Crítica: El Ataque de los Tomates Asesinos (1978)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 1978: David Miller (Mason Dixon), George Wilson (Jim Richardson), Sharon Taylor (Lois Fairchild), Rock Pearce (Wilbur Finletter), Eric Christmas (Senador Polk), Al Skylar (Ted Swamm)

Director: John De Bello, Guión: John De Bello, Costa Dillon & Steve Peace

Trama: Una serie de extraños asesinatos desconcierta a la policía. Todas las víctimas son encontradas en un charco de jugo de tomate. A medida que los sucesos acontecen, la gente comienza a darse cuenta de que los tomates han cobrado vida y se han transformado en criaturas asesinas que asolan a la humanidad. Tras una reunión con un cuerpo de científicos de élite, el asesor presidencial Jim Richardson es enviado a una agencia de publicidad para que realice una campaña que distraiga a la población. Mientras tanto un equipo de espías es despachado para intentar infiltrarse en el campamento de los tomates y poder hallar la manera de vencerlos. Al mismo tiempo, los tomates han crecido a proporciones gigantescas y han comenzado a asolar las ciudades..

El Ataque de los Tomates Asesinos Este es un pequeño film de culto que ganó gran popularidad con su salida en video en los años 80. John De Bello y sus amigos tuvieron sus quince minutos de gloria, generando 3 secuelas e incluso una serie animada; pero el destino del director y los guionistas fue bastante errático; y después de Killer Tomatoes Eat France! (1991) nunca más se supo de ellos. A lo sumo que hay una remake en carpeta de este film, agendada para el 2009.

Ciertamente El Ataque de los Tomates Asesinos es una parodia a los filmes de la serie B, y especialmente al género de monstruos. La película sigue los clisés del género religiosamente – descubrimiento de la criatura, primeros asesinatos, estudio científico del fenómeno, ataque infructuoso de las fuerzas militares -, con algún otro agregado de Tiburón – además de un homenaje específico, toma la idea del encubrimiento publicitario para tapar el asunto -. La premisa es monumentalmente ridícula, y el acotado presupuesto sólo permite filmar los ataques sin efectos especiales, lanzando tomates comunes y silvestres contra la cámara o los protagonistas, lo cual es muy gracioso durante los cinco minutos iniciales pero después pierde algo de efectividad.

El problema con El Ataque de los Tomates Asesinos es que se trata de lo que los americanos llaman one-joke movie. Toda la película se basa en un solo chiste – ver a la gente espantada con los tomatitos ridículos -, pero precisaba algo más de substancia para hacerla memorable. Tanto el libreto como la dirección tienen problemas de enfoque; una vez que aparecen los tomates, el film comienza a disparar sin cesar gags sobre los personajes secundarios y las situaciones propias de la serie B, pero una inmensa cantidad de chistes resultan demasiado tontos y carecen de timing. El problema es De Bello, que no tiene calle como director de comedias y se nota. Uno ve que el film tiene sus méritos – los actores son bastante buenos como comediantes; algunas de las situaciones cómicas tienen gran potencial -, pero la mayoría de los gags caen por lo chato. A lo sumo la escena del mini cuarto de conferencias y el desopilante comité de políticos ancianos rinde sus frutos, pero la mayor parte del tiempo la historia se desvía un montón de la premisa principal y, para colmo, no hay algún héroe o protagonista principal al cual seguir. Sobre mitad de la película aparece Mason Dixon, pero David Miller es bastante opaco como para llenar la escena.

Para tener una idea, el humor del film es bastante similar al de los uruguayos de Telecataplum (o Hupumorpo, o Comicolor, para los relativamente más jóvenes). Quizás la troupe de D´Angelo, Espalter, Almada & Co halla tomado varios gags del film para reciclarlos. El tema es que la película ha envejecido mal, y la mayoría de los chistes se ven obsoletos y ya conocidos. Admito que la primera vez que vi un film de la serie – Return of the Killer Tomatoes! (1988) – me pareció desopilante, pero viendo ahora el primer film me resultó muy light. La película se ve muy bien, el presupuesto es aceptable, las actuaciones ok, y el libreto bastante bueno, pero le falta una pulida. Aún para el humor tonto que pretende vender, se necesita mayor velocidad para los remates.

Un dato para la trivia: Mars Attacks! (1996) roba completamente el final – la solución para exterminar a las criaturas – de esta película.

El Ataque de los Tomates Asesinos es una película amable y simpática. En su tiempo pudo haber sido un suceso, pero ahora su efecto se ha desvanecido. Precisaba un mejor director para mantener en vereda la comicidad del libreto. Así como está, es un film medianamente divertido que debería haber sido genial.