva&#8230; y lo cual le da el nombre a la pel\u00edcula<\/em> &#8211; es un <em>thriller<\/em> excepcionalmente s\u00f3lido, inteligente e inquietante. He aqu\u00ed la decadencia del sue\u00f1o americano, en donde todos los ideales de libertad y justicia han perecido aplastados bajo la omnipotencia de un estado totalitario, de accionar secreto y prepotente, y guiado por el deseo permanente de resguardar sus propios intereses. Es horrible descubrir que uno vive en una sociedad en donde el Estado, en vez de protegernos, prefiere perseguirnos y eliminarnos si representamos un obst\u00e1culo en su camino. Y <strong>The Parallax View <\/strong>plasma toda esa sicosis con una eficiencia asombrosa, dando a luz uno de los mejores <em>thrillers <\/em>de todos los tiempos.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>The Parallax View (1974): Warren Beatty descubre una organizacion destinada a matar personalidades de la politica, en este thriller de Alan J. Pakula. Critica de la pelicula<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11540"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=11540"}],"version-history":[{"count":0,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11540\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=11540"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}