Crítica: King Kong (1976)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

2 atómicos: regularUSA, 1976: Jeff Bridges (Jack Prescott), Jessica Lange (Dwan), Charles Grodin (Fred Wilson), Rene Auberjonois (Bagley), John Randolph (Capitán Ross)

Director: John Guillermin – Guión: Lorenzo Semple Jr., basado en el filme de 1933

Trama: Los años 70’s han sumido al mundo en una profunda crisis de energía debido a los elevados precios del petróleo. Fred Wilson, ingeniero de la corporación Petrox, parece haber descubierto una isla remota e ignorada por el mundo, la cual sería un manantial del petróleo mas puro que existe. Comandando una misión hacia dicha isla – cubierta siempre por un banco de niebla, razón por la cual ha sido ignorada por navegantes y geógrafos -, llegará hasta sus costas en compañía del profesor de historia Jack Prescott y Dwan, una joven a la cual han recogido en el camino debido a haber naufragado el yate donde viajaba. Pero al llegar descubren que los nativos viven encerrados bajo murallas gigantescas hechas de madera y lianas, temerosos del dios que habita la isla. Y cuando Dwan sea raptada por los mismos para ofrecerla en sacrificio ritual, Prescott y Wilson comprenderán que las leyendas locales no es mero misticisimo pagano sin fundamento sino la veneración justificada hacia el poderoso simio gigante que regentea la isla y al que todos llaman el Rey Kong. Viendo una oportunidad comercial en la captura del simio gigante, Wilson armará un gigantesco operativo para capturarlo y mostrarlo en las ciudades norteamericanas como una atracción única en el mundo. Pero Kong se ha obsesionado con Dwan y, cuando sea presentado en público – apresado entre cadenas y rejas gigantes -, el único pensamiento del simio será raptar a la chica rubia para poder escapar de la civilización y regresar a su habitat natural. Pero, con el sendero de destrucción provocado por el escape de la criatura, la única opción posible es emboscarlo y matarlo… una tragedia que Prescott intentará evitar a toda costa ya que Kong es el último de su especie y ahora el hombre intenta sellar su destino bajo una lluvia de sangre y fuego.

Crítica: King Kong (1976)

Lorenzo Semple Jr., reconocido agresor serial al buen gusto, dixit en 1976: “La película vieja de King Kong es muy básica. Es un serie B filmado en un backlot, bastante crudo y nada excepcional. Ahora vamos a hacer algo superior. Porque las audiencias de ahora son mas sofisticadas, vamos a hacer algo muy sofisticado”.

y luego de decir eso…

Dwan (a Kong, que la tiene en su mano):¡Tú, maldito mono enorme chauvinista!. ¿Qué estás esperando para comerme?. ¡Adelante!. ¡Cómeme!. ¡Hazlo!. ¡Cómeme y atragántate!”

King Kong versión 1976 es atroz. El problema de base es su productor, Dino De Laurentiis, un tipo recargado de plata y mal gusto. El tipo le pagaba en exceso a malos libretistas y terribles especialistas de efectos especiales creyendo que, porque le cobraban una fortuna, eran los mejores. Trajo al rey del camp, Lorenzo Semple Jr – el Akiva Goldsman de los años 70: por cada acierto como Papillón o Los Tres Días del Cóndor, el tipo se despachaba con un Flash Gordon o La Espía que Cayó del Cielo, amén de ser el co creador de la serie de Batman de 1966 – y le dió la tarea titánica de aggiornar un clásico que requería sensibilidad artística y gran gusto. Y lo que Semple Jr. terminó dando a luz es un engendro que te hace rechinar los dientes cada vez que un personaje abre la boca. No todos son particulares ofensores de los sentidos… excepto Jessica Lange en su rol debut en el cine. La Lange actúa como pasada de Valium, es una mezcla de rubia cabeza hueca y actriz de método la cual hace silencios inesperados donde no debe, pone los ojos duros como bolas de vidrio… y se despacha con bolazos de una banalidad desquiciante. El cómo un jovencísimo Jeff Bridges (o el mismo Kong) le ven algún atractivo es inexplicable. Amputen las escenas de la Lange del filme y verán que King Kong 1976 levanta su puntería. Claro, se precisa una mina para el sacrificio y para que la bestia se enamore de la bella y termine en el cadalso. ¿Pero acaso Jeff Bridges no podría ocupar el mismo rol con mayor credibilidad?.

Si lo de la Lange es desesperante, al menos el villano patético de Charles Grodin (rol inusual para un actor cómico de su talla) zafa. Jeff Bridges es un profesor / guerrero ecológico pedante que se cola en el barco y al cual no lo tiran al mar porque el libreto no quiere. Los defectos especiales son discutibles – al menos las gigantescas manos mecánicas de Kong se ven increíbles… lastima que Rick Baker en traje de mono es simplemente un tipo disfrazado; ni siquiera hace el mas mínimo esfuerzo de portarse como un simio o de caminar en cuatro patas (no existía artistas de la talla de Terry Notary o Andy Serkis en esa época) -, y hay alguna que otra escena potable en medio de tanta mediocridad. Lo que digo es que King Kong 1976, con un poquito mas de esfuerzo y algo de pulido, hubiera zafado como aventura de matineé; pero es Semple Jr, intentándose hacerse el banana con los diálogos y las situaciones, quien termina metiendo el pie en el pastel. Bridges podría haber sido un miembro de la tripulación mas en vez de un colado; la Lange podría haber sido una especialista o una fotógrafa en vez de una náufraga hueca aspirante a actriz que iba en un yate en medio de la nada y que explotó de casualidad. La ausencia de tristeza, dolor o cualquier otro sentimiento natural humano de la Lange al enterarse que sus compañeros del yate murieron quemados o ahogados es simplemente crispante. Y no hay ni una sola ocasión en todo el filme en donde la Lange se comporte con la mas mínima lógica y naturalidad. ¿Problema de la actriz?. Nop, problema del libreto que es incapaz de dibujar a una mujer en semejante situación con la mas mínima coherencia o viso de realismo.

Si la gente ha bombardeado a tomatazos la versión 1976 de King Kong, es con justa razón. Basta con ver el original de 1933 o la espléndida remake de Peter Jackson del 2005 para ver el desperdicio del concepto que hace la puesta en escena de John Guillermin y Lorenzo Semple Jr.. Ya no se trata de efectos especiales mediocres sino de terribles mecanismos dramáticos y pésimos personajes; y en el medio de todo ese caos la idea espléndida del monstruo conmovido por la doncella se diluye entre tanta bobada y gesto fútil, donde el efectismo sustituye a la sutileza y la sensibilidad que hicieron tan enorme al filme original.

KING KONG

Las versiones de King Kong son: King Kong (1933), la producción de Dino de Laurentiis King Kong (1976) y su secuela King Kong Vive! (1986), y la remake de Peter Jackson King Kong (2005). Además están los filmes de la Toho basados en el personaje: King Kong vs Godzilla (1962) y King Kong Escapa (1967). En el 2017 Legendary resucitaría el simio gigante para su inminente Monsterverse en Kong: La Isla Calavera (2017). Godzilla vs Kong (2021) es el enfrentamiento de los dos gigantes en el final del Monsterverse.