{"id":10824,"date":"2017-09-14T17:28:38","date_gmt":"2017-09-14T17:28:38","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/existenz\/"},"modified":"2019-08-05T10:49:31","modified_gmt":"2019-08-05T13:49:31","slug":"existenz","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/existenz\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: eXistenZ (1999)"},"content":{"rendered":"<p style=\"text-align: center;\">\n<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-2.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong>Canad\u00e1 \/ GB, 1999: Jennifer Jason Leigh (Allegra Geller), Jude Law (Ted Pikul), Willem Dafoe (Gas), Ian Holm (Kari Vinokur), Don McKellar (Yevgeny Nourish), Robert A. Silverman (D\u2019Arcy Nader), Callum Keith Rennie (Hugo Carlaw), Sarah Polley (Merle)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: David Cronenberg, Gui\u00f3n: David Cronenberg<\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>En el futuro la gente se volver\u00e1 tan adicta a los videojuegos que todos tendr\u00e1n una terminal de comunicaciones instalada en la m\u00e9dula dorsal, con la cual se conectar\u00e1n a consolas org\u00e1nicas que le transmitir\u00e1n las sensaciones directamente al cerebro. En dicho escenario los dise\u00f1adores de videogames ser\u00e1n celebridades, y Allegra Geller es la m\u00e1s importante y brillante de su especialidad. Ahora se encuentra presentando la versi\u00f3n beta de su \u00faltima obra &#8211; <em>llamada <strong>eXistenZ<\/strong> <\/em>&#8211; en reuniones de fans y especialistas de la industria: pero en mitad de la exhibici\u00f3n sufre un atentado y a duras penas logra escapar. Ahora Allegra huye en compa\u00f1\u00eda de un joven asesor de marketing llamado Ted Pikul, el que por las circunstancias se ha transformado en un improvisado guardaespaldas. Convencida de que hay una campa\u00f1a para matarla y para sabotear el juego &#8211; <em>por parte de reaccionarios y de empresas rivales<\/em> -, Allegra persuade a Pikul para conectarse al mundo virtual de<em><strong> eXistenZ<\/strong><\/em>, y chequear la integridad del mismo: pero sus enemigos han descubierto el enlace y tambi\u00e9n se han conectado, con lo cual intentar\u00e1n matarlos en dicho escenario virtual.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/2017\/09\/boton-existenz.jpg\" alt=\"eXistenZ\" width=\"200\" height=\"285\" border=\"1\" \/> En 1999 apareci\u00f3 <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/matrix\/\">Matrix<\/a>, las taquillas explotaron y, de pronto, medio mundo se encontr\u00f3 haciendo pel\u00edculas sobre <em>Realidad Virtual<\/em> ya que era la fiebre del momento. Es cierto que la idea ya ven\u00eda flotando de hace rato en el cine fant\u00e1stico japon\u00e9s, y que ven\u00eda emiti\u00e9ndose sin demasiado \u00e9xito la serie <strong>VR5<\/strong> desde 1995 (am\u00e9n de la pionera <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/hombre-jardin\/\">El Hombre del Jard\u00edn<\/a>, que data de 1992), pero no fue sino hasta la aparici\u00f3n de la obra de los hermanos Wachowski que el g\u00e9nero explot\u00f3 en toda su furia. En medio de un a\u00f1o ajetreado para el concepto &#8211; <em>que incluy\u00f3 la aparici\u00f3n de filmes como <strong>El Piso 13<\/strong> y el surgimiento de la fugaz serie de Chris Carter <strong>Harsh Realm<\/strong><\/em> &#8211; David Cronenberg se hizo un tiempo y decidi\u00f3 hacer su aporte al tema. Pero <strong>eXistenZ <\/strong>tiene tantos problemas en su concepci\u00f3n que dista mucho de ser lo m\u00e1s destacado (y recomendable) del cineasta canadiense.<\/p>\n<p>Uno de los principales problemas del filme es que parece escrito por alguien que jam\u00e1s jug\u00f3 un videojuego en su vida (o que lo hizo por primera vez 24 horas antes de escribir el libreto, como para tener una p\u00e1lida idea de qu\u00e9 se trata). <strong>eXistenZ<\/strong> exhibe cosas obvias como para decir que el autor sabe de <em>videogames<\/em> &#8211; <em>a final de cuentas, sigue las reglas de los juegos de aventuras conversacionales tipo<strong> Indiana Jones and the Fate of Atlantis<\/strong>: diga la frase correcta para seguir avanzando en la historia <\/em>-, sin darse cuenta que el mundo virtual que pretende vendernos es