{"id":10713,"date":"2017-09-14T17:27:47","date_gmt":"2017-09-14T17:27:47","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/diabolicas\/"},"modified":"2024-01-11T18:28:13","modified_gmt":"2024-01-11T21:28:13","slug":"diabolicas","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/diabolicas\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: Las Diab\u00f3licas (Les Diaboliques) (1955)"},"content":{"rendered":"<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-5.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong>Francia, 1955: Vera Clouzot (Christina Delassalle), Simone Signoret (Nicole Horner), Paul Meurisse (Michel Delassalle), Charles Vanel (Inspector Alfred Fichet), Michael Serrault (M. Raymond), Pierre Larquey (M. Drain)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: Henri-Georges Clouzot, Gui\u00f3n: Henri-Georges Clouzot &amp; Jerome Geronimi, basados en la novela <em>Aquella que no Est\u00e1 M\u00e1s<\/em> de Pierre Boileau &amp; Thomas Narcejac<\/strong><\/p>\n<p><strong><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/recomendaciones-editor-indice\/\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"wp-image-24154 size-full aligncenter\" title=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/recomendacion-editor.jpg\" alt=\"Recomendaci\u00f3n del Editor\" width=\"200\" height=\"40\" \/><\/a><\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>Michel Delassalle es un cruel d\u00e9spota que rige con mano de hierro el colegio que hered\u00f3 su mujer Christina &#8211; <em>a la que maltrata sin piedad <\/em>-, y se ufana desvergonzadamente del amor\u00edo que mantiene con Nicole Horner, una de las profesoras de la escuela y a la cual acostumbra golpear de manera peri\u00f3dica. La situaci\u00f3n se ha vuelto tan extrema que la esposa y la amante de Michel se han vuelto amigas y han confabulado juntas durante todo este tiempo para matarlo. Puestas de acuerdo, le han tendido una trampa a Michel, inventado una excusa para hacerlo viajar a la comarca, y all\u00ed sedarlo y ahogarlo en una ba\u00f1era. De regreso a Paris han volcado el cuerpo en la sucia piscina de la escuela, con la esperanza de que el cuerpo no fuera descubierto hasta el verano&#8230; pero una serie de circunstancias fortuitas han acortado los plazos y la pileta ha debido ser desagotada antes de tiempo. Pero el cuerpo de Michel ha desaparecido sin dejar rastro y, muy pronto, la pareja de homicidas comenzar\u00e1 a sufrir horas de desesperaci\u00f3n&#8230; especialmente cuando numerosos testigos les cuenten que han visto a Michel rondar por los pasillos del colegio.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"aligncenter wp-image-29615 size-full\" title=\"Cr\u00edtica: Las Diab\u00f3licas (Les Diaboliques) (1955)\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/foto-diaboliques.jpg\" alt=\"Cr\u00edtica: Las Diab\u00f3licas (Les Diaboliques) (1955)\" width=\"850\" height=\"400\" srcset=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/foto-diaboliques.jpg 850w, http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/foto-diaboliques-300x141.jpg 300w, http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/foto-diaboliques-768x361.jpg 768w\" sizes=\"(max-width: 850px) 100vw, 850px\" \/><\/p>\n<p>Existen cl\u00e1sicos que operan como matrices hist\u00f3ricas de toda una generaci\u00f3n de filmes. <strong>Las Diab\u00f3licas <\/strong>es uno de ellos. B\u00e1sicamente es una conspiraci\u00f3n salpicada de toques sobrenaturales, en donde el fin primordial es que la v\u00edctima de turno cometa un determinado acto irracional despu\u00e9s de un estudiado operativo para enloquecerla. Es una f\u00f3rmula simple pero efectiva, que le da un espacio enorme al director para que se luzca en las escenas de suspenso, y que posee una estructura muy f\u00e1cil para reciclar: basta cambiar un par de nombres, algunas