Crítica: Batman: Asalto a Arkham (2014)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

USA, 2014: con las voces de Kevin Conroy (Batman), Neal McDonough (Deadshot / Floyd Lawton), Hynden Walch (Harley Quinn), Matthew Gray Gubler (el Acertijo), Troy Baker (el Joker), CCH Pounder (Amanda Waller)

Director: Jay Oliva & Ethan Spaulding, Guión: Heath Corson, basado en los caracteres de la DC Comics

Trama: Un grupo de violentos supercriminales ha sido apresado por una agencia secreta del gobierno, la cual es dirigida con mano de hierro por Amanda Waller. Habiéndoles implantado una bomba microscópica en su cerebro, los criminales – Deadshot, Escarcha, Harley Quinn, el Capitán Boomerang, Araña Negra y King Shark – deberán aceptar una misión suicida a cambio de condonar sus respectivas condenas. Para ello deben urdir la manera de ingresar al Asilo Arkham – una cárcel de altísima seguridad y en donde residen los presos mas dementes y peligrosos – para robarle al Acertijo un pen drive que contiene información secreta sobre el gobierno. Pero la fachada secreta del operativo no tarda en explotar y, con ello, llama la atención de Batman, quien pronto se presenta en el lugar. Mientras los criminales lidian con el encapotado, intentarán descubrir la manera de anular la bomba que tienen en sus cabezas…. pero en medio del caos que han desatado, han liberado sin querer al Joker, el cual ha desenterrado una bomba atómica que tenía escondida desde hace años en el asilo, y la cual amenaza detonar en el centro mismo de Ciudad Gótica. Y ahora los maleantes deberán decidir entre escapar y permanecer indiferentes al holocausto atómico que el Joker está a punto de desencadenar, o convertirse en antihéroes y quedarse a frenar la amenaza, aún a riesgo de perecer o volver – de una vez y para siempre – a prisión.

Batman: Asalto a Arkham (2014) Al contrario de otras entregas de Batman en video, Batman: Asalto a Arkham está basada en la saga de videos juegos centrada en el asilo de Ciudad Gótica, ése a donde van a parar todos los bizarros sicópatas que el encapotado combate en cada una de sus aventuras. Dicho de otro modo, no tiene la densidad ni la consistencia de otras historias basadas en comics o miniseries gráficas, un detalle que se deja notar al poco tiempo de empezada la película. Aún con todo ello el balance termina siendo favorable, ya que las cosas se condimentan mucho cuando Batman y el Joker entran en escena, más por lo que hacen que por lo que dicen. Es uno de esos extraños casos en que el filme arranca mal y mediocre y, sobre el final, explota de manera épica y con toda la furia.

La historia de fondo está basada en el Escuadrón Suicida, el cual es un concepto creado por la DC Comics a finales de los años 50. El equipo original era un grupo de héroes de la Segunda Guerra Mundial, tipos valientes – pero comunes y corrientes – que se dedicaban a pelear contra amenazas sobrenaturales de todo tipo y color. La versión mas famosa del escuadrón vino en 1987, cuando John Ostrander decidió rebootear la saga, armándola como una especie de Los Doce del Patíbuloun equipo de criminales (super villanos, en este caso) obligados a encarar una misión suicida para ganarse su libertad -, y reciclando algunos de los villanos mas oscuros e ignotos de la editorial. Mas allá de convertir a los malvados en antihéroes, lo que hacía realmente diferente al Escuadrón Suicida era que la mayoría de sus integrantes fallecía con frecuencia. Aquí la regla se respeta al pie de la letra – hay un par de muertes sorpresivas y, lo mejor, gráficamente violentas -, a lo cual se suman un par de desnudos gratuitos como para subrayar el carácter adulto y descontracturado de la historia. De todas maneras como ésto es un comic de la DC, los villanos principales nunca mueren (o se salvan milagrosamente) por una cuestión de cartel y marketing, y las cosas nunca se ponen los suficientemente desagradables como para que uno deba apartar la mirada de la pantalla.

Y si las muertes, los desnudos y el protagónico de los chicos malos de la DC resultan interesantes, lo que aplasta a Batman: Asalto a Arkham es la chatura de los diálogos. El líder del grupo es Deadshot, pero es un tipo sin carisma; Harley Quinn bobea, pero carece de gracia; incluso la entrada en escena del Joker resulta insípida. O son obvios o hacen malos chistes. Por suerte llega Batman (a mitad del filme) y condimenta las cosas. Y como el operativo se sale de madre, todos los locos malos del Asilo quedan en libertad, con lo cual las cosas se ponen épicas. Hay momentos en que Batman: Asalto a Arkham se asemeja al climax de Batman Inicia, con la policía cercando el lugar y los desquiciados arrasando la ciudad.

El tercer acto es lo que salva a Batman: Asalto a Arkham de la mediocridad. Es como si el director hubiera terminado de hacer calentamiento y hubiera encontrado el punto justo de cocción. Hay sorpresas, hay acción bien filmada, hay varios cliffhangers repletos de tensión; es una lástima que todo el desarrollo previo carezca del nervio del último tramo, el cual bordea lo impecable.

Batman: Asalto a Arkham es un espectáculo pasable que empieza de manera mediocre y mejora muchísimo sobre el final. Salvo Kevin Conroy, las interpretaciones vocales son medio pelo, y quizás le faltaba mas info de contexto para darle mas substancia a la trama (por ejemplo, el trasfondo de Deadshot con su hijita…. algo que uno deberá buscar en el Wikipedia). El personaje de Amanda Waller – la sólida morena capaz de mandonear al mismo Batman y amenazarlo con revelar su identidad secreta – tiene un enorme potencial, lo mismo que lo del Escuadrón Suicida; lástima que el libretista acreditado no tiene el vuelo de un Peter Jackson o un Tarantino, con lo cual la interacción del grupo es mas aburrida que interesante, gracias a que se la pasan disparando sandeces estereotipadas y recicladas. De ser así, hubiera sido preferible esperar unas semanas más y haberle dado la oportunidad a un script doctor para que le pegue una saneada al libreto, antes que gastar tiempo, esfuerzo y dinero en algo chato que sólo termina por repuntar sobre la recta final.

LA SAGA ANIMADA DE BATMAN

Batman: La Mascara del Fantasma (1993), Batman and Mr. Freeze: SubZero (1998), Batman del Futuro: regreso del Joker (2000), Batman: el misterio de la Mujer Murcielago (2003), The Batman vs Dracula (2005), Batman: el Caballero de Ciudad Gotica (2008), Batman: Bajo la Capucha Roja (2010), Batman: Año Uno (2011), Batman: Regresa el Caballero de la Noche – parte 1 (2012), Batman: El Caballero de la Noche Regresa – parte 2 (2013) – El Hijo de Batman (2014) – Batman: Asalto a Arkham (2014) – Batman versus Robin (2015) – Batman: Bad Blood (2015) – Batman: The Killing Joke (2016) – Batman: Return of the Caped Crusaders (2016) – Batman vs Dos Caras (2017) – Batman: Gotham by Gaslight (2018) – Batman Ninja (2018) – Batman: Hush (2019) – Batman: Muerte en la Familia (2020) – Batman: The Long Halloween (Parte I y II) (2021)

ESCUADRON SUICIDA

Las versiones live action del grupo de mercenarios de DC son: Escuadrón Suicida (2016) – Escuadrón Suicida 2 (2021). En animación tenemos: Batman: Asalto a Arkham (2014) – Escuadrón Suicida: Deuda Infernal (2018)