aburrid\u00edsimo &#8211; <em>todo transcurre en dos escenarios (una f\u00e1brica y una cantina), y nada de lo que ocurre es demasiado excitante<\/em> -. Para colmo, tampoco se empe\u00f1a en explotar todas las posibilidades que brinda la realidad virtual, en donde uno puede ser y puede crear cualquier cosa: por el contrario, no hay demasiada diferencia con la realidad com\u00fan (si es tal) que se muestra al principio del filme. Lo m\u00e1s exc\u00e9ntrico de estos universos son las creaciones t\u00edpicamente <em>cronenbergianas <\/em>que incluyen una terminal instalada en la columna vertebral de los participantes (<em>\u00bfun USB org\u00e1nico?<\/em>), una pistola de hueso que dispara muelas (wtf!), y una consola org\u00e1nica de forma obscena, la que se conecta con la m\u00e9dula espinal del jugador a trav\u00e9s de una especie de <em>tripa gorda<\/em> gigante. Quiten esas dos cosas de la trama y ver\u00e1n que no queda rastro alguno de la presencia de Cronenberg en la historia.<\/p>\n<p style=\"text-align: center;\">\n<p>Todo es demasiado chato y bizarro, y tampoco ayudan las interpretaciones man\u00edacas &#8211; <em>comenzando por Jennifer Jason Leigh, la que parece empastillada todo el tiempo<\/em> &#8211; ni los nombres raros de los personajes, ni las circunstancias estramb\u00f3ticas en las que se mete la historia. Es cierto que la <em><strong>XBox <\/strong>de carne<\/em> tiene su <em>appeal<\/em>, pero como la historia prefiere centrarse en el mon\u00f3tono universo virtual en vez de eso, las expectativas terminan por irse al ca\u00f1o. Tampoco est\u00e1 muy inspirada la alegor\u00eda sobre la adicci\u00f3n del mundo a las computadoras y los videojuegos (y el surgimiento de reaccionarios tecnof\u00f3bicos), ya que todo est\u00e1 hecho con trazos gruesos. En el fondo todo esto no es una mirada conservadora sobre la tecnolog\u00eda, vista como algo incontrolable que va acaparando la atenci\u00f3n de la gente hasta volverse una adicci\u00f3n enfermiza y parte imprescindible de la vida de uno (<em>\u00bfalguien dijo Internet?<\/em>).<\/p>\n<p><strong>eXistenZ<\/strong> es insatisfactoria por donde se la mire. No sirve como veh\u00edculo de acci\u00f3n, no explora en profundidad el universo creado como para generar inquietudes intelectuales, y todos los conceptos son vomitados a las apuradas, con lo cual por momentos se bordea lo rid\u00edculo. Es posible que Cronenberg tambi\u00e9n haya sentido bochorno por su pel\u00edcula, ya que se trata de su pen\u00faltima incursi\u00f3n en el cine fant\u00e1stico antes de reinventarse como director serio especializado en adaptar novelas gr\u00e1ficas para adultos. <strong>eXistenZ<\/strong> da muestras de agotamiento creativo y, trat\u00e1ndose de Cronenberg, ello representa una verdadera l\u00e1stima.<\/p>\n<h4>DAVID CRONENBERG<\/h4>\n<h5><em> En este portal hemos comentado algunos filmes de la obra de Cronenberg: <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/rabia\/\">Rabia<\/a> (1976), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/brood\/\">The Brood<\/a> (1979), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/scanners\/\">Scanners, Amos de la Muerte<\/a> (1981), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/zona-muerta\/\">La Zona Muerta<\/a> (1983), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/videodrome\/\">Videodrome, Cuerpos Invadidos<\/a> (1983), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/mosca-1986\/\">La Mosca<\/a> (1986), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/naked-lunch\/\">Almuerzo Desnudo<\/a> (1991), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/existenz\/\">eXistenZ<\/a> (1999)<\/em><\/h5>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>eXistenZ (1999): David Cronenberg nos trae esta historia sobre un futuro posible en donde la gente es adicta a los videojuegos y las computadoras se conectan organicamente con los seres humanos. Critica de la pelicula<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10824"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=10824"}],"version-history":[{"count":0,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10824\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=10824"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}