Crítica: Mi Nombre es Bruce (My Name is Bruce) (2007)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2007: Bruce Campbell (como el mismo), Grace Thorsen (Kelly Graham), Taylor Sharpe (Jeff), Ted Raimi (Mills Toddner / Wing), Ben L. McCain (alcalde), Ellen Sandweiss (Cheryl)

Director: Bruce Campbell, Guión: Mark Verheiden

Trama: Bruce Campbell está desencantado de su carrera y se apresta a despedir a su agente Mills Toddner. Pero Toddner le dice que tiene reservada una gran sorpresa. Al regresar a su casa rodante, Campbell es secuestrado y llevado al pueblito de Gold Lick. La gente del pueblo lo recibe como un héroe, ya que creen que él es el único que puede derrotar al Guan Di, un demonio chino que han liberado por error en una mina. Pero Campbell está convencido que se trata de la sorpresa preparada por su agente, y se toma todo en broma… hasta que se enfrenta a Guan Di.

My Name is Bruce A quien le guste la serie B, difícilmente se le escape el nombre de Bruce Campbell. Campbell comenzó junto con Robert Tappert y Sam Raimi, quienes saltaron al estrellato con Evil Dead y obtendrían una enorme popularidad con el resto de la trilogía (Evil Dead II y Army of Darkness). Mientras que Raimi y Tappert – director y productor – llegaron a las ligas mayores, Campbell decidió quedarse en la serie B, adquiriendo fama de ícono y héroe del género. Es ciertamente una fama algo inflada – si bien Campbell ha trabajado en decenas de filmes clase B, los papeles más populares han sido sus participaciones en producciones de Raimi y Tappert, como las series Xena y Hercules, los cameos en Spiderman, o el protagónico de la serie Jack of all Trades (2000 – 2001), aparte de algún trabajo como Bubba Ho-Tep – y potenciada por el mismo Campbell. Ahora, con el aval de Dark Horse – la editoria de comics para adultos que incluso llevó a la historieta las aventuras de Ash, el héroe que protagonizaba Campbell en la saga Evil Dead -, el actor decide lanzarse en esta comedia autoreferencial, destinada exclusivamente para los fans.

Pero Mi Nombre es Bruce es un film decepcionante. Es una película a la que me hubiera gustado recomendar de todo corazón, ya que Campbell es un tipo que me cae muy en gracia. De antemano esperaba algo hecho con calidad, al estilo de Las Desventuras de Adam y Burt: Regreso a la Baticueva; pero la factura técnica y el guión son flojísimos y muy indulgentes.

La premisa hace agua la boca: Campbell hace de sí mismo, y es tomado como un héroe real que debe enfrentar a un monstruo real en un pueblito perdido en Norteamérica. Hay muchos chistes internos – sobre la carrera de Campbell, el cameo de Ellen Sandweiss (protagonista de la Evil Dead original) como la ex esposa, Ted Raimi haciendo nuevamente de comic relief – que lamentablemente erran la puntería por miles de kilómetros. El film mejora un poco cuando Campbell llega al pueblito, donde entra en Ash a modo full… hasta que se da cuenta que no es una broma. Pero algunos momentos graciosos de Bruce Campbell como actor no compensan el desastre que es Bruce Campbell como director. Hay montones de momentos muertos; hay chistes reciclados y dichos sin gracia; el resto de los actores son unos troncos, y los ataques de Guan Di no tienen demasiado nervio. Campbell no es Sam Raimi y se nota; y algunos gags son realmente burdos, como el baile con Grace Thorsen en la cantina.

La película funciona un poco mejor cuando Campbell dispara algunas ocurrencias desubicadas, pero el resto del film es muy tibio. Como curiosidad vale la pena verla, pero creo que el film hubiera funcionado mucho mejor con otro director. Así como está, tiene muchos problemas de timing cómico y libreto – Mark Verheiden tendrá talento para escribir capítulos de Galactica y Smallville; y si bien le pertenece el guión de La Mascara, aquí demuestra que no sirve para hacer comedias -. El film funcionó bastante bien de acuerdo a las expectativas, y estarían planeando una segunda parte. Espero que entonces se corrijan todos los problemas, el director sea otro, y nos den el film que Bruce Campbell realmente estaba mereciendo.