{"id":11156,"date":"2017-09-14T17:32:07","date_gmt":"2017-09-14T17:32:07","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/it-terror-beyond\/"},"modified":"2019-08-20T16:50:46","modified_gmt":"2019-08-20T19:50:46","slug":"it-terror-beyond","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/it-terror-beyond\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: It! The Terror From Beyond Space (1958) (El Terror del Mas All\u00e1)"},"content":{"rendered":"<p style=\"text-align: center;\">\n<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-3.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong>USA, 1958: Marshall Thompson (Coronel Edward Carruthers), Kim Spalding (Coronel Van Heusen), Shawn Smith (Ann Anderson), Paul Langton (Teniente Jim Calder), Ray Corrigan (el monstruo), Dabbs Greer (Eric Royce), Ann Doran (Mary Royce)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: Edward L. Cahn, Gui\u00f3n: Jerome Bixby, Musica &#8211; Paul Sawtell &amp; Bert Shefter<\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>El Challenge 142 recoge en Marte al \u00fanico superviviente de la misi\u00f3n anterior, el Coronel Edward Carruthers. Carruthers es puesto bajo vigilancia por la tripulaci\u00f3n, sospechado de haber matado al resto de su equipo cuando estaban en suelo marciano &#8211; su nave estaba averiada, y la disminuci\u00f3n en n\u00famero le aseguraba provisiones al Coronel durante varios a\u00f1os hasta que llegara una nave de rescate -. Pero Carruthers insiste en que un monstruo los atac\u00f3 y mat\u00f3 a la mayor\u00eda de los astronautas. La tripulaci\u00f3n del Challenge 142 desconf\u00eda del Coronel, pero un incidente con una de las puertas de acceso en el momento del despegue, y varias desapariciones misteriosas de parte del personal hacen temer que la versi\u00f3n de Carruthers sea cierta, y que el monstruo se encuentre en la nave, cazando uno a uno a los astronautas.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/2017\/09\/boton-it-terror-beyond-space.jpg\" alt=\"It! The Terror From Beyond Space (1958)\" width=\"120\" height=\"160\" \/> Este es un pasable film de la clase B de la <em>sci fi<\/em> americana de los 50, que bien podr\u00eda haber terminado por juntar polvo en los anaqueles sino fuera porque todo el mundo la rese\u00f1a como el gran antecesor del <strong>Alien<\/strong> (1979) de Ridley Scott.<\/p>\n<p>Si bien es cierto que hay un par de ideas que figuran en el film de Scott &#8211; la irrupci\u00f3n clandestina de la criatura en la nave; el acecho por los ductos de ventilaci\u00f3n; la aparente indestructibilidad del monstruo; el final, por medio de la apertura de las esclusas de aire -, el resto es bastante diferente y est\u00e1 filmado de un modo chato. Como suele pasar en los filmes de monstruos, los personajes son carne de ca\u00f1\u00f3n de la criatura de turno y no tienen tridimensionalidad, s\u00f3lo son clis\u00e9s ambulantes. No es el film m\u00e1s barato de su tiempo, pero el presupuesto tampoco es muy abundante y se nota.<\/p>\n<p>Es obvio que los guionistas de <strong>Alien<\/strong> deben haber visto el film y salieron corriendo a escribir algo mejor. Ac\u00e1, en terminos cinematogr\u00e1ficos, es una aventura standard sin demasiado suspenso. Est\u00e1 la voz en <em>off <\/em>de Marshall Thompson (que en los 60 se har\u00eda popular al frente de la serie de TV <strong>Daktari<\/strong>) con la t\u00edpica narrativa de los 50, plena de advertencias y observaciones f\u00fatiles. El nivel interpretativo que sigue es la habitual madera terciada del g\u00e9nero, y los FX son repetitivos y escasos, sin demasiada calidad. Hay un par de datos curiosos: el cohete siempre es vista despegando y volando en modo