{"id":11532,"date":"2017-09-14T17:33:48","date_gmt":"2017-09-14T17:33:48","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/paddington\/"},"modified":"2019-09-02T03:24:34","modified_gmt":"2019-09-02T06:24:34","slug":"paddington","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/paddington\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: Paddington (2014)"},"content":{"rendered":"<p style=\"text-align: center;\">\n<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-5.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/recomendaciones-editor-indice\/\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"wp-image-24154 size-full alignright\" title=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/recomendacion-editor.jpg\" alt=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" width=\"200\" height=\"40\" \/><\/a>GB \/ Francia, 2014: Ben Whishaw (voz de Paddington), Hugh Bonneville (Henry Brown), Sally Hawkins (Mary Brown), Nicole Kidman (Millicent), Madeleine Harris (Judy Brown), Samuel Joslin (Jonathan Brown), Julie Walters (se\u00f1ora Bird), Peter Capaldi (Reginald Curry)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: Paul King, Gui\u00f3n: Paul King<\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>Hace muchos a\u00f1os un explorador ingl\u00e9s se intern\u00f3 en la selva peruana y conoci\u00f3 a una extravagante familia de osos. Impresionado por su amabilidad, les regal\u00f3 todas sus pertenencias y prometi\u00f3 recibirlos en caso de que fueran de visita a Londres. Ahora el tiempo ha pasado y el peque\u00f1o Paddington vive con sus t\u00edos &#8211; <em>los osos que originalmente conocieran al explorador<\/em> &#8211; en la selva; pero la desforestaci\u00f3n los ha dejado sin casa y Paddington comprende que el \u00fanico hogar que le queda es la casa del explorador. Para ello emprende una larga traves\u00eda y termina desembarcando en Londres; pero el joven oso se extrav\u00eda y pronto es recogido por Mary Brown y su familia, quienes desinteresadamente se ofrecen a ayudarlo. Y mientras los Browns y el oso rastrean el paradero de la familia del explorador, Millicent &#8211; <em>una ex\u00f3tica taxidermista que trabaja para el Museo de Historia Natural <\/em>&#8211; ha ubicado al oso y ha comenzado a obsesionarse con \u00e9l, ya que considera que es la \u00fanica pieza que le falta a su extensa colecci\u00f3n de animales disecados. Ello la pone en trayectoria de colisi\u00f3n directa con el destino de los Brown, quienes pronto deber\u00e1n organizarse de apuro para hallar y rescatar a Paddington cuando descubran que la taxidermista lo ha secuestrado y planea disecarlo esta misma noche.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/2017\/09\/poster-paddington.jpg\" alt=\"Paddington\" width=\"200\" height=\"285\" border=\"1\" \/> <strong>Paddington<\/strong> es un oso parlante protagonista de una larga serie de libros infantiles escritos por el ingl\u00e9s Michael Bond, los cuales comenzaron a publicarse desde 1958. Debido a su gran repercusi\u00f3n,<strong> Paddington<\/strong> termin\u00f3 por convertirse en una franquicia, generando tres series animadas producidas entre los a\u00f1os 90 y el nuevo milenio, am\u00e9n de toneladas de merchandising y subproductos derivados. Pronto qued\u00f3 en evidencia que era material \u00f3ptimo para la pantalla grande, especialmente en estos momentos en donde los cuentos infantiles se han puesto de moda &#8211; <em>ya sea en versiones ingenuas, adultas, oscuras o como desconstrucciones \/ reconstrucciones al estilo de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/malefica\/\">Mal\u00e9fica<\/a>, y las series televisivas <strong>Once Upon a Time <\/strong>y <strong>Grimm<\/strong> <\/em>&#8211; y han probado ser extremadamente redituables. Ciertamente <strong>Paddington<\/strong> no entra en el terreno de la fantas\u00eda sino que hace las veces de alegor\u00eda edulcorada, muy en la onda de <strong>Babe, el Chanchito Valiente<\/strong> y, especialmente, <strong>Stuart Little<\/strong>.