Crítica: Altitud (Altitude) (2010)

Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco

Canada, 2010: Jessica Lowndes (Sara), Landon Liboiron (Bruce Parker), Jake Weary (Sal), Julianna Guill (Mel), Ryan Donowho (Cory)

Director: Kaare Andrews, Guión: Paul A. Birkett

Trama: Sara y sus amigos – incluyendo a su amigovio Bruce – han alquilado un avión y se disponen a viajar para acudir al último recital de Coldplay. La chica estrena su licencia de piloto, y todo el viaje parece ir sobre ruedas hasta que los controles del aeroplano se traban y la nave comienza a ascender de manera inevitable. Para colmo se topan con una gigantesca tormenta, y resulta imposible tanto comunicarse por radio como distinguir lo que hay en tierra. Forzados a tomar medidas desesperadas uno de los chicos se ofrece a salir del avión – amarrado a una soga – y a intentar forzar la movilidad de los alerones traseros para que Sara pueda hacer descender al aparato. Pero, en medio del caos y los relámpagos, un enorme tentáculo sale de los cielos y captura al muchacho ante la mirada atónita de sus compañeros. Y ahora queda en evidencia que hay algo, gigantesco y monstruoso, que está persiguiendo al avión e impide que éste pueda descender a tierra con total seguridad.

Altitud (2010) Esta ha sido una semana cinematográficamente muy mala. El 90% de las películas reseñadas son de regular para abajo. Es por eso que, en un alarde de generosidad, le damos cuatro atómicos a un título como Altitude. Oh sí, es una película modesta, chiquita, y con unos cuantos problemas, pero tiene una energía tal que termina resultando en una bocanada de aire fresco en medio de una semana inerte en entretenimiento.

Aquí el responsable es Kaare Andrews, un dibujante de comics responsable de algunas versiones de Spiderman y Hulk para la Marvel, y que tenía alguna experiencia previa como director de videoclips. Resulta obvio que tanto a Andrews como al libretista Paul A. Birkett les gusta mucho La Dimensión Desconocida, ya que todo el filme transpira como un episodio extendido de dicha serie, salpicado con algunos toques lovecraftianos. Aquí hay un grupo de jóvenes que se embarcan en un vuelo de placer, y al cual se le rompen los controles de mando mientras están en el aire. Ya con ese detalle daba para una película minimalista de cine catástrofe, con cinco tipos encerrados en una cabina de avión y teniendo que salir en pleno vuelo a arreglar los alerones de cola (!). Eso da pie a la mejor escena del filme, recargada de suspenso y tensión, y tan sólo por esa secuencia Altitud merece nuestra más acalorada recomendación. Lamentablemente lo que sigue ya no es tan prolijo; no es que el filme se transforme en un súbito bodrio, pero empieza a hilar cada vez más fino, disparando cosas cada vez más increibles (las cuales tienen una explicación que cualquier lector habitual de este portal podrá adivinar desde 500 km de distancia). El problema no es que aparezca un monstruo lovecraftiano en las nubes, sino que ése tan solo el principio de una parva de revelaciones bastante traídas de los pelos.

Ciertamente Altitud no es una remake canadiense del episodio clásico de The Twilight Zone Terror a 20.000 Pies de Altura el que también aparecía en el filme de 1983 -, que es algo que el poster del filme se encarga de sugerir. Acá ocurren bastante más cosas que la simple aparición del monstruo en las nubes, con lo cual el filme empieza correr el serio riesgo de transformarse en ridículo por acumulación de disparates. Por suerte la película se mantiene en vereda tanto por el excelente clima que genera Kaare Andrews así como por el sólido elenco que nutre la cinta. Hay que admitir que los personajes están mal escritos, y son una parva de clichés molestos – niña rica y sexy, interesada en un nerd muerto de frío; deportista borrachin, misógino y pedenciero; rubia histérica, y chico emo amante de la poesía fácil -, y a uno le resulta increíble como estos tipos se hacen llamar “amigos” ya que no pueden pasar más de cinco minutos sin que uno intente sacarle un ojo a otro; pero la troupe de jovenes actores que los encarnan lo hace con tanta energía y convicción que terminan por ser perdonables. La que se destaca por lejos es la bellísima Jessica Lowndes (que viene de la nueva Beverly Hills 90210), la que actúa bien, tiene gran carisma, y a la que este filme le debería abrir más de una puerta en Hollywood.

Altitud es un filme sólido y entretenido. Ok, el desarrollo del ultimo tercio hace fruncir el ceño a más de uno, pero no deja de ser una películita inteligente y bastante bien armada. Son cinco tipos encerrados en un avión, y el director hace maravillas con semejante escenario minimalista. Y teniendo en cuenta que esto está armado con dos pesos y una parva de desconocidos, los resultados que ofrece Altitud son superiores a la media por lejos, superando a sus propias limitaciones.