Crítica: Gamera: Destroy All Planets (Gamera vs Viras) (1968)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

Japon, 1968: Toru Takatsuka (Masao Nakaya), Carl Craig (Jim Crane), Peter Williams (Dr. Dobie), Carl Clay (Carl Crane), Michiko Yaegaki (chica Scout), Mari Atsumi (Junko Aoki)

Director: Noriaki Yuasa , Guión: Nisan Takahashi, Musica – Kenjiro Hirose

Trama: Masao y Jim son dos niños que se encuentran pasando el verano en el campamento scout. Los chicos tienen la oportunidad de asistir a la demostración de un submarino de bolsillo, e incluso de pilotearlo. En la inmersión se topan con Gamera, la tortuga gigante mutante. Pero una nave de la raza Viran se encuentra en el lugar, y planea dominar la Tierra. Como otra misión enviada previamente por los Viran ha fracasado por la intervención de Gamera, los alienígenas entienden que para concretar sus objetivos deben dominar al monstruo. Repasando la historia de la criatura, descubren que Gamera tiene un particular sentimiento protector por los niños. Así que los Viran raptan a Masao y Jim, mientras le colocan un dispositivo de control mental a Gamera y la obligan a realizar numerosos ataques a la población de Japón para someter a los terrícolas. Pero Masao es un pequeño genio, e intentará por todos los medios sabotear la nave alienígena para liberar a Gamera y que ésta pueda destruir a los Viran.

Gamera: Destroy All Planets Este es el cuarto film de la saga iniciada en 1965 con Gamera el Invencible. Gamera es un flagrante intento de los estudios Daiei por aprovechar el furor del Kaiju Eiga (cine japonés de monstruos) que había descubierto la Toho y estaba explotando con la saga de Godzilla. Comercialmente hablando, lo que ha hecho la Daiei es una movida inteligente; ha posicionado su producto, diferenciándose del original y apuntando a otro mercado. Mientras que Godzilla estaba perfilado al público adolescente, Gamera iba destinado a la audiencia infantil.

Bastante se ha hablado de la pobreza de contenidos de la saga de la tortuga mutante, especialmente en el período que comprende entre 1965 y 1971. No estoy seguro de que fuera tan así; Godzilla, para la misma época, producía algunos de sus peores episodios. Uno puede llegar a la conclusión de que los filmes de Gamera son ligeramente superiores (diría que por un pelo) en el aspecto técnico que la criatura de la Toho, pero creativamente son mucho más limitados. Mientras que Godzilla enfrentaba a bizarras criaturas, entablaba multitudinarios matches de wrestling con monstruos alucinantes y se enfrentaba a alienígenas de todo tipo y color, la Daiei comenzaba a tener serios problemas financieros que terminarían con su quiebra a principios de los años 70. Eso explica que, tras un arranque a toda orquesta, el estudio comenzaría a depredar a toda máquina a su producto estrella con tal de obtener unos yenes y pagar el alquiler. Por ejemplo, en Gamera: Destroy All Planets, al menos un tercio del film se basa en la reedición de escenas de anteriores películas. Pero ese es un pecado que también ha sido cometido en la saga de Godzilla.

Lo que demuestra Gamera: Destroy All Planets es que para esa altura los presupuestos de la Daiei eran una lágrima. Toda la acción se circunscribe a una playa, algún rodaje de FX nuevo y mucho reciclaje de aventuras pasadas de la tortuga mutante. Es también la prueba viviente de lo que ha terminado por transformarse la serie, con un par de niños como portagonistas absolutos. Es injusto arremeter todas las tintas contra ese planteo, ya que la Toho también se ha despachado con personajes cómicos (y atroces para la credibilidad de la aventura) en los filmes de género de la época. Para ser un film infantil, Gamera: Destroy All Planets está bastante bien. Tiene sus diálogos ridículos, sus momentos bizarros, y hay un montón de relleno. Pero para un niño, el que Jim y Masao sean pequeños genios, comanden un submarino, o terminen por derrotar a los alienigenas, es una aventura notable.

Para valorar el film, depende de si usted ha visto las aventuras previas de Gamera o no. Yo no he podido hacerlo, por lo cual la media hora de relleno – que es cuando los Virans estudian el comportamiento de Gamera, revisando sus combates anteriores – me pareció interesante. Los alienígenas son unos torpes de aquellos, pero terminan por salirse con la suya. Si usted está de humor y pone el cerebro en off, puede disfrutar la película, e incluso sacarle el cuero al patetismo de algunas de las escenas con los chicos dentro de la nave Viran.

El problema es que la Daiei ha canibalizado tanto al personaje, que en el momento en que los aliens terminan por controlar a la tortuga y la mandan a destruir Tokio, reciclan las mismas escenas en blanco y negro de Gamera el Invencible. Esto ya termina por ser un ultraje a la inteligencia del espectador (al menos hubieran filmado unas nuevas secuencias o les hubieran dado algo de color). Pero superado el momento, el film vuelve sobre sus carriles e incluso permite que los alienigenas derrotados se fusionen y generen a Viras – un calamar gigante -, para dar lugar al combate de monstruos de turno.

Lo que resulta notable, viendo todo el caleidoscopio de escenas de lucha, es que para ser un film infantil haya bastante sangre (u otros fluídos de diferentes colores). Gamera es bastante sangriento y letal, en contra de lo que es Godzilla, que suele despachar a sus enemigos con más clase. Aquí la tortuga desgarra a sus enemigos, les destroza la yugular o los incendia con su aliento de fuego. No está mal… salvo que éste es un film para niños.

A mi juicio es bastante digerible si a usted le gusta el Kaiju Eiga y se encuentra con el humor adecuado. Para el resto de los mortales seguramente será un insufrible bodrio, y un compilado de todo tipo de abominaciones cinematográficas. Pero para nosotros, los fans, es aceptable.

LA SAGA DE GAMERA

Los filmes de la saga de Gamera, la tortuga mutante gigante, son: Gamera, el Invencible (1965), War of the Monsters / Gamera vs Barugon (1966), Return of the Giant Monsters / Gamera vs Gyaos (1967), Destroy All Planets / Gamera vs Viras(1968), Attack of the Monsters / Gamera vs Guiron (1969), Gamera vs Monster X / Gamera vs Jiger (1970) y Gamera vs Zigra (1971). En los ochenta el monstruo tuvo un breve revival en Gamera Super Monster (1980). Recien en los 90 regresaría con toda la gloria en Gamera, The Guardian of the Universe (1995), Gamera 2: Assault of the Legion (1996), Gamera 3: The Revenge of Iris (1999) y Gamera the Brave (2006) – ¿Qué es el Kaiju Eiga? es un artículo que reseña los inicios y la historia del género japonés de monstruos gigantes.