situaciones, el sexo de los protagonistas, y podr\u00e1n obtener en poco tiempo otro <em>thriller <\/em>efectivo sin romperse demasiado la sesera. Pero el componente fundamental es el aspecto seudo sobrenatural de todo el asunto: el muerto que vuelve de la tumba, o la presencia fantasmag\u00f3rica que acosa al homicida. Sobre ese molde uno puede citar a decenas de filmes que han tomado &#8211; <em>en mayor o menor medida<\/em> &#8211; elementos de <strong>Las Diab\u00f3licas<\/strong>: basta con citar a <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/hush-charlotte\/\">Hush, Hush, Sweet Charlotte<\/a>, pasando por una tonelada de filmes de William Castle, y llegando a <strong>Revelaciones<\/strong> (2000) de Robert Zemeckis. Hasta la misma <strong>Psicosis<\/strong> de Hitchcock (por no decir <strong>V\u00e9rtigo<\/strong>, una historia que los autores de <strong>Les Diaboliques<\/strong> le hicieron a medida para complacer al director ingl\u00e9s) tiene ese giro de tuerca cuasi sobrenatural que, finalmente, termina siendo explicado en terminos mundanos &#8211; <em>cuando no, cient\u00edficos<\/em> -: <strong>\u00bfse trata realmente de un fantasma, o es que el protagonista se est\u00e1 volviendo loco?. <\/strong><\/p>\n<p>Lo primero que salta a la vista es que <strong>Las Diab\u00f3licas <\/strong>est\u00e1 impregnada de un tenso clima <em>hitchcockiano<\/em> &#8211;<em> es sabido que el maestro del suspenso estuvo en un tris de adquirir los derechos sobre la novela <\/em>-. En menos de cinco minutos establecemos la situaci\u00f3n de los personajes y la conspiraci\u00f3n para asesinar uno de ellos. Hay una enorme econom\u00eda de medios &#8211; <em>tres personajes, un par de escenarios, un coro de caracteres secundarios que s\u00f3lo sirven para pintar de cuerpo entero a los protagonistas<\/em> &#8211; que redunda en una gran eficiencia narrativa. Quiz\u00e1s el toque franc\u00e9s viene por el lado femenino &#8211; <em>la esposa y la amante se hacen amigas, y juntas confabulan para deshacerse del marido ya que se trata de un individuo dominante e implacable<\/em> -, el cual ser\u00eda tolerable en la liberal Francia pero no en la conservadora Norteam\u00e9rica. Imaginen ustedes a gente tan sobria como Ingrid Bergman y Grace Kelly (por poner las primeras actrices que se me ocurren y que se parecen fisicamente a las protagonistas de la pel\u00edcula) jugando los roles de esta pareja de amorales, las cuales (a su vez) exhiben alg\u00fan que otro subtexto l\u00e9sbico. No s\u00f3lo provocar\u00eda el rechazo del p\u00fablico de la \u00e9poca sino que tambi\u00e9n chocar\u00eda con las estrictas reglas del c\u00f3digo Hays. Todo el relato exuda amoralidad por los cuatro costados y, en todo caso, lo que exime de la recriminaci\u00f3n a la dupla Clouzot &#8211; Signoret es que la dupla de mujeres se enfrentan a un antagonista mucho m\u00e1s despreciable que el acto horrible que van a cometer.<\/p>\n<p>Ciertamente Clouzot no es Hitchcock y uno echa de menos alguno de los firuletes t\u00edpicos que el maestro ingl\u00e9s podr\u00eda haberse despachado con semejante relato; en todo caso el trabajo de Clouzot es veloz y eficiente, pero descansa la mayor parte de su efectividad en el imaginativo gui\u00f3n que le toca en suerte. Es un libreto plagado de situaciones de alta tensi\u00f3n &#8211;<em> drogar al malvado protagonista &#8230; aunque la esposa dude a \u00faltimo momento de darle el vaso de whisky intoxicado; el complicado proceso de deshacerse del cad\u00e1ver en mitad del colegio a medianoche; el suspenso por el descubrimiento fortuito del cuerpo&#8230; el cual nunca aparece; y todas las pruebas sobrecogedoras de que alguien (\u00bfel mismo muerto?) est\u00e1 rondado el lugar y utiliza las cosas del desaparecido<\/em> &#8211; que est\u00e1 resueltas de manera brillante. Quiz\u00e1s la inclusi\u00f3n del personaje del detective retirado se vea algo forzada, pero el resto es formidable. El cl\u00edmax es impresionante, a\u00fan cuando uno &#8211; <em>con los kil\u00f3metros de celuloide que carga sobre sus espaldas<\/em> &#8211; lo vea venir desde lejos. Creo que es una de las muertes m\u00e1s shockeantes y realistas que he visto en el cine en mucho tiempo.