vertical &#8211; como demostrando que el piso (y la gravedad) est\u00e1n abajo -; la nave est\u00e1 llena de elementos dispares como armarios de oficina y objetos m\u00f3viles (el dep\u00f3sito est\u00e1 lleno de cajas sueltas sin ning\u00fan tipo de amarre, por ejemplo), algo rid\u00edculo donde uno piensa que en un aterrizaje todas esas cosas saldr\u00edan volando; y as\u00ed como esas, hay unas cuantas cosas fuera de lugar &#8211; el equipo hace estallar granadas dentro de la nave, fuman todo el tiempo, etc -. Sin mencionar los toques machistas de la \u00e9poca, como que las dos \u00fanicas astronautas son doctora y enfermera, pero a su vez son las encargadas de cocinar para el resto del equipo.<\/p>\n<p style=\"text-align: center;\">\n<p>Pero dejando de lado los toques coloridos, el desarrollo de la historia es bastante rutinario. Nadie cree en la historia del buen coronel hasta que empiezan a aparecer los cad\u00e1veres aqu\u00ed y all\u00e1. Los cuerpos est\u00e1n demacrados, con profundas ojeras, ya que la criatura les absorbe la energ\u00eda por \u00f3smosis. Las teor\u00edas al respecto son breves pero bastante idiotas &#8211; <em>&#8221; debe haber existido una civilizaci\u00f3n marciana que volvi\u00f3 a la barbarie e involucion\u00f3&#8221;<\/em> hasta <em>&#8220;como les falta ox\u00edgeno en Marte, lo toman de nuestros cuerpos&#8221;<\/em>, con lo cual la criatura se morir\u00eda de hambre esperando por cada misi\u00f3n que pisara terreno marciano -, e incluso el descubrimiento del monstruo es bastante pat\u00e9tico, con un miembro de la tripulaci\u00f3n arrastr\u00e1ndose en dos metros de ducto de aire (hacia un lado y hacia otro), sin darse cuenta que hay un astronauta moribundo al lado suyo. Donde el film se redime un poco es con el juego de las escondidas que hace la tripulaci\u00f3n, sellando los niveles y esperando que la criatura los vaya descubriendo (y deshaciendo las esclusas).<\/p>\n<p>El traje del monstruo est\u00e1 bastante bien &#8211; no es terriblemente malo, aunque s\u00ed bastante inexpresivo -, pero tanto en el aspecto exterior como en esa parte del film donde empieza el acoso a los tripulantes, Edward L. Cahn parece querer imitar los derroteros de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/thing-1951\/\">The Thing From Another World<\/a>, con otro bicho suelto acosando al equipo (ahora aislado en el espacio). El final no es particularmente emocionante, y la criatura muere cuando quitan todo el ox\u00edgeno de la nave (repito: <em>\u00bfc\u00f3mo hac\u00eda para vivir en Marte sin atm\u00f3sfera?<\/em>).<\/p>\n<p>No es un engendro pero tampoco es un film memorable. Es pura rutina pasatista que la mayor parte del tiempo se toma bastante en serio a s\u00ed misma, pero en manos de otro director podr\u00eda haber generado mejores resultados. Al mando est\u00e1 Edward L. Cahn, quien s\u00ed ha piloteado algunos abortos y productos mediocres como <strong>The She Creature<\/strong>, <strong>Creature with the Atom Brain<\/strong>,<strong> Invasion of the Saucer Men<\/strong> y <strong>Curse of the Faceless Man<\/strong>. Quiz\u00e1s<strong> It! The Terror From Beyond Space<\/strong> sea de lo mejorcito de la obra de Cahn.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>It! The Terror From Beyond Space (1958): el antecedente de Aliens en clave de terror de los a\u00f1os 50, con Marshall Thompson. Critica del film<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11156"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=11156"}],"version-history":[{"count":0,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/11156\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=11156"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}