{"id":10920,"date":"2017-09-14T17:31:05","date_gmt":"2017-09-14T17:31:05","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/gamer\/"},"modified":"2019-08-07T09:19:23","modified_gmt":"2019-08-07T12:19:23","slug":"gamer","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/gamer\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: Gamer (2009)"},"content":{"rendered":"<p style=\"text-align: center;\">\n<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-2.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong>USA, 2009: Gerard Butler (Kable), Amber Valletta (Angie), Michael C. Hall (Ken Castle), Kyra Sedgwick (Gina Parker Smith), Logan Lerman (Simon), Alison Lohman (Trace)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: Mark Neveldine &amp; Brian Taylor, Gui\u00f3n: Mark Neveldine &amp; Brian Taylor<\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>En el futuro, el genio de la computaci\u00f3n Ken Castle se ha vuelto millonario gracias a dos videogames extremadamente populares cuyas partidas son transmitidas por televisi\u00f3n de pago. Ellos son protagonizados por seres humanos cuyas c\u00e9lulas del cerebro han sido reemplazadas con nanotecnolog\u00eda, y cuya conducta es manejada por los jugadores desde sus casas. Mientras que en <em>Society<\/em> los participantes dan rienda suelta a sus deseos sexuales, las cosas son mucho m\u00e1s violentas en <em>Slayers<\/em> &#8211; en donde los jugadores controlan a una serie de reclusos condenados a muerte, que deben sobrevivir a una serie de pruebas infernales -. El l\u00edder de <em>Slayers<\/em> es Kable, quien ha llegado al nivel 27 y s\u00f3lo le faltan 3 partidas para acabar el juego y ganar su libertad. Pero a su vez Kable es un hombre inocente, acusado injustamente de asesinato. La organizaci\u00f3n guerrillera <em>Humanz<\/em> &#8211; ferviente opositora de los videogames de Castle &#8211; planea sabotear la \u00faltima partida de <em>Slayers<\/em> para rescatar a Kable y obtener los recuerdos escondidos en su mente. Y es que el asesinato que le inculpan est\u00e1 relacionado con el oscuro pasado de Ken Castle.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/2017\/09\/boton-gamer.jpg\" alt=\"Gamer\" width=\"120\" height=\"160\" \/> <strong>Gamer<\/strong> viene de la dupla de Mark Neveldine y Brian Taylor, los mismos de la saga <strong>Crank &#8211; Veneno en la Sangre<\/strong>. Aqu\u00ed el d\u00fao de directores trasladan su hiperkin\u00e9tico estilo a una historia futurista acerca de un violento videojuego televisado a nivel mundial. La premisa no es en absoluto nueva y los directores no hacen demasiado por renovarla. Pero la gran contra de <strong>Gamer<\/strong> es que el estilo epil\u00e9ptico de los cineastas termina por arruinar lo que podr\u00eda haber sido rutina pasatista aceptable.<\/p>\n<p>La idea de violentos juegos futuristas es m\u00e1s vieja que comer gofio. Desde <strong>La D\u00e9cima V\u00edctima<\/strong> (1965) hasta <strong>Rollerball<\/strong> (1975) han establecido los cimientos del subg\u00e9nero, y todo lo que ha seguido son clones m\u00e1s o menos terribles. <strong>Gamer<\/strong> en particular se asemeja bastante al veh\u00edculo de Schwarzenegger <strong>The Running Man<\/strong> &#8211; otro tipo acusado injustamente de asesinato; un circo futurista letal; la idea de que el organizador est\u00e1 vinculado al crimen que se le imputa al protagonista -, con la \u00fanica novedad de que la competici\u00f3n es interactiva, ya que la gente controla a los <em>bots<\/em> desde su casa. Y los <em>bots<\/em> no son m\u00e1s que humanos a los que las c\u00e9lulas de una parte de su cerebro ha sido reemplazadas por nanotecnolog\u00eda. Todo esto termina resultando en una especie de partida masiva de <strong>Counter Strike<\/strong>, en donde los protagonistas son de carne y hueso y las matanzas son reales.<\/p>\n<p>Pero el primer tercio de <strong>Gamer<\/strong> es terrible. No s\u00f3lo es una catarata de clich\u00e9s del g\u00e9nero &#8211; guerrilleros clandestinos enemigos del juego y que hackean las transmisiones; inocente injustamente acusado de un cr\u00edmen; magnate soberbio y evidente villano de la historia; manifestaciones populares votando a Kable como un h\u00e9roe -, sino que la fren\u00e9tica edici\u00f3n arruina completamente las secuencias de acci\u00f3n. No hay plano que dure m\u00e1s de dos segundos, y en medio del tiroteo es imposible saber qu\u00e9 es lo que est\u00e1 sucediendo. A esto se suma la estratosf\u00e9rica sobreactuaci\u00f3n de Michael C. Hall como el malvado Bill Gates de turno, que hace que la pel\u00edcula sea a\u00fan m\u00e1s irritante.<\/p>\n<p style=\"text-align: center;\">\n<p>Por suerte &#8211; y cuando las cosas parec\u00edan condenadas a la obviedad -, <strong>Gamer <\/strong>mejora en el segundo tercio (o toma la posta el otro director de la dupla, que al menos es un poco menos hist\u00e9rico con la edici\u00f3n). Eso no quita de que hayan un par de idioteces en el medio &#8211; <em>si alguna vez se queda sin combustible para el coche, t\u00f3mese una petaca de whisky de medio litro, vom\u00edtela en el tanque de su auto y va a poder circular como 50 km a toda velocidad<\/em> -, pero al menos la incursi\u00f3n de Gerard Butler para rescatar a su esposa del otro juego de de Castle &#8211; <em>Society<\/em>, una especie de <strong>The Sims<\/strong> en carne y hueso &#8211; repunta algo la punter\u00eda del filme. La idea de tipos tirote\u00e1ndose en medio de gente completamente ajena y ausente de todo lo que ocurre a su alrededor es bastante interesante. Uno se pregunta c\u00f3mo ha ido a parar toda esa cantidad de personas a semejante videojuego &#8211; en el fondo, hay algo de fantas\u00eda masoquista en individuos que deciden abandonar su voluntad y se dejan ser manipulados por otros para satisfacer su voyeurismo -. Pero en el \u00faltimo cap\u00edtulo las cosas regresan a los carriles de la obviedad; y Michael C. Hall est\u00e1 mucho m\u00e1s tiempo (demasiado) en pantalla.<\/p>\n<p>Con otro director menos hist\u00e9rico con la c\u00e1mara, <strong>Gamer<\/strong> podr\u00eda haber resultado aceptable. Hay alguna que otra idea interesante que merec\u00eda ser explorada &#8211; como la de la versi\u00f3n virtual de <strong>The Sims<\/strong> con humanos -, y que podr\u00eda haber sido mucho m\u00e1s original que todo el verso remanido del juego futurista sangriento. Gerard Butler est\u00e1 m\u00e1s que ok, el resto m\u00e1s o menos, y Michael C. Hall (de la serie de TV <strong>Dexter<\/strong>) merece la muerte por empalamiento. Y posiblemente en video resulte menos repelente en lo visual que verla en la pantalla grande, pero en todos los casos no deja de ser rutina muy mal dirigida.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>Gamer (2009): un inocente debe participar en un sanguinario deporte futurista concebido como un videogame. Con Gerard Butler. Critica de la pelicula<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10920"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=10920"}],"version-history":[{"count":0,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10920\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=10920"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}