Crítica: Riverdale (2016)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

3 atómicos: buenaUSA, 2016: K.J. Apa (Archie Andrews), Lili Reinhart (Betty Cooper), Camila Mendes (Veronica Lodge), Cole Sprouse (Jughead Jones), Casey Cott (Kevin Keller)

Director: Lee Toland Krieger – Guión: Roberto Aguirre-Sacasa, basado en la historieta publicada por Archie Comics

Trama: Cuando el cadáver de Jason Blossom aparece con un disparo en la frente, todo el pueblo de Riverdale se conmociona. Pero Blossom pertenecía a una familia adinerada – poseedor de un apellido odiado por muchos debido a rencores ancestrales que se remontan a los orígenes de Riverdale – y los sospechosos se multiplican. Entran en acción Jughead Jones y Betty Cooper – hermana de la novia de Blossom -, quienes comienzan a investigar, y descubren una trama plagada de mentiras y traiciones, con padres monstruosos y adolescentes dispuestos a fugarse de sus casas en el mayor de los anonimatos. Y en el centro de todo queda el mejor amigo de ellos, Archie Andrews, el cual posee un parecido escalofriante con el muerto. Pronto la pandilla – junto a la recién llegada, Verónica Lodge – comenzarán a descubrir una oscura trama relacionada con la muerte de Jason… pero no sin antes despertar rencores y sospechas en un pueblo desbordante de intrigas y secretos que no desean ser develados.

Arlequin: Critica: Riverdale (2016)

Era inevitable que, después de la formidable impresión que me diera Chilling Adventures of Sabrina, me fuera a visitar la versión moderna de Archie, la cual se encuentra disponible en la serie Riverdale (2016 – ).

Yo soy uruguayo y, a diferencia de Argentina, en Uruguay llegaban en cantidad historietas extranjeras, en especial las versiones latinas de Editorial Novaro de Superman, Batman, otros personajes de DC Comics, Las Urracas Parlanchinas, La Pequeña Lulú y una parva de otros personajes clásicos. Yo leía salteado – los comics de superhéroes me parecían demasiado breves y tendía a leer historietas cómicas, en especial las españolas como Mortadelo y Filemon, Zipi y Zape, y la versión en español de MAD -, pero me acuerdo de haber seguido con cierta frecuencia a Archie. En sí, Archie era una tira de humor con un grupo de adolescentes metiendo la pata y tirándose onda el uno con el otro. Lo que mas recuerdo era Torombolo (Jughead), que era el mejor amigo de Archie y era el comic relief de la historieta. Hablo de la versión vintage de Archie, la que leía antes de 1980.

Si bien es cierto que la necesidad tiene cara de hereje, resulta chocante que un comic tan bonachón e inofensivo como Archie lo hayan transformado en una versión dark y policial de Dawson Creek. Si bien es cierto que uno precisa tener la mente abierta en haras del espectáculo – a la espera de llevarse una sorpresa con una versión renovadora, alternativa e inspirada -, Riverdale es un engendro que termina por fastidiarte en el peor de los sentidos. Si sos fanático de Archie, la serie es una herejía, y si lo ves sin asociar con el comic, te fastidia por el tono hiper melodramático y lo horrendo que son estos personajes. El gran drama es Archie, que ahora es un egoísta de primera y un mujeriego amoral, el cual no merecería el protagónico porque carece de alguna cualidad que lo redima, a excepción del físico y la apariencia de modelo (al menos Sabrina es admirable porque es fiel a sí misma y desborda de personalidad). Betty parece una esquizofrénica con lado oscuro, que mas que enamorada parece una stalker obsesionada morbosamente con el pelirrojo, y por lejos el peor papel le corresponde a la mitad de los padres de estos personajes, dementes manipuladores / estafadores / mentirosos / amorales y torturadores seriales que actúan en contra de cualquier lógica. La madre de Betty (Madchen Amick) se lleva las palmas con el delirio ya que va del desenfreno total al derrumbe emocional y al modo ultra perra al 150% en menos de 10 segundos.

Los padres están perfilados de manera espantosa, como monstruos o incompetentes (el papá de Archie, interpretado por Luke Perry, no es mucho mas eficiente ni menos interesado que el resto en tener su propio plan y obtener una tajada, solo que es menos agresivo y obvio), como si fuera un filme de John Hughes con una sobredosis de cafeína. Si la serie se deja ver es porque algunos personajes se salvan de la quema como Josie y las Pussycats (ahora devenidas en un trío de morenas, y con sus propios dramas), esa fuerza de la naturaleza que es Verónica Lodge (Camila Mendes), una especie de hija de los Madoff venida a menos y una morocha picante que se alza en armas al instante, y Jughead Jones (Cole Sprouse), convertido en investigador privado amateur que es super inquieto y no deja baldosa sin levantar con tal de hallar la verdad sobre el misterio de turno. Pero el grueso del resto bordea lo intragable – la insufrible niña rica pelirroja, los padres de ésta (enemistados a muerte con los padres de Betty), el papá de Jughead devenido pandillero, etc -, llevándose las palmas Archie, al cual no le importa arruinar una vida tras otra de todas las chicas y mujeres con las cuales se encama.

Creí que Riverdale era otra cosa, que había un personaje fuerte y decente en el protagónico. Lo único que uno encuentra son clichés y monstruos sobredimensionados, y un montón de gente que actúa sin la mas mínima lógica. Me aturdió hasta el punto de abandonar la serie antes del capítulo 10, porque si bien el misterio va ok, los personajes se vuelven intragables hasta el punto de alejarte de la serie para no querer regresar nunca más.

ARCHIE COMICS

Riverdale (serie, 2016 -), El Mundo Oculto de Sabrina (serie, 2018 -)