Crítica: Monster Trucks (2016)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2016: Lucas Till (Tripp), Jane Levy (Meredith), Thomas Lennon (Jim Dowd), Barry Pepper (Sheriff Rick), Rob Lowe (Reece Tenneson), Holt McCallany (Burke)

Director: Chris Wedge, Guión: Derek Connolly

Trama: Tripp es un chico rebelde que sobrevive trabajando en un desarmadero de autos. La granja de su madre no da dinero y todos los campos a su alrededor han sido rentados por Terravex Oil, una petrolera ávida de descubrir nuevos pozos de oro negro. Ansioso por tener su propia camioneta, Tripp ha creado el esqueleto de una con partes halladas en el desarmadero. Pero un día se topa con una criatura gigante y llena de tentáculos, la cual pronto demuestra ser inteligente y simpática. Descubriendo que a la criatura le gusta rodar sobre uno de los carros que tiene en el depósito, a Tripp no se le ocurre mejor idea que adaptar el chasis de su camioneta para que el animal se instale adentro y empuje las ruedas de la misma como si fuera un patín. Con la ayuda de Meredith, una interna del colegio a donde va y que se especializa en biología, descubre que el animal procede del último pozo que ha excavado Terravex en las cercanías… pero no es la única que ha salido del agujero. Hay otros dos seres mas viejos – y presumiblemente los padres de la criatura de Tripp – que están encerrados en los laboratorios de Terravex, y que están a punto de ser exterminados por la petrolera ya que, si encuentran una nueva forma de vida o un ecosistema, la ley les impide seguir taladrando para extraer el crudo. Es por ello que Tripp, Meredith y un empleado de Terravexque odia la idea de sacrificar las criaturas – se unen para rescatar a los bichos y regresarlos a su habitat. El problema es que Terravex ha contratado mercenarios para mantener la seguridad de la operación. Y enorme será el reto no sólo de mover las criaturas sino de llevarlas a destino sin que los matones de Terravex los asesinen en el trayecto.

Critica: Monster Trucks

    Monster Trucks (2016) Hay peliculas malas detestables y películas malas que tienen su gracia. Es difícil pegarle a Monster Trucks ya que su propósito no es ser coherente sino ser entretenida. La produce Nickelodeon y, aunque gastaron una ponchada (125 millones de dólares), la gente del estudio quiso esconderla bajo el tapete porque veian a la legua que no iba a ser taquillera. Los números no mintieron: Monster Trucks se hundió en la taquilla simplemente porque es una pelicula familiar simplona, algo tonta y obscenamente sobreproducida. Hubieran gastado algo menos y les hubiera quedado unas monedas para el cambio.

El argumento es simple y remanido: encuentran una criatura, la protegen de los que quieren cazarla, la regresan a su habitat. Desde E.T. hasta ahora las películas con aliens / monstruitos graciosos no han seguido otro derrotero. Quizás la gansada de todo esto es que, una vez que encuentran al bicho – el que parece un pulpo con cara de tiburoncito simpático -, el protagonista decide utilizar sus dones y ponerlo en la camioneta sin motor que tanto ansía reparar. Como el monstruo es como un nene de 10 años, piensa que la camioneta es una patineta; como el flaco quiere andar motorizado, inventa un complicado mecanismo para manejarla (le tapa la visión al monstruo cuando quiere frenar, la levanta un metro del piso para que el bicho no arrastre la panza contra la carretera, pone un surtidor que le tira aceite – su alimento favorito – a la boca de la criatura cuando quiere acelerar), y después anda pavoneándose por ahi. En serio. En vez de entablar una relación con el bicho, de ver su bienestar y hacer justicia, lo único que quiere es tener un camión monstruo en el sentido literal de la palabra. Es por eso – y todo lo que sigue – que los críticos la tildaron de pavada monumental.

Pero obvien eso y verá que Monster Trucks es una pelicula re-divertida. Hay un elenco nutrido de caras conocidas, y todos tienen sus cinco minutos de gracia. Lucas Till, siempre con cara de amargo, está ok y hasta la irritante Jane Levy destila simpatía. Hay muchas persecuciones disparatadas, momentos adorables con el monstruo y hasta una reconciliación del flaco con su padrastro. ¿Qué mas se puede pedir?.

Monster Trucks es una película amable. Olvidense de la coherencia de las cosas, aquí no existe. Lo que importa es el ritmo, las gracias, los chistes y la acción y en ese sentido – para ser una pelicula para toda la familia – le doy el visto bueno y punto.