{"id":10390,"date":"2017-09-14T17:21:09","date_gmt":"2017-09-14T17:21:09","guid":{"rendered":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/atlas-shrugged2\/"},"modified":"2019-07-25T09:14:55","modified_gmt":"2019-07-25T12:14:55","slug":"atlas-shrugged2","status":"publish","type":"page","link":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/atlas-shrugged2\/","title":{"rendered":"Cr\u00edtica: Atlas Shrugged Part II: The Strike (2012)"},"content":{"rendered":"<p style=\"text-align: center;\">\n<h2><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/criticas-1910-1959\/\">Volver al \u00edndice de cr\u00edticas por a\u00f1o<\/a>\u00a0\/ una cr\u00edtica del film, por <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/nuestra-critica\/\">Alejandro Franco<\/a><\/h2>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/atomicos-3.webp\" width=\"200\" height=\"40\" \/> <strong>USA, 2012: Samantha Mathis (Dagny Taggart), Jason Beghe (Henry Rearden), Esai Morales (Francisco d&#8217;Anconia), Patrick Fabian (James Taggart), Kim Rhodes (Lillian Rearden), Richard T. Jones (Eddie Willers), D.B. Sweeney (John Galt), Paul McCrane (Wesley Mouch)<\/strong><\/p>\n<p><strong>Director: John Putch, Gui\u00f3n: Duke Sandefur, Brian Patrick O&#8217;Toole &amp; Duncan Scott, basados en la novela hom\u00f3nima de Ayn Rand<\/strong><\/p>\n<p style=\"text-align: center;\"> <div align=\"center\">\r\n<script async src=\"https:\/\/pagead2.googlesyndication.com\/pagead\/js\/adsbygoogle.js\"><\/script>\r\n<!-- arlequin 2021 horizontal 1 -->\r\n<ins class=\"adsbygoogle\"\r\n     style=\"display:block\"\r\n     data-ad-client=\"ca-pub-7123708303881806\"\r\n     data-ad-slot=\"6568397370\"\r\n     data-ad-format=\"auto\"\r\n     data-full-width-responsive=\"true\"><\/ins>\r\n<script>\r\n     (adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});\r\n<\/script>\r\n<\/div><\/p>\n<h3><strong>Trama: <\/strong>El futuro. El mundo se encuentra sumido en una crisis global gracias a la escasez de combustible. Los \u00fanicos que parecen prosperar son las corporaciones lideradas por Dagny Taggart y Henry Rearden, las que se dedican respectivamente a los ferrocarriles y a la siderurgia, y cuya alianza ha servido para montar un tren de alta velocidad que se ha constitu\u00eddo en el \u00fanico medio de comunicar toda la naci\u00f3n. Pero el gobierno norteamericano est\u00e1 celoso de los logros de Taggart y Rearden, y ha impuesto una ley marcial econ\u00f3mica, oblig\u00e1ndolos a donar la propiedad intelectual de sus patentes y descubrimientos &#8211; <em>entre ellos el indestructible metal Rearden, el cual ha revolucionado la industria y ha servido para montar el eficiente tren que Taggart regentea<\/em> -, y forz\u00e1ndolos a compartir ganancias con las empresas m\u00e1s ineficientes. En semejante puja entre empresarios y bur\u00f3cratas vuelve a surgir el nombre de John Galt, un inventor idealista que parece haber construido un generador de energ\u00eda inagotable, el cual se alimenta de la energ\u00eda est\u00e1tica del medio ambiente. Dicho generador est\u00e1 en manos de Dagny Taggart, pero el mismo se encuentra incompleto y el paradero de Galt &#8211;<em> el \u00fanico que puede hacerlo funcionar <\/em>&#8211; es un misterio. Y, en la hora m\u00e1s oscura para la corporaci\u00f3n que preside, Taggart parece haber hallado una pista para dar con Galt, el cual parece estar reclutando a empresarios e inventores para montar un proyecto secreto que logre paliar la crisis energ\u00e9tica y &#8211;<em> lo que es mejor<\/em> &#8211; voltear a los ambiciosos bur\u00f3cratas del gobierno que regulan la actividad privada.<\/h3>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" class=\"size-full alignright\" src=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-content\/uploads\/2017\/09\/boton-atlas-shrugged2.jpg\" alt=\"Atlas Shrugged Part II: The Strike (2012)\" width=\"200\" height=\"293\" border=\"1\" \/> En el 2011 apareci\u00f3 <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/atlas-shrugged\/\">Atlas Shrugged<\/a>, la cual era la adaptaci\u00f3n parcial del popular y pol\u00e9mico libro escrito por Ayn Rand en 1957. En s\u00ed, <strong>Atlas Shrugged<\/strong> no era mas que un panfleto pol\u00edtico disfrazado de<em> thriller<\/em>, en donde la