{"id":10513,"date":"2017-09-14T17:26:40","date_gmt":"2017-09-14T17:26:40","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/brood\/"},"modified":"2019-08-01T04:09:06","modified_gmt":"2019-08-01T07:09:06","slug":"brood","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/brood\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: Cromosoma 3 (The Brood) (1979)"},"content":{"rendered":"<p style=\"text-align: center;\">\n<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-4.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong>Canad\u00e1, 1979: Art Hindle (Frank Carveth), Oliver Reed (Dr Hal Raglan), Samantha Eggar (Nola Carveth), Cindy Hinds (Candy Carveth), Susan Hogan (Ruth Meyer), Gary McKeehan (Mike Trellan), Robert Silverman (Jan Hartog)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: David Cronenberg, Gui\u00f3n: David Cronenberg<\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>El matrimonio de Frank y Nola Carveth est\u00e1 pasando por serios problemas, y la mujer termina internada en el instituto de t\u00e9cnicas experimentales siqui\u00e1tricas del Dr. Hal Raglan. Frank ha descubierto que su esposa ha abusado f\u00edsicamente de su hija y Raglan comienza a tratarla por ello, descubriendo vestigios de un pasado violento por parte de los padres de Nola. La t\u00e9cnica que utiliza Raglan &#8211; conocida como <em>psicoplasma<\/em> &#8211; permite a los pacientes materializar su odio a trav\u00e9s de manifestaciones corporales como llagas y p\u00fastulas; pero la furia que reside en Nola ha comenzado a generar criaturas deformes, las cuales han comenzado a asesinar de manera brutal a aquellos a quien considera sus enemigos.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/2017\/09\/boton-brood.jpg\" alt=\"Cromosoma 3 (The Brood)\" width=\"120\" height=\"160\" \/> Despu\u00e9s de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/rabia\/\">Rabia<\/a> (1976), la siguiente pel\u00edcula de g\u00e9nero que acometi\u00f3 David Cronenberg fue <strong>Cromosoma 3<\/strong> (traducci\u00f3n demasiado libre de <strong>The Brood<\/strong> &#8211; <em>La Cr\u00eda<\/em> -). Tal como Andrej Zulawski con <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/posesion-1981\/\">Posesi\u00f3n<\/a>, Cronenberg utiliz\u00f3 el cine como catarsis para las broncas internas que debi\u00f3 padecer durante el traum\u00e1tico proceso de divorcio que estaba pasando en ese momento. Al menos con el canadiense los resultados son mucho m\u00e1s inteligentes y t\u00e9tricos que con la <em>idiotez<\/em> de Zulawski.<\/p>\n<p>Hay algo de cierto en toda la teor\u00eda sobre la que se centra <strong>The Brood,<\/strong> de que las personas materializan (<em>sicomatizan<\/em>) sus sentimientos. Despu\u00e9s de todo, las grandes amarguras y los grandes odios disparan enfermedades como el c\u00e1ncer (o al menos disminuyen las defensas del organismo y dejan v\u00eda libre a las enfermedades). Pero aqu\u00ed Cronenberg lleva este punto a un grado extremo. Durante gran parte del filme la premisa sigue por el carril antes mencionado &#8211; el ex paciente que visita Art Hindle y cuyo odio le despert\u00f3 un c\u00e1ncer en el cuello; el hombre lleno de p\u00fastulas por su amarga relaci\u00f3n con su padre -, lo cual resulta cre\u00edble. Durante esos momentos es que la pel\u00edcula funciona como una especie de obra de teatro experimental, con gente interpretando <em>sicodramas<\/em>, cayendo en estados alternativos de consciencia sin necesidad de hipnosis, y disparando exagerados histrionismos.<\/p>\n<p>Donde el film flaquea un poco es con las criaturas de marras, que son engendradas a partir del odio de Samantha Eggar. Ciertamente Eggar es una sic\u00f3tica egoc\u00e9ntrica y detestable desde el primer fotograma en que aparece, pero el tema de que sus <em>monstruitos del inconsciente<\/em> vistan ropas para el fr\u00edo y sepan exactamente donde encontrar a sus v\u00edctimas es algo medio tra\u00eddo de los pelos &#8211; el filme se encarga de dar una explicaci\u00f3n al respecto cerca del final, mostrando los barracones del Dr. Raglan -. En donde Cronenberg compensa lo cuestionable de los monstruos de turno es con su excelente direcci\u00f3n para las escenas de shock, las que provocan m\u00e1s de un salto. El ataque inicial en la cocina de la madre de Nola, la secuencia en la escuela, y por supuesto el excelente climax terminan por equilibrar otros momentos m\u00e1s bobos como el de la autopsia de una de las criaturas.