Crítica: Ssssilbido de Muerte (Sssssss) (1973)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 1973: Strother Martin (Dr Carl Stoner), Dirk Benedict (David Blake), Heather Menzies (Kristina Stoner), Richard B. Shull (Dr Kenneth Daniels), Jack Ging (Sheriff Dale Hartison), Reb Brown (Steve Randall), Tim O’Connor (Logan)

Director: Bernard L. Kowalski, Guión: Hal Dresner

Trama: El Dr. Carl Stoner es un eminente científico especializado en ofidios. Para Stoner, las criaturas más perfectas de la naturaleza son las serpientes y está convencido que ellas heredarán la Tierra cuando la raza humana perezca bajo el peso de las guerras futuras. Es por ello que ha contratado a David Blake – un tímido estudiante universitario -, para que lo ayude con su laboratorio. Pero, en secreto, Stoner ha estado inoculando a Blake con un suero experimental que le está produciendo lentos cambios genéticos al muchacho … los que lo están convirtiendo en una serpiente mutante de manera irreversible.

Ssssilbido de Muerte En los setenta estaba de moda el subgénero Venganza de la Naturaleza, el que había empezado con la versión original de Willard (1973) y que alcanzaría su punto más alto con Tiburón (1975). Pero, antes de contratar a Spielberg y mandarlo a filmar escualos en la mitad del océano, los productores de JawsDavid Brown y Richard D. Zanuck – se despacharon con el filme que nos ocupa, el que funciona como una especie de prueba piloto destinada a tantear la recepción y rentabilidad de este tipo de películas.

Pero, si bien las serpientes abundan, Sssssss (o Ssssilbido de Muerte, en español) es más un filme de científicos locos que una cinta de animales asesinos. Aquí Strother Martin tiene una visión mesiánica del futuro y decide elaborar un suero para convertir a las personas en serpientes, las que sobrevivirían el inminente fin del mundo según su modesta opinión. Si uno analiza en detalle, toda la estructura del filme es practicamente idéntica a Las Mutaciones (1974): un científico loco que pretende crear una raza híbrida de seres humanos, un estudiante que hace de conejillo de indias, un circo local que sirve para esconder los experimentos fallidos. Son tantos los puntos en común que la primera palabra que se me viene a la mente es plagio.

Por suerte Sssssss es superior a Las Mutaciones. El punto fuerte del filme es el personaje de Strother Martin, que resulta fascinante durante la primera hora de proyección. Este no es un ridículo científico loco, sino un genio convencido de una idea equivocada. Sus parlamentos están empapados de datos científicos, develando aspectos secretos y fascinantes del mundo de las serpientes, y filosofando sobre el simbolismo de los ofidios en la mitología y la religión a lo largo de toda la historia (es como la versión malvada del cientifico de Them!, La Humanidad en Peligro: un erudito cinematográficamente muy creíble). No sólo sus diálogos son notables e inteligentes sino que la performance de Martin es sólida y sutil, algo inusual para un actor condenado a hacer villanos despreciables y prepotentes a lo largo de toda su carrera. En todo caso el rol de Martin no es el de un demente o un malvado, sino que se trata de un amoral obsesionado con las serpientes y convencido que debe probar sus teorías a cualquier precio.

El otro punto fuerte de la película son las mismas serpientes, que son reales y que los actores debieron a aprender a manejar durante el rodaje, dándole credibilidad y efectividad a la cinta. La primera hora es sólida, con una buena construcción de personajes y situaciones. Lamentablemente Sssssss empieza a flaquear a medida que se acerca al final. Primero, porque se despacha con el típico cliché del matón universitario (Reb Brown, antes de probar suerte en los pilotos televisivos de El Capitán América), el que molesta a la hija del científico y que no demora demasiado en pasar al estado de fiambre en cuestión de minutos. La única utilidad de dicha escena es probar que Strother Martin es malo y que le importan más las serpientes que los humanos, amén de inaugurar el score de cadáveres de la película. Segundo, porque el climax resulta bastante pobre. Uno esperaba que apareciera una espeluznante criatura mutante y no una simple viborita. Al menos la secuencia del sótano (en donde el insufrible Richard B. Shull es devorado vivo por una boa) resulta más inquietante y efectiva que el final del filme.

Sssssss es una buena película. Es cierto que sobre el final pierde el hilo y se alterna entre lo rutinario y lo ridículo, pero la primera hora es muy buena y compensa las fallas del climax.