<\/p>\n<p>Es precisamente con <strong>Stuart Little <\/strong>con quien tiene mas puntos en com\u00fan. Paddington es un oso parlante pero su presencia no sorprende a nadie, incluso en la ultraurbanizada Londres del siglo XXI. Uno podr\u00eda asumir que se trata de la sicosis e indiferencia propia de las grandes ciudades &#8211; <em>tipo Nueva York, en donde a nadie le importa nada (salvo su propia rutina) y cualquiera puede andar por la calle vestido de cualquier cosa sin que llame la atenci\u00f3n de alguien <\/em>-, pero pronto queda en evidencia que la imagen del oso parlante tiene otro sentido. Si en <strong>Stuart Little<\/strong> el ratoncito era la alegor\u00eda de adoptar a un diferente &#8211; <em>un chico discapacitado o con alg\u00fan retraso, o alguien de otra raza<\/em> -, <strong>Paddington<\/strong> es la versi\u00f3n metaf\u00f3rica del inmigrante del tercer mundo. Es distinto al ingl\u00e9s promedio, igual de civilizado y, sobre todo, es un ingenuo que se sorprende con las maravillas del mundo moderno. La actitud de Sally Hawkins no difiere demasiado de la de Sandra Bullock en <strong>The Blind Side<\/strong>: ella es una protectora nata e inmediatamente guarece a este individuo desvalido con el cual se ha cruzado en una estaci\u00f3n de tren. Posee una familia amorosa aunque ligeramente disfuncional, y pronto la interacci\u00f3n con el oso terminar\u00e1 por convertirlos en mejores personas.<\/p>\n<p style=\"text-align: center;\">\n<p>Uno de los mejores aspectos de <strong>Paddington<\/strong> es su emotividad. Los textos de Michael Bond est\u00e1n plagados de matices autobiogr\u00e1ficos y que apelan a la memoria emocional inglesa &#8211;<em> esa de los tiempos de la Segunda Guerra Mundial en donde la gente era solidaria, y en donde una multitud de extra\u00f1os (viviendo en pueblos alejados del epicentro de los bombardeos nazis) se ofrec\u00eda a cuidar y a proteger a los ni\u00f1os de las familias de las grandes ciudades<\/em> -. Paddington utiliza el mismo m\u00e9todo &#8211; <em>un ni\u00f1o en una estaci\u00f3n de tren con una etiqueta de cart\u00f3n en el cuello conteniendo sus datos; la cita de la t\u00eda Lucy &#8220;esta naci\u00f3n ha sabido cuidar a los suyos en momentos dif\u00edciles y no creo que se hayan olvidado de ayudar a uno de los suyos cuando lo precisa&#8221;<\/em> &#8211; y el destino termina por recompensarlo. Tal como <strong>Forrest Gump<\/strong>, los inocentes tienen un angel aparte y Paddington pronto se topa con una familia compuesta por deliciosos personajes &#8211; <em>madre caritativa, padre gru\u00f1\u00f3n pero querible, hija t\u00edmida e inteligente, hijo nerd<\/em> -, los cuales empiezan su propio proceso de sanitizaci\u00f3n ante la presencia de la criatura. Lo mejor de todo es que, en vez de ser un coro de fondo, cada uno de ellos tiene un momento de lucimiento orquestado de manera brillante &#8211; <em>y si bien todos son formidables, quien se destaca por lejos es Hugh Bonneville (<strong>Downton Abbey<\/strong>), quien irradia bondad pura mientras demuestra tener un timing comico impecable<\/em> -, cortando el edulcoramiento natural del relato con gags realmente logrados. Hasta la desabrida Nicole Kidman tiene su cuota de maldades festejables.<\/p>\n<p>La gracia de <strong>Paddington<\/strong> es ver a un tipo querible suelto en un mundo desconocido, y repleto de personas con buena voluntad que quieren ayudarlo. En el medio hay bastante comedia slapstick &#8211; <em>como para inyectarle algo de acci\u00f3n<\/em> &#8211; que, sorprendentemente, resultan ser efectiva. La historia no es demasiado compleja y en realidad es un pretexto para conocer estos caracteres y dejar que interact\u00faen entre ellos. Y lo que al principio parece exc\u00e9ntrico despu\u00e9s se vuelve adorable por un buen manejo de tonos, sumado al virtuosismo visual del director Paul King, quien crea secuencias realmente inspiradas &#8211; <em>como convertir m\u00e1gicamente a la casa de mu\u00f1ecas de la chica Brown en una versi\u00f3n miniaturizada de la propia casa, pudiendo seguir la acci\u00f3n de cada uno de los integrantes de la familia en cada cuarto como si fueran vi\u00f1etas de un comic; o la conversi\u00f3n de un tren de juguete en un flashback que remonta al pasado de uno de los protagonistas, a los duros tiempos de la guerra<\/em> -. Todo esto convierte a un filme de apariencia desnatada en una experiencia deliciosa, sorprendente y mucho mas inteligente que lo que uno podr\u00eda esperar, desbordando de \u00e1ngel en cada una de las l\u00edneas de un libreto realmente inspirado. Ojal\u00e1 hagan una segunda parte porque esa s\u00ed ser\u00eda una secuela esperada y una que ver\u00eda con much\u00edsimo gusto.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>Paddington (2014): un oso parlante llega a Londres en busca de una familia, en esta tierna aventura infantil. Critica de la pelicula<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11532"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=11532"}],"version-history":[{"count":0,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11532\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=11532"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}