escritora inventaba una trama para ejemplificar los aspectos m\u00e1s destacados de su postura filos\u00f3fica y pol\u00edtica, conocida como <em>Egoismo Racional<\/em>. En s\u00ed, el <em>Egoismo Racional<\/em> no es sino la expresi\u00f3n mas radicalizada del capitalismo salvaje, en donde se aduce que los empresarios estar\u00edan mucho mejor si no existiera el Estado, e indicando que las leyes del mercado son las \u00fanicas que existen. A medida que uno comienza a profundizar en las implicancias de semejante filosof\u00eda, llega a la conclusi\u00f3n de que se trata de una postura atroz por donde se la mire: lo de Rand no es mas que <em>Darwinismo<\/em> social y econ\u00f3mico, en donde el pobre debe morir y el mundo queda reservado para los exitosos y adinerados. Los sindicatos son una molestia y los \u00fanicos que tienen la raz\u00f3n son los capitalistas de fama y fortuna. Como dice un personaje en el filme que nos ocupa, <em>&#8220;cada d\u00f3lar que integra su fortuna constituye una medalla al \u00e9xito e ingenio que tienes&#8221;.<\/em><\/p>\n<p>Es una posici\u00f3n tan radical que resulta est\u00fapida; el problema con las posiciones radicales es que, en las crisis mas graves y devastadoras, una gran parte de la gente termina por volcarse a ellas, abraz\u00e1ndolas cuando incluso en un principio la rechazaban. Resulta obvio que el nazismo no tiene nada que ver con el Ego\u00edsmo Racional de Rand, pero comparten cierta gen\u00e9tica, en donde se establecen soluciones revolucionarias &#8211; <em>que implican el arrasamiento de todo lo establecido<\/em> &#8211; para construir de cero un nuevo orden. Los discursos de Sarah Palin est\u00e1n empapados de la filosof\u00eda de Rand, la cual desborda de tintes facistoides al reclamar que <em>&#8220;Dios debe regresar al lugar a cual pertenece: los Estados Unidos&#8221;<\/em>, como si el resto del mundo s\u00f3lo sirviera como retrete de <em>yanquilandia<\/em>. La culpa es de los dem\u00e1s y del gobierno, y hay que dejar que los capitalistas hagan lo suyo sin regulaciones, ya que ellos son los que han hecho grande a la naci\u00f3n. Mientras que hay algo de cierto en todo ello &#8211; <em>el esp\u00edritu emprendedor norteamericano y las leyes de mercado han propiciado la fama y fortuna de un pu\u00f1ado de selectos iluminados, historias entre las cuales se cuenta la de Steve Jobs, Bill Gates, Thomas Alva Edison, y un vast\u00edsimo etc\u00e9tera <\/em>-, por otra parte la intervenci\u00f3n del Estado ha sido m\u00e1s que necesario para que los poderosos no exploten a morir a los m\u00e1s d\u00e9biles. Si el capitalismo salvaje de la revoluci\u00f3n industrial se hubiera mantenido sin regulaciones, los obreros seguir\u00edan trabajando con jornadas de 16 horas diarias, se mantendr\u00eda el trabajo infantil y a nadie le importar\u00eda un pito si el trabajador tiene cobertura m\u00e9dical o siquiera cobra un sueldo respetable.<\/p>\n<p>En semejante contexto, ver una obra como <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/atlas-shrugged\/\"><strong>Atlas Shrugged<\/strong><\/a> s\u00f3lo sirve para provocar fervientes reacciones de rechazo. La obra es de una ingenuidad asombrosa, la cual intenta hacer que compremos a toda costa la mentira absurda que ella misma se ha inventado. Ello no significa que uno deba repudiarla ciegamente por lo que es pero, lo que es m\u00e1s que seguro, es que a nadie le resultar\u00e1 indiferente el contenido pol\u00edtico del filme. En ese sentido aplaudo la voluntad de los productores, quienes han seguido financiando este <em>ladrillo <\/em>sabiendo que nunca dar\u00e1 ganancias y cuya mayor utilidad ser\u00e1 despertar acalorados debates en c\u00edrculos intelectuales. Es por ello que respeto la intenciones del filme, aunque disiento seriamente en la filosof\u00eda que propugna.<\/p>\n<p style=\"text-align: center;\">\n<p>Considerando que <strong>Atlas Shrugged <\/strong>es un panfleto, los productores lograron hacer una colecta entre los defensores de la obra para poder rodar una segunda (y hasta una tercera) parte, a\u00fan cuando no se pudieron recuperar del enorme rojo que gener\u00f3 el filme original. El hecho de obtener semejante cantidad de fondos para financiar una obra destinada a dar p\u00e9rdidas desde el vamos, es un claro indicativo que existen numerosos poderosos que comparten y apoyan seriamente los postulados de la filosof\u00eda de Rand.