<\/p>\n<p>Es curioso notar c\u00f3mo el agua juega un papel fundamental en toda la historia. En general el agua se suele asociar con el nacimiento y el bautismo &#8211; <em>el cual no es sino el nacimiento a una nueva religi\u00f3n <\/em>-. Aqu\u00ed el agua es una suerte de rito de pasaje en donde el factor desequilibrante &#8211;<em> el marido<\/em> &#8211; pasa a otro plano, y las protagonistas quedan en soledad, siendo acosadas por sus propias conciencias. Cuando esa puerta se abre nuevamente, es en sentido inverso: una persona regresa de la muerte y otra se va, cerrando el proceso de expiaci\u00f3n de sus propias culpas. Tambi\u00e9n es cierto que las personas que quedan en medio de ese proceso de apertura y cierre de puertas &#8211;<em> la esposa y la amante<\/em> &#8211; carecen de integridad moral como para resultar rescatables: nada les imped\u00eda que tomaran el <strong>Citroen 2CV<\/strong> y se perdieran en la campi\u00f1a francesa, lejos del individuo que las torturaba. En todo caso la Signoret y la Clouzot reciben su merecido por elegir la opci\u00f3n m\u00e1s f\u00e1cil (pero violenta) para mantener la vida que estaban llevando, y quiz\u00e1s iniciar la reprimida relaci\u00f3n l\u00e9sbica que el gui\u00f3n no se atreve a reforzar (aunque la espantosa <em>remake<\/em> de Jeremiah Chechik deja en evidencia sin demasiados miramientos). A final de cuentas, si la Signoret colabora en el complot del asesinato es porque desea quedarse con el &#8220;puesto&#8221; del marido de la Clouzot.<\/p>\n<p><strong>Las Diab\u00f3licas<\/strong> es un gran filme. Las actuaciones son muy buenas aunque no sobresalientes &#8211;<em> Vera Clouzot parece una versi\u00f3n m\u00e1s fresca y femenina de la Garbo (una l\u00e1stima que repitiera la historia del filme en la vida real y falleciera del coraz\u00f3n a los 46 a\u00f1os de edad), y compone a su personaje como una mujer com\u00fan y decidida, con raptos de flaqueza cuando debe lidiar con un monstruo al que le teme; por contra, la Signoret es algo estoica pero quiz\u00e1s sea eso lo que requiere el papel (uno llega a la conclusi\u00f3n que, si no fuera por el d\u00e9spota del marido, estas dos mujeres jam\u00e1s hubieran sido amigas en la vida real); y el mejor de todos es Paul Meurisse, el que destila ego\u00edsmo y crueldad por todos los poros, pero lo camufla bajo una radiante m\u00e1scara de falsa caballerosidad <\/em>-; la direcci\u00f3n es eficiente, pero quiz\u00e1s no es florida. La gracia reside sin dudas en el libreto y, al mezclarse con buenos ingredientes, el producto final es muy superior a la suma de sus partes; porque, como en el f\u00fatbol, uno no precisa tener un pu\u00f1ado de <em>cracks<\/em> para brillar sino simplemente un equipo de gente id\u00f3nea, que sea eficiente y trabaje en grupo, y por lo cual logra obtener resultados memorables.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>Las Diabolicas (1955): Vera Clouzot se confabula con la amante de su marido (Simone Signoret) para asesinar a este, en este clasico de suspenso del cine frances. Critica de la pelicula<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10713"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=10713"}],"version-history":[{"count":1,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10713\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":34912,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10713\/revisions\/34912"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=10713"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}