Crítica: Superman II: The Richard Donner Cut (Superman 2: La Versión de Richard Donner) (2006)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2006: Gene Hackman (Lex Luthor), Christopher Reeve (Clark Kent / Kal-El / Superman), Marlon Brando (Jor-El), Ned Beatty (Otis), Jackie Cooper (Perry White), Sarah Douglas (Ursa), Margot Kidder (Lois Lane), Jack O’Halloran (Non), Valerie Perrine (Eve Teschmacher), Clifton James (Sheriff), E.G. Marshall (Presidente de EE.UU.), Marc McClure (Jimmy Olsen), Terence Stamp (General Zod)

Director: Richard Donner, Guión: David & Leslie Newman & Mario Puzo sobre una historia de Puzo basado en el comic de Joe Shuster & Jerry Siegel, Productores – Alexander & Ilya Salkind, Musica – John Williams (con música adicional de Ken Thorne)

Trama: Superman aborta el intento Lex Luthor de provocar un cataclismo en California mediante la explosión de dos misiles atómicos en la falla de San Andrés. Pero uno de los misiles que el hombre de acero lanza al espacio termina por detonar y liberar a los criminales de Krypton – Ursa, Non y el General Zod – de la prisión espacial en la cual los había encerrado Jor-El. Obteniendo los mismos superpoderes que Superman a través de nuestro Sol, los criminales se dirigen a la Tierra con el propósito de doblegarla bajo sus pies. Mientras, Lois Lane descubre la verdadera identidad de Clark Kent, y Superman decide mostrarle sus secretos llevándola a la Fortaleza de la Soledad. Para poder mantener su relación amorosa, Superman consulta con su padre y éste le obliga a renunciar a sus poderes. Lo que Superman desconoce es que el trío de super criminales ha arrasado con Norteamérica y prácticamente gobiernan al mundo. Regresando al Polo, Kal-El descubre el cristal original que su padre había incluído en la nave que lo trajo a la Tierra, el cual revive la imagen de Jor-El y éste termina por transferirle nuevamente los superpoderes. De regreso a la actividad, Superman descubre que no puede combatir al General Zod y sus secuaces. Pero Lex Luthor (que ha descubierto la fortaleza de la soledad) se alía con los villanos, secuestra a Lois y guía al General Zod al Polo Norte, donde le tenderán la trampa definitiva al hijo favorito de Krypton.

Superman II: The Richard Donner Cut Hay películas que viven en la leyenda. Van mas allá de lo que demuestran en el celuloide, y muchas veces tiene que ver con lo delirante de sus ideas, las enormes complicaciones tras bambalinas, y la fascinante elaboración de proyectos que nunca se concretaron. El caso más famoso es sin dudas el proyecto de Duna de Alejandro Jodorovsky, pero posiblemente el segundo lugar en ese podio sea la versión de Richard Donner de lo que debería haber sido Superman II.

Los problemas del rodaje original son legendarios. Algo hemos comentado en la review de Superman, pero aquí sintetizaremos un poco. Alexander e Ilya Salkind se hicieron con los derechos del personaje en los años 70, y contrataron a Richard Donner para realizar lo que sería un extenso largometraje (de cerca de tres horas) sobre el super héroe. Pero desde el inicio del rodaje hubo ya una gran cantidad de roces entre productores y director, que terminarían por agravarse con el paso de los meses. Mientras los Salkind querían una versión camp similar a la serie Batman de 1966, Donner realizaba un enfoque mucho más maduro del personaje. El director trajo a bordo al guionista Tom Mankiewicz, que le dió una pulida general al libreto para darle más realismo, y donde los rezagos de la idea original de los Salkind quedaron relegados al papel humorístico que en general juega el Lex Luthor de Gene Hackman.