<\/p>\n<p style=\"text-align: center;\">\n<p>Es interesante ver como Cronenberg ha tratado el sindrome de <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/frankenstein-1931\/\">Frankenstein<\/a> a trav\u00e9s de su propia \u00f3ptica. En ese sentido Oliver Reed no es el tradicional cient\u00edfico demente, sino un individuo fascinado por el procedimiento cient\u00edfico que ha inventado. No es una persona enamorada de su criatura &#8211; no hay inter\u00e9s rom\u00e1ntico con Eggar -, sino que lo suyo pasa por un aspecto puramente intelectual. El tema es que \u00e9l se ha topado con una persona cuyos poderes superan a lo controlable, y a\u00fan as\u00ed decide seguir adelante hasta ver c\u00faal es el final. Si bien al principio Reed se ve como un amoral, su personaje termina mostrando que a\u00fan mantiene c\u00f3digos de conducta y \u00e9tica, y sabe cu\u00e1ndo ha pasado el l\u00edmite para generar m\u00e1s da\u00f1o que beneficio &#8211; la presencia de la ni\u00f1a de los Carveth en los barracones marca ese l\u00edmite -. Por contra, Samantha Eggar no es el mal en persona, sino una mujer que ha sido brutalmente traumatizada y que su relaci\u00f3n con el mundo se define en t\u00e9rminos de neutralidad y odio, precisamente porque anticipa que tal o cual individuo puede llegar a lastimarla. No es un monstruo pat\u00e9tico y unidimensional, sino una v\u00edctima del abuso que termina por generar nuestra pena. Las cosas se salen de control cuando ella cae en un estado sic\u00f3tico en donde cualquiera es enemigo, con lo cual se demuestra que la v\u00eda terape\u00fatica que ha elegido Oliver Reed ha fallado &#8211; algo que el personaje hab\u00eda anticipado cuando le dice al marido <em>&#8220;si ve a otra persona que no sea yo en este momento, su mente puede caer en la locura de manera irremediable&#8221;<\/em> -.<\/p>\n<p>Y por supuesto est\u00e1 la materializaci\u00f3n de dicho odio. Lo que uno termina por cuestionar es lo <em>standard <\/em>de los monstruos (son enanos deformes vestidos con ropa de calle, en vez de engendros en carne viva al estilo <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/aliens\/\">Alien<\/a>), quiz\u00e1s por una elecci\u00f3n art\u00edstica para que ellos puedan moverse entre nosotros de manera desapercibida &#8211; como en la secuencia de la escuela -. Los ataques est\u00e1n m\u00e1s que ok, y el climax es inquietante.(alerta: <span style=\"color: #ff0000;\"><strong>spoilers<\/strong><\/span>). La pol\u00e9mica escena en que Samantha Eggar lame a la criatura reci\u00e9n nacida es estremecedora, y es propia del <em>fetichismo org\u00e1nico<\/em> de Cronenberg. Precisamente el director ha cuestionado duramente la decisi\u00f3n de la censura brit\u00e1nica de cortar dicha escena, ya que &#8211; seg\u00fan \u00e9l &#8211; la platea ahora puede pensar que Eggar se ha <em>devorado <\/em>a su beb\u00e9 &#8230; lo cual resulta mucho m\u00e1s monstruoso y desagradable que la idea inicial de que lo limpiara de manera amorosa. (fin <span style=\"color: #ff0000;\"><strong>spoilers<\/strong><\/span>).<\/p>\n<p><strong>The Brood<\/strong> es Cronenberg de alta calidad. Hay algunas pifias conceptuales con el tema de los monstruos, pero el resto es impecable. Cronenberg seguir\u00eda con <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/scanners\/\">Scanners<\/a> (1981), con lo cual obtendr\u00eda fama y poder art\u00edstico como para comenzar a desarrollar proyectos m\u00e1s grandes, s\u00f3lo que esta vez en Hollywood.<\/p>\n<h4>DAVID CRONENBERG<\/h4>\n<h5><em> En este portal hemos comentado algunos filmes de la obra de Cronenberg: <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/rabia\/\">Rabia<\/a> (1976), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/brood\/\">The Brood<\/a> (1979), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/scanners\/\">Scanners, Amos de la Muerte<\/a> (1981), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/zona-muerta\/\">La Zona Muerta<\/a> (1983), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/videodrome\/\">Videodrome, Cuerpos Invadidos<\/a> (1983), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/mosca-1986\/\">La Mosca<\/a> (1986), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/naked-lunch\/\">Almuerzo Desnudo<\/a> (1991), <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/existenz\/\">eXistenZ<\/a> (1999)<\/em><\/h5>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>Cromosoma 3 (The Brood): un sicologo logra que sus pacientes materializan sus temores en este inquietante filme de David Cronenberg. Critica de la pelicula<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10513"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=10513"}],"version-history":[{"count":0,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10513\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=10513"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}