<\/p>\n<p>En s\u00ed, <strong>Atlas Shrugged Part II: The Strike<\/strong> no es mas que una regurgitaci\u00f3n de la <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/atlas-shrugged\/\">Parte I<\/a>. La historia no avanza demasiado &#8211;<em> a esta pareja de capitalistas \/ amantes les siguen pasando las mil y una, gracias a esos bastardos bur\u00f3cratas intervencionistas que yacen en los estamentos m\u00e1s altos del gobierno, y que s\u00f3lo propulsan la chatura y la mediocridad <\/em>-, pero al menos la trama sigue resultando cuasi interesante, gracias a que pusieron un cast completamente nuevo y hay un director mas h\u00e1bil detr\u00e1s de c\u00e1maras. Ello no quita que no hayan momentos de acalambrante ridiculez, como cuando el presidente de los EE.UU. decide dictar la <em><strong>ley marcial econ\u00f3mica <\/strong>(WTF!)<\/em>, congelando precios y salarios, y obligando a que todos los empresarios cedan sus derechos de propiedad al Estado, am\u00e9n de verse imposibilitados de renunciar si est\u00e1n en desacuerdo. Es que el texto de Rand se empecina en poner al gobierno como una manga de retorcidos incompetentes, capaces de hacer las estupideces mas abismales con tal de perjudicar a los virginales capitalistas que s\u00f3lo quieren sumar unos millones a su fortuna. A\u00fan con toda la imbecilidad enquistada en el texto, inherente a la filosof\u00eda de Rand, <strong>Atlas Shrugged Part II<\/strong> se deja ver, simplemente porque funciona como un<em> thriller<\/em> de segunda categor\u00eda. Las performances son buenas y los personajes son, por momentos, interesantes, hasta que se deciden a vomitar una parrafada panfletaria, momento en que todos los m\u00e9ritos del filme se van al diablo.<\/p>\n<p>Pero si hay algo que reprochar a<strong> Atlas Shrugged Part II: The Strike<\/strong>, es que se trata de una dilaci\u00f3n innecesaria. Todo el texto de Rand podr\u00eda haberse reducido a dos filmes, y uno ten\u00eda todas las expectativas puestas en que el dichoso John Galt har\u00eda acto de presencia aqu\u00ed y contribuir\u00eda a desenredar de una vez por todas la trama. Como eso no pasa, lo que hay es un <em>culebr\u00f3n capitalista <\/em>demasiado estirado, con momentos acertados y pifias bastante feas &#8211; <em>como el implacable uso del latiguillo<strong> \u00bfqui\u00e9n es John Galt?<\/strong>, dicho en los momentos m\u00e1s ridiculos e inoportunos de la historia<\/em> -, que termina siendo aplastado bajo el peso de su propia (y auto impuesta) solemnidad. Esto se traduce en diferentes valoraciones de un mismo film seg\u00fan la \u00f3ptica con que se lo mire: puede considerarlo como el cap\u00edtulo II de un<em> thriller<\/em> rebuscado y mediocre; como un panfleto pol\u00edtico ostentoso y rid\u00edculo; o como un fracaso con apasionantes repercusiones, ya que sirve para encender un debate de cierta altura. Yo me quedo con la \u00faltima opci\u00f3n, raz\u00f3n por la cual lo ubico en la categor\u00eda de potable aunque estoy seguro que el 95% de la gente que vea el filme la tildar\u00e1 de pastiche prepotente e intragable.<\/p>\n<h4>LA REBELION DE ATLAS (ATLAS SHRUGGED) SEGUN AYN RAND<\/h4>\n<h5><em><a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/atlas-shrugged\/\">Atlas Shrugged Parte I<\/a> (2011) &#8211; <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/atlas-shrugged2\/\">Atlas Shrugged, Parte II: el Golpe<\/a> (2012) &#8211; <a href=\"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/atlas-shrugged3\/\">Atlas Shrugged, Parte III<\/a> (2014)<\/em><\/h5>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>Atlas Shrugged Parte II (2012): el gobierno sigue presionando a os Taggart para apoderarse de su negocio de ferrocarriles, en esta adaptacion de la novela clasica de Ayn Rand. Critica de la pelicula<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10390"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=10390"}],"version-history":[{"count":0,"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/10390\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/arlequin2024ultra\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=10390"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}