Crítica: Mentiras Verdaderas (True Lies) (1994)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

5 atómicos: excelenteRecomendación del EditorUSA, 1994: Arnold Schwarzenegger (Harry Tasker), Jamie Lee Curtis (Helen Tasker), Tom Arnold (Albert Gibson), Bill Paxton (Simon), Tia Carrere (Juno Skinner), Art Malik (Salim Abu Aziz)

Director: James Cameron – Guión: James Cameron, basado en el filme francés La Totale! escrito por Claude Zidi, Simon Michaël & Didier Kaminka

Trama: Harry Tasker: el mas feroz agente de campo del Sector Omega, la superagencia de inteligencia mas secreta de los Estados Unidos. Ahora Harry está tras el rastro de dos bombas atómicas robadas de Rusia, las cuales se encuentran en suelo norteamericano y a punto de ser utilizadas por terroristas. Y, mientras tanto, su atolondrada esposa Helen está convencida de que Harry es un aburrido vendedor de insumos informáticos y que ha dejado de quererla, razón por la cual está a punto de liarse con un bufón que se hace pasar como espía para engañar y seducir a amas de casa decepcionadas con sus matrimonios. Los caminos de los terroristas y del gigoló terminarán por cruzarse de manera inesperada, con lo cual Helen descubrirá que su monótono marido es una especie de superhéroe capaz de matar a un ejército de asesinos con una sola mano. Y mientras la admiración por su esposo crece, las bombas atómicas han entrado en cuenta regresiva y se encuentran a punto de explotar en dos de las mas grandes ciudades de Estados Unidos. Con el tiempo en contra marido y mujer se pondrán las pilas y se transformarán en aventureros que deberán salvar el mundo antes que un genocidio nuclear se desate en suelo norteamericano.

Crítica: Mentiras Verdaderas (True Lies) (1994)

– No battery… Aziz!

Esta es la última gran película de la formidable carrera de Arnold Schwarzenegger. Arnie, héroe de toda mi vida, máquina de hacer millones en la taquilla hollywoodense, metió la pata al producir y protagonizar El Ultimo Gran Héroepelícula entretenida e inteligente si las hay, pero que llegó con mala prensa (como si fuera una afrenta de Arnie al género que le dió de comer) y, como el público no captó el chiste, terminó por convertirse en el primer fracaso de la impecable carrera de Schwarzenegger -, y llamó a su amigote James Cameron para que le ayudara a remontar la cuesta. Y aunque True Lies triunfó en la taquilla, fue demasiado cara como para dejarle grande dividendos a los productores. Arnie caería en una tonelada de secuelas de Terminator, fallidos thrillers y mediocres vehículos de acción y dejaría el cine por unos años para embarcarse en una brillante aunque corta carrera política como gobernador de California. Volvería al cine a los 63 años, con el carisma de siempre pero lejos de ser la estrella taquillera que fue, y embarcándose en una serie de producciones menores o independientes.

Pero acá es el tiro del final para la sociedad de Schwarzenegger & Cameron, tomándole el pelo a la franquicia de James Bond y tirando todo lo que pueden por la ventana. Mentiras Verdaderas (no Mentiras Arriesgadas!, horrendo título puesto en España, cuándo no) se basa en La Totale!, una comedia francesa de acción dirigida por Claude Zidi que no vió la luz fuera del país galo pero que Arnie llegó a ver (y luego a sugerir a Cameron que la remakeara). Lo que le fascinó a Arnie era el combo de comedia, acción y drama familiar, en donde la sorpresa de turno es que la esposa de toda la vida jamás sospechó – en casi veinte años de matrimonio – que su marido era un super espía que vivía las aventuras mas peligrosas y siempre rescataba al mundo a último momento.

Por supuesto, al lado de la remake norteamericana de Cameron La Totale! (por lo que uno ve en los trailers en la IMDB) se ve como un filme minimalista. Arnie está flaco y elegante, y aunque es un terrible actor tiene el rango mínimo suficiente como para burlarse de sí mismo y hacerle un guiño cómplice a la platea. Toda la absurda secuencia inicial – con el tipo saliendo del hielo en traje de buzo, sacándoselo y mostrando un smoking debajo a lo Goldfinger – es un delirio al estilo de los mas salvajes pastiches de los filmes de 007. Pero donde el filme muestra su corazoncito es cuando el indestructible super agente secreto se saca el traje caro, se calza las pantuflas y abraza su rol como esposo y padre de familia… aunque su fachada como vendedor de computadoras sea la menos excitante del mundo.

Si Arnie brilla como siempre en la acción y el humor, también es cierto que tiene una compañía de lujo. Jamie Lee Curtis, comediante suprema si las hay, se relame con su papel de modosita frígida que muta camaleónicamente a stripper comehombres. La secuencia donde ella se saca los volados de su horrible vestido de gala para transformarse en una mujerona ultrasexy que puede aflojar las baldosas del suelo es digna de aplauso. Y sobre todo el desarrollo posterior, en donde la Curtis se entrega al rol sin prejuicios, mostrando mas piel de la que debiera y tomándose el pelo sobre su renacimiento sexual apresurado. Entre la minifalda, los gritos histéricos y las trompadas a Tia Carrere la Curtis se merece un monumento.

True Lies es un filme estúpido y racista – otra vez sopa: árabes terroristas -, pero como entretenimiento es un show de cincuenta quilates. Art Malik hace del sufrido terrorista, mas entusiasta que eficiente, y está Eliza Dushku en uno de sus primeros roles como hija de Arnie (es increible lo que ha mutado esa mujer!). Cameron dirige con nervio y pura originalidad, sea la persecución a caballo por el hotel, la masacre en la isla de los Cayos (con Arnie con la camisa rasgada en una visión que te hace imaginar al austríaco en el rol de El Hombre de Bronce, un proyecto para el cual fue candidato durante años y nunca se concretó), la genial persecución en la autopista isleña y el formidable clímax con el Sea Harrier en la cima de un rascacielos. Es un espectáculo que nunca aburre y, aunque carezca de originalidad, es super recomendado para digerir con un balde gigante de pochoclo calentito y recién caramelizado.