Crítica: Harry Potter y el Cáliz de Fuego (2005)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2005: Daniel Radcliffe (Harry Potter), Rupert Grint (Ron Weasley), Emma Watson (Hermione Granger), Brendan Gleeson (Profesor Alasdor Moody), Michael Gambon (Profesor Albus Dumbledore), Robbie Coltrane (Rubeus Hagrid), Ralph Fiennes (Lord Voldemort), Robert Pattinson (Cedric Diggory),

Director: Mike Newell, Guión: Steve Kloves, basado en la novela homónima de J.K. Rowling

Trama: En Hogwarts se celebra el Torneo de los Tres Magos, en donde se elegirán los participantes mayores de 18 años de entre tres escuelas de magia. Los postulantes ingresan su inscripción en el mágico Cáliz de Fuego, quien es el que decidirá los finalistas. Pero tras el anuncio, el cáliz lanza un cuarto elegido que resulta ser Harry Potter. El mundo de la magia se escandaliza, ya que Potter ni siquiera se había inscripto, y todo parece indicar que se trata de una maniobra conspirativa por parte de los secuaces del siniestro Lord Voldemort. Pero Dumbledore, el director de Hogwarts, decide dejar que Harry siga adelante para poder descubrir a los conspiradores sobre la marcha … aunque los riesgos del certamen de magia son tan elevados que pueden costarle la vida a Potter.

Harry Potter y el Caliz de Fuego Esta es la cuarta entrega de la saga basada en el personaje de Harry Potter, el niño mago creado por la autora inglesa J.K. Rowling. A decir verdad, las aventuras de Harry Potter nunca me parecieron excepcionales, ya que siempre las he encontrado blandas y llena de artilugios argumentales de última hora – léase Deus Ex Machina a raudales-, amén de que como héroe deja mucho que desear. Pero gracias a la partida del sillón del director del auteur Chris Columbus, la saga ha ido ganando en atmósfera, especialmente a partir de la muy buena Harry Potter y el Prisionero de Azkaban. Y ahora Alfonso Cuarón le deja el puesto a Mike Newell – cuya especialidad son las comedias románticas como su ultrahit Cuatro Bodas y Un Funeral (1994) -. La buena nueva es que Newell, sin ser tan oscuro como Cuarón, consigue superar la media en otro título de la serie.

Los defectos antemencionados de la saga vuelven a repetirse aquí. Como héroe, Harry Potter es realmente anodino y simplemente es un portador del título, pero no hace nada brillante ni valiente para ganárselo – con la excepción del combate contra el dragón … que gana no por magia sino por su habilidad con la escoba voladora -. Después el resto siempre le viene de arriba. Además la serie empieza a correr el riesgo de repetirse, ya que la aparición de cada profesor nuevo viene aparejado con una serie de sospechas – descubran el nuevo actor del elenco y ya sabrán quién es el villano -. Y como es costumbre, la historia se va por las ramas con las anécdotas cotidianas de Hogwarts – como el episodio con la bestia mitológica en el bosque -. Lo que empieza a desarrollar Harry Potter y el Cáliz de Fuego son algunos elementos mitológicos de la saga, que en otras entregas iremos viendo cómo se encadenan – la secta de los Mortífagos, los seguidores de Voldemort; la noticia de que Severus Snape es un ex mortífago aministiado y que trabajó como doble agente -. Este último dato es fundamental para entender Harry Potter y el Misterio del Príncipe Mestizo, pero queda sepultado bajo una tonelada de información banal de la rutina diaria de Potter y sus amigos.

Pero si Cuarón trajo a luz a los Dementores – los ángeles negros guardianes de Azkaban – en el anterior filme, al menos Newell se despacha con la corporización de Lord Voldemort, que la concreta con gran estilo y suficiente amenaza. Simplemente el clímax es escalofriante – la conversión del feto en un demonio con la cara a medio terminar -, pero es breve y se corta de manera abrupta. Es el problema habitual con los textos de Rowling – cuando amenaza llegar a más, saca un conejo de la galera, esconde los ases en la manga y estira la serie para seguir comprándole libros a la autora -. Nada impedía de que el duelo entre Harry y Voldemort fuera definitivo, excepto la ambición de seguir recaudando más.

El clima oscuro y de amenaza se agradece; la aventura es entretenida y tiene sus momentos. Brendan Gleeson se deleita con su personaje, al igual que Ralph Fiennes. Pero el trío central de adolescentes no es muy ilustre que digamos, y no pasa por sus performances sino por la manipulación que hace la autora de sus papeles. Es algo que escapa a las actores e incluso al guión; a esta altura la comunidad de lectores de Harry Potter es tan extensa y fanática que es imposible alterar el original sin que venga la lapidación por sacrilegio. Pero el perfil del trío central no deja de ser decorativo, recolectando piezas de información sin ninguna iniciativa propia; y Harry Potter es el elegido más insulso de cualquier profecía que haya poblado las pantallas del cine.

HARRY POTTER

Las películas basadas en la saga de Harry Potter de J.K. Rowling son: Harry Potter y la Piedra Filosofal (2001), Harry Potter y la Cámara Secreta (2002), Harry Potter y el Prisionero de Azkaban (2004), Harry Potter y el Cáliz de Fuego (2005), Harry Potter y la Orden del Fénix (2007), Harry Potter y el Misterio del Principe Mestizo (2009), Harry Potter y las Reliquias de la Muerte (Parte 1) (2010) y Harry Potter y las Reliquias de la Muerte (Parte 2) (2011)
Spin offs ambientados en el universo mágico de Harry Potter: Animales Fantásticos y Dónde Encontrarlos (2016) – Animales Fantásticos: los Crímenes de Grindelwald (2018)