Pero los Salkind no estuvieron contentos con el cambio. Es más; a esta telenovela se suman dos actores más, que son el productor asociado Pierre Spengler y Richard Lester, que actuaba extra oficialmente como un supervisor de la producción. Es con Spengler con quien terminaría por llegar la sangre al río; el francés sería un verdadero cancerbero del rodaje, imponiendo libretos imposibles, criticando a Donner todo el tiempo y metiendo las narices en el trabajo del director. Si bien es cierto que la metodología de Donner no era la óptima – rodaba muy lento, pedía numerosos efectos especiales, y estaba desfasado de presupuesto -, la calidad y taquilla que obtendría el film bien valía la pena. Pero los costos se disparaban a las nubes, y Lester sugirió a los Salkind que partieran el film en dos, con lo cual Superman II terminaría de rodarse con fondos frescos provenientes de la recaudación de la primera parte. Esto no es en sí un problema, pero más tarde la relación entre Salkind y Spengler con Donner sería tan nefasta que terminarían por echarlo del rodaje, a la vez que Lester tomaba las riendas del rodaje de la secuela (lo que Donner termino por tomarlo como una “serruchada de piso” y una traición).

Con lo cual, a la fecha del despido de Donner, había un porcentaje bastante importante filmado de Superman II. Lester lo que hizo es traer a los guionistas originales David y Leslie Newman, quitar numerosos cambios que había incluído Mankiewicz, y dotarlo del humor camp que pedían los Salkind. No todo el rodaje de Donner se perdió – gran parte de lo que vemos en Superman II de Lester ya lo había filmado Donner -; lo que hizo Lester es filmar a destajo utilizando métodos propios de la TV (rodaje con varias cámaras, escaso tiempo de ensayo) y sin demasiado control de calidad del producto terminado. La versión de Lester es satisfactoria, si bien es cierto que una gran cantidad de metraje – en especial, numerosas secuencias con Marlon Brando, que para esa altura ya estaba haciendole juicio por los honorarios adeudados a los Salkind – quedó afuera del corte final. La verdad es que Superman II de Richard Donner estaba terminada en un 70% al momento de su despido. Y de ese porcentaje, al menos la tercera parte quedó en el piso de la sala de edición.

Pasó el tiempo, pasaron los Salkind, llega la versión de Bryan Singer. La Warner, olfateando oportunidades comerciales a raíz de la resucitación de la franquicia – y oyendo el clamor de miles de fans que escribían al estudio – le dió la oportunidad en el 2006 a Richard Donner para que completara su visión de Superman II. Por supuesto era desde el vamos un proyecto destinado sólo para los fans de culto, ya que habían pasado 30 años y Reeve y Brando habían muerto. ¿Cómo reconstruir un film que nunca se había terminado?

Y aún con toda la mejor voluntad del mundo, Superman II: The Richard Donner Cut es un film bizarro. Es un impresionante collage de cosas no siempre compatibles, con grandes agujeros de lógica (ojo, que el film de Lester también las tiene), y donde se pegan partes del film de Lester, rodaje de Donner, efectos CGI actuales, y pruebas de cámara de baja calidad. Vayamos por partes.

El primer cambio obvio es el comienzo. Una de las bombas nucleares que Superman desviara en el film original es el que detona la prisión espacial de los villanos. La toma mezcla CGI actuales que extienden metraje original de Donner. Hasta allí no hay problemas. Donde empiezan las complicaciones es en la secuencia post títulos, donde Lois Lane dibuja sobre una foto de Superman y se da cuenta que Clark es el hombre de Krypton. Decidida a demostrarlo, se tira por el balcón del diario El Planeta, mientras que Kent baja a ultra rvelocidad los pisos y la detiene con su super soplido (la misma idea la recicla Lester en su versión, pero en las cataratas del Niagara).

Esta escena directamente no funciona. Le falta gracia a los diálogos, es demasiado artificial y, en todo caso, era mejor la de Lester.

El siguiente cambio se produce en la secuencia de escape de Luthor, que llega a la Fortaleza de la Soledad, y descubre los hologramas de Jor-El (Marlon Brando). Es una secuencia realmente larga e interesante (he allí el terror de los productores, ya que Brando aparece aquí más tiempo en pantalla que en la Superman original), que si se quiere, es incompatible con el descubrimiento que hacía Kevin Spacey en Superman Returns. El problema aquí pasa porque la escena está inconclusa – no se muestra qué hace después Luthor para regresar, o qué beneficio saca de su hallazgo -.

