Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco
USA, 2000: Will Friedle (Terence ‘Terry’ McGinnis / Batman), Kevin Conroy (Bruce Wayne), Mark Hamill (Joker / Jordan Price), Angie Harmon (comisionada Barbara Gordon), Dean Stockwell (Timothy ‘Tim’ Drake)
Director: Curt Geda, Guión: Paul Dini, Glen Murakami y Bruce Timm, Musica – Kristopher Carter
Trama: 50 años en el futuro. Bruce Wayne se ha retirado como vigilante enmascarado pero ha entrenado al joven Terry McGinnis para que asuma el nuevo rol de Batman, esta vez dotado de poderosos avances tecnológicos. Ahora Wayne se dispone a reasumir el control de su corporación después de varios años de ostracismo, pero la insólita reaparición de The Joker aborta la ceremonia de asunción de mando. McGinnis comienza a sondear, con la ayuda de la comisionada Gordon (la ex Batichica), el pasado de Bruce Wayne para intentar resolver el misterio, lo que lo lleva a ubicar a la última encarnación de Robin, Tim Drake, que ahora permanece en el retiro y trabajando como ingeniero civil. Y mientras tanto, los atentados del Joker continúan haciendo estragos en Ciudad Gotica, preparándose para dar un golpe letal a Bruce Wayne y su joven entenado.
Este es un film directo a video derivado de la popular serie animada Batman Beyond (1999 – 2001). Batman Beyond es la sucesora de una larga lista de versiones animadas producidas por la Warner, que comenzaron con la exitosa Batman: The Animated Series (1992 – 1995), y cuya repercusión generaría una enorme lista de secuelas y adaptaciones de otros superhéroes de la DC Comics utilizando el mismo estilo (The New Batman Adventures, Justice League, Superman: The Animated Series, etc), todas bajo la égida del equipo de creativos conformado por Paul Dini, Alan Burnett y Bruce Timm. La novedad de Batman Beyond es que se trata de una serie completamente original, desarrollada entre la Warner y DC antes de estar basada en algún comic previo.
Si bien Batman Beyond recupera mucho del sabor de Batman: The Animated Series, no deja de ser el mismo mono con diferente traje de seda. En todo caso, lo que hace Batman Beyond es seguir la escuela de Star Trek: The Next Generation, donde se toma a los exitosos personajes originales y se los mezcla en la licuadora, repartiendo las características de personalidad en otros caracteres con nombres diferentes. Del mismo modo que Riker y Jean Luc Picard son James T. Kirk divididos en dos papeles (y obviamente complementarios), aquí Tim McGuinnis es una suerte de Robin más despierto que utiliza el traje oficial de Batman, mientras que Bruce Wayne combina la sabiduría del encapotado con elementos del caracter original del mayordomo Alfred y hace las veces de soporte del nuevo superhéroe. Nada demasiado revolucionario que altere los elementos que hicieron exitoso al original, pero a la vez que parezca fresco.
Y, como era de esperar con esta versión futura del encapotado, sirve de excusa para mostrar a los villanos de siempre en nuevos trajes y con historias ligeramente alteradas. En esta versión directa a video regresa el Joker, interpretado magistralmente (como siempre) por Mark Hamill, para cobrarse venganza contra el septuagenario Bruce Wayne.
Como es habitual en las películas y series desarrolladas por el trío Dini, Burnett y Timm, la acción es espectacular y la trama interesante. Los climas están bien obtenidos, si bien Tim McGuinnis es – quitándole el traje – un personaje algo soso, pero la presencia de Bruce Wayne (Kevin Conroy) continúa manteniendo el halo de misterio que requiere el super héroe. En este futuro alternativo se suman elementos de interés como la presencia de la ex batichica, ahora a cargo del departamento de policía.
Batman Beyond: Return of the Joker sería una aventura standard más si no fuera por la incursión al pasado de Bruce Wayne (en particular, sobre la muerte del Joker original) que resulta apasionante. Ese tramo es el que eleva al film por encima de la media, y donde también se demuestra las debilidades de Batman Beyond frente a la serie clásica. La emboscada de Joker y Harley Quinn a Batman, Batgirl y Robin (Tim Drake) es fascinante, y es un show de Mark Hamill en toda su locura. Como en todas las versiones directas a video, el film se permite ser más cruento y violento, con varias muertes en primer plano, lo que le da un mayor impacto dramático a toda la escena. El problema es que, quitando esa secuencia, la película no tiene tanto misterio. Para peor la versión reencarnada del Joker es algo light y menos demencial, y la explicación final de su reaparición suena muy traída de los pelos.
Es una película más que correcta, pero uno no deja de reconocer que varias de las situaciones del film están resueltas de un modo muy artificial, como por ejemplo la irrupción del Joker en la mansión Wayne que debería haber concluído lógicamente con la muerte del millonario. Fascina desde el punto de vista del fan, ya que muestra versiones alternativas de los personajes en el futuro así como de sus historias, pero no ofrece mucho más que eso. Simplemente es un entretenimiento sólido y de calidad pero con poco misterio.