Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco
USA, 1990: Michael J. Fox (Marty McFly / Seamus McFly), Christopher Lloyd (Emmett ’Doc’ Brown), Mary Steenburgen (Clara Clayton), Thomas F. Wilson (Buford ‘Perro Loco’ Tannen / Biff Tannen), Elizabeth Shue (Jennifer Parker)
Director: Robert Zemeckis, Guión: Bob Gale
Trama: Marty McFly ha quedado varado en 1955 mientras que Doc Brown – luego de ser alcanzado por un rayo en su máquina del tiempo – ha sido transportado al año 1885 y sin posibilidad de regreso. Marty contacta a la versión 1955 de Doc Brown, y ambos descubren a la máquina del tiempo enterrada en una vieja mina. Pero, accidentalmente, Marty también descubre que el Doc Brown que ahora vive en 1885 ha sido asesinado a la semana de escribir la carta con el paradero del De Lorean. Ahora Marty viaja al tiempo del lejano oeste para cambiar la suerte de Doc… pero la máquina del tiempo vuelve a romperse y ahora ambos permanecen varados en el siglo XIX, con escasas probabilidades de alterar el destino de ambos viajeros del tiempo.
Volver al Futuro 3 es la segunda y última secuela del megahit Volver al Futuro (1985). La primera fue una aventura muy fresca, la segunda estaba bien y reciclaba con ingenio las premisas del original, pero en el tercer capítulo la saga empieza a dar señales de cansancio creativo. Al menos hay cierta recuperación del tono emocional del primer filme, y los villanos funcionan mejor, pero la sensación de deja vu es bastante fuerte y opaca los méritos de la pelicula.
Lo primero que uno debe admitir es que, si bien hasta ahora la saga funcionaba a la perfección en términos de lógica y paradojas temporales, Volver al Futuro 3 parte con un grueso hueco de lógica. Marty encuentra al DeLorean enterrado en una vieja mina en 1955 y con él viaja a 1885. En esa época se le rompe… pero…¿dónde está la versión del DeLorean que llevó a Doc Brown al lejano oeste?. Al menos deberían coexistir las dos máquinas del tiempo y, con piezas y combustible de una, podrían reparar a la otra. Bueh, olvidemos ese detalle. El resto es pura rutina, con Marty viendo lo cambiado del pueblo en la época a la que ha llegado, Marty encontrándose con sus parientes de entonces, Marty escapando del antecesor de Biff Tannen, Marty con otra máquina del tiempo rota… Lo bueno es que en esta oportunidad Thomas Wilson es efectivo como villano y como comic relief. Lo otro que agrega Volver al Futuro 3 es un tierno romance entre Christopher Lloyd y Mary Steenburgen, que funciona muy bien y transmite emoción a la platea. Pero el tiempo dedicado al romance le quita algo de brillo a la performance de Michael Fox, que parece resignado a hacer chistes sobre Clint Eastwood (usa ese nombre mientras está en el oeste, y parodia las mismas movidas que hacía Clint en los filmes de Sergio Leone). Incluso el clímax está copiado directamente de Por Un Puñado de Dolares (1964). El resto del final parece algo forzado, en especial la intervención del caracter de Steenburgen a último momento.
Eso no quita que Volver al Futuro 3 no provea un buen rato de entretenimiento. Pero ahora la mayoría de los chistes provocan sonrisas más que risas, ya que es material reciclado por segunda vez consecutiva. Es una despedida ok para un puñado de personajes adorables, pero parte del brillo que tenía se ha perdido en la conclusión, simplemente porque la historia está demasiado atada a repetir siempre los mismos esquemas. Robert Zemeckis haría una gran carrera después de esto y Bob Gale… se dedicaría a reciclar la saga hasta el hartazgo, produciendo una serie de dibujos, videojuegos, y parques de atracciones basados en ella.