La escena siguiente, que supone un gran cambio, es la confirmación para Lois que Clark es Superman. Mientras que en el film de Lester lo que sucedía era que Clark recuperaba sus lentes del fuego sin quemaduras, aquí se inserta un largo test screen de Reeve y Kidder. Lois prueba la invulnerabilidad de Clark disparándole balas de salva; pero el largo speech de Christopher Reeve no tiene demasiado sentido – además que combinar dos secuencias muy diferentes, en donde cambia su peinado y las gafas que utiliza -. La idea está bien, la calidad del rodaje es malo.

Y a partir de allí la historia comienza a ir a los saltos. Cuando se mete metraje de Lester, Donner lo re edita, quitándole los “gags” que Lester pone (lo más obvio es en el super enfrentamiento de Zod y secuaces contra Superman: desaparece un hombre volcándose un helado encima, o un chico yendo a mil con su patineta en la escena en que el trío utiliza su super aliento), y metiendo reediciones de la banda sonora a cargo de Ken Thorne, que suelen ser muy repetitivas. En general estas reediciones son mejores que el film original – la secuencia del Niagara siempre me pareció eterna y acá dura unos escasos minutos -. Hay numerosos huecos en la trama por falta de escenas no filmadas, pero hay otras adiciones de muy buena calidad. En especial cuando Brando le da una reprimenda a Reeve y le entrega el remanente de sus poderes, a costa de extinguirse (gran parte de ese metraje es el reutilizado en las secuencias de Brando en Superman Returns).

Donde el film cambia notablemente es en el final. El clímax de Superman I era el que se iba a utilizar en Superman II (o la versión larga) y acá aparece. Superman da marcha atrás el tiempo, con nuevas escenas como cuando Perry White va a lavarse los dientes (y la pasta permanece suspendida en el aire), además de que justifica la pérdida de memoria de Lois. Además, previamente, Superman destruye la Fortaleza de la Soledad a fin de que no sea utilizada con fines maléficos por parte de Luthor… pero el regreso en el tiempo corrige todo eso. En realidad, si bien la escena en sí está bien filmada, no tiene mucha lógica – ¿deshacer todo simplemente para que Lois no recuerde y los villanos no lleguen a la Tierra? -. Y con el enorme parche de que, si Superman nunca perdió sus poderes, y nunca se enfrentó al matón en la cantina, no tiene sentido que Reeve reaparezca en la misma para darle una lección.

En general me gustó, ya que es mas seria que la versión de Lester. Pero es un compendio de buenas escenas y de ideas fascinantes que no tiene una buena continuidad. Es mucho más interesante por lo que podría haber sido el film completado por Donner, que el producto entregado en esta versión especial. Es una lástima que a Donner no le hayan dejado las manos libres en su momento. Esta versión es, a lo sumo, un fascinante vistazo a lo que podría haber sido un film memorable.

SUPERMAN

Algunas de las versiones de Superman comentadas en este portal: Superman (serial de 1948) – Superman contra el Hombre Atomo (serial de 1950) – Superman y los Hombres Topo (1951) – Superman, la Película (1978) – Superman II: El Corte de Richard Donner (2006) – Superman III (1983) – Superman IV: En Busca de la Paz (1987) – Superman Regresa (2006) – El Hombre de Acero (2013) – Batman vs Superman: El Origen de la Justicia (2016) – La Liga de la Justicia (2017). A su vez Ilya y Alexander Salkind (productores del filme de 1978) desarrollarían la versión para la pantalla grande de Supergirl (1984). Supergirl (2015) es el piloto de una inminente serie de TV. La Muerte de Superman Lives: Qué Ocurrió? (2015) es un documental que analiza el fallido proyecto de filme que iba a ser dirigido por Tim Burton. Superman & Lois (2021) es una serie del ArrowVerse que analiza al Hombre de Acero casado, con hijos y viviendo de nuevo en Smallville. Zack Snyder’s Justice League (2021) es el corte del director de la versión 2017 de La Liga de la Justicia.