Volver al índice de críticas por año / una crítica del film, por Alejandro Franco
USA, 2015: Miles Teller (Reed Richards), Kate Mara (Sue Storm), Michael B. Jordan (Johnny Storm), Jamie Bell (Ben Grimm / la Cosa), Toby Kebbell (Victor Von Doom), Reg E. Cathey (Dr Franklin Storm)
Director: Josh Trank, Guión: Simon Kinberg, Jeremy Slater & Josh Trank, basados en el comic de la Marvel
Trama: Reed Richards y Ben Grimm son dos jóvenes estudiantes de ciencias que han desarrollado un pequeño prototipo de portal interdimensional. Su concepto es visto por el millonario Franklin Storm, quien los contrata y los pone a trabajar en compañía de sus hijos Sue y Johnny, amén del veterano líder del proyecto Victor Von Doom. Tras 7 años el esfuerzo ha dado su fruto, y el equipo ha dado a luz una cápsula capaz de viajar con seguridad a través del portal dimensional que han creado; pero, en una noche de borrachera, los cinco aprovechan para hacer su propio viaje inaugural – sin las medidas de seguridad apropiadas -, el cual termina en desastre al enfrentarse a una inesperada anomalía, quedando Victor varado en el mundo alienígena que han visitado, y dejando al resto del equipo seriamente herido. El problema es que, cuando se recuperan, descubren que han sufrido mutaciones de todo tipo – Ben es un gigante hecho de roca, Reed puede estirar su cuerpo como desee, Sue puede volver invisible y generar campos de fuerza, y Johnny se transforma en una antorcha humana voladora – y, negándose a volverse un conejillo de indias del gobierno, Reed aprovecha la ocasión para escapar. Pero, tras meses de clandestinidad, Reed es atrapado y remitido a los laboratorios del gobierno, siendo obligado a terminar un nuevo prototipo – ya que las autoridades desean crear tropas especiales con los superpoderes que han recibido los cuatro -. Y las cosas se saldrán de control cuando la nueva misión se tope con una versión mutante de Victor Von Doom, devenido en semidios todo poderoso del mundo alienígena en donde fue abandonado. Ahora los cuatro científicos deberán sumar sus superpoderes para detener a Von Doom, quien se ha vuelto loco y desea arrasar la Tierra en castigo por la fatídica suerte a la que lo han dejado librado.
Como Hulk, Los 4 Fantásticos parece ser una franquicia maldita que ningún productor de Hollywood puede remontar. Primero los derechos fueron a parar a manos de Roger Corman, quien produjo un filme de golpe y raje en 1994 con el fin de no perder la exclusividad de los mismos. El producto final fue un engendro que vivió en la leyenda, ya que estaba pensada para cumplir meramente el contrato y nunca ser estrenada en cines o video… hasta que se filtraron versiones bootleg via Internet, las cuales demostraron una cinta plagada de malos diálogos y efectos especiales patéticos. Aún con todo, Corman no pudo retener los derechos y después fueron a parar a manos de la Fox, quien se despachó con su propia versión mainstream en el 2005. Tanto Los 4 Fantasticos (2005) como su secuela del 2007 rayaron en la mediocridad creativa, fruto de haberle dado la franquicia a un tipo como Tim Story, el cual no entendía un choto de qué trataba el cine de superhéroes. Ahora viene esta versión regenteada por Josh Trank (Chronicle), la cual fue bastardeada por el 90% de la población del planeta y se hundió estrepitosamente en las taquillas. Y contrariamente a lo que uno podría anticipar, estoy en condiciones de afirmar que me ubico entre el 10% minoritario al cual le gustó la película, aunque hay que admitir que dista mucho de ser perfecta.
Comparada con los filmes de Tim Story, Los 4 Fantásticos 2015 es una película mucho mejor construída y guionada, y viene dotada de un cast realmente bueno. Este grupo de gente tiene buena química y se comporta como personas reales tomando decisiones racionales. Yo creo que el principal pecado de Josh Trank es quitarle a los Fantásticos toda su visión épica y transformarla en algo mas mundano e intimo; algo así como esperar algo sobreproducido al estilo de la remake de La Máquina del Tiempo (2002) – con visiones apocalípticas, mundos perdidos y toneladas de FX – y toparse con una versión indie del mismo tema, digamos Proyecto Almanac (2015). En realidad todo el filme respira un tufillo de película independiente, oscura, cronenbergiana (¿quien no pensó en el teletransportador de La Mosca?), lo cual está muy bien desde el punto de vista narrativo pero que se vuelve una tortura insufriblemente lenta para el fan de la historieta, quien espera que a los 15 minutos Reed Richards y su equipo vayan a patearle el trasero a Galactus u otro mega villano conocido. Si uno logra despegarse del comic, verá que la historia de Los 4 Fantásticos 2015 es buena; no espectacular, no brillante ni emocionante, pero es sólida y está bien contada. Lo que pasa es que este mismo libreto quizás no debería haberse rodado con los nombres de Reed Richards, Ben Grimm, Sue y Johnny Storm, etc atachados a los personajes. Cuando uno imagina a Reed Richards piensa en un cuarentón pintón con canas – émulo millonario de Albert Einstein y santo patrono de la humanidad -, no en un flaquito que recién terminó la secundaria, aún tiene acné y está lidiando con su primer proyecto científico. También es chocante – para el fan comiquero – ver a la Cosa hablando con la voz de pendex de Jamie Bell en vez de tener un vozarrón cascado al estilo de Michael Chiklis en las cintas de Tim Story. Johnny Storm brilla por su ausencia (carece del carisma de Chris Evans) y Sue Storm está mejor interpretada que en su versión Jessica Alba, pero no tiene mucha chispa con Reed Richards (quien se supone será su gran amor). Digo, como versiones alternativas funcionan bastante bien, pero para el comiquero Marvel suena a herejía, ¿o no?.
Lamentablemente la narración lenta y tranquila de Los 4 Fantásticos (o su casting juvenil) no son los peores pecados del filme. El punto es que semejante preparación debería preparar un momentum que nunca termina de llegar. Aún con todos sus problemas, yo hubiera llevado el filme a una duración de algo mas de dos horas, reservando la hora final para que el equipo desplegara sus poderes en toda su furia y se sacudiera de encima el prejuicio de la platea (algo parecido a lo que hizo Ang Lee con su versión de Hulk). Trank – o los ejecutivos de la Fox, vaya uno a saber quién, ya que la directiva metió mano en la película y le dió una patada en el tuje al director de Chronicle a último momento – deciden apurar el tranco en los últimos 20 minutos, resucitando de la nada a Von Doom – cuya versión me resulta bastante creíble… lástima que no le dan ni cinco minutos como para crecer como villano – y montando de golpe y raje un climax breve y soso en el planeta alienígena que han visitado. Todo es demasiado acotado y modesto, las acrobacias superheroicas son muy desabridas, y todo el show dista años luz de lo que uno espera de un filme de superhéroes (comparen esta breve pelea con la pirotecnia desplegada en otro filme oficial Marvel como, por ejemplo, Vengadores: la Era de Ultrón).
Los 4 Fantasticos 2015 no es el peor filme de superhéroes que exista. Tiene su cuota de cosas buenas pero nunca logra incendiar las expectativas creadas. A su modo es sólida y su visión es válida, lástima que se queda cortísima en el apartado carisma y destrucción, detalles que resultan imperdonables